Circular desde San Juan de Muskiz, pasando por Pobeña, Cobarón y camino Itsas Lur por los acantilados.

Interesante ruta circular relativamente larga (de algo mas de 18 km), aunque con un desnivel acumulado positivo escaso, ya que solamente se suben discretas cuestas, que acumuladas a lo largo de la ruta suman solamente 416 metros. Sin embargo, creo que esta ruta podría mejorar mucho y ser bastante más asequible a todo el mundo si en vez de partir de San Juan de Muskiz lo hacemos desde Pobeña, siguiendo después exactamente el mismo itinerario, y volviendo de nuevo a Pobeña. Es decir, hacer el mismo itinerario circular desde Pobeña, no desde San Juan de Muskiz. Así reduciríamos la ruta en al menos ocho km. Sinceramente, el tramo desde San Juan hasta Pobeña no le añade a la ruta un encanto especial, siendo del todo prescindible.

De todas formas, como digo, esta ruta desde San Juan de Muskiz es la que hemos hecho hoy y así la hemos grabado en wikiloc, con lo que la transmitimos y relatamos con toda fidelidad. Verá el lector, lectora, o senderista, que todos los desvíos y cruces están señalizados con la foto de mis amigos o de mis bastones indicando el sentido de la marcha, con lo que no existe la menor duda.

Aparcamos el coche en el barrio de San Juan en la calle de Las Acacias y comenzamos rodeando unas casas adosadas para seguir por su parte posterior por el camino de La Campa, señalizado en el primer cruce. Seguimos adelante por el barrio Castaños, girando a unos metros a la derecha y siguiendo por el barrio de Las Llanas sin desvío alguno hasta llegar a un cruce junto a una casa pintada de rojo donde nos desviamos a la derecha. En la citada casa una placa en su fachada reza que en ella vivieron Dolores Ibarruri y su marido Julian Ruiz desde el año 1917. Ambos compartieron diecisiete años de matrimonio y seis hijos. Seguimos recto por la carreterita hasta llegar a la carretera general N–634, que cruzamos de frente y un poco hacia la derecha para desviarnos a unos metros bruscamente a la izquierda por el camino Cordillas, que seguimos sin desvío alguno. Veremos algunas señales de pinturas rojiblancas de la GR 123 (Vuelta a Bizkaia) por el camino que nos conduce (Camino Molinillos) hasta pasar por un túnel bajo la autopista, siguiendo sin desvíos durante un buen rato. Llegamos a los aledaños de Pobeña en un cruce donde giramos a la izquierda hasta acceder a la carretera general BI–3795, girando por ella a la derecha.

Estamos ya en Pobeña, y hasta este mismo cruce llegaremos después, para volver a nuestro punto de inicio por el mismo camino que hemos traído hasta ahora. Todo el tramo hasta aquí es el que decía al principio que se puede eliminar y hacer la ruta partiendo de Pobeña.

Ahora seguimos por la carretera unos cien metros y giramos bruscamente a la izquierda para tomar una pista en ascenso que sale a nuestra izquierda junto a un gran cartel de la Via Verde de Itsas Lur. A partir de aquí coincidimos con un tramo de la etapa nueve del Camino de Santiago del Norte que va desde Portugalete hasta Castro Urdiales. Las flechas amarillas del Camino de Santiago nos servirán de referencia. Una vez tomado el desvío, el camino sigue en suave ascenso entre el arbolado hasta llegar a un cruce donde giramos a la izquierda. Estamos ya en el camino de Cobarón. Tras pasar un par de casas seguimos por buen camino hasta un cruce donde debemos girar a la derecha, para enseguida girar de nuevo a la izquierda, bajando por una senda que ataja una curva. Una vez de nuevo en el camino llegamos a una rotonda donde una flecha amarilla nos indica seguir hacia la izquierda, por la carretera BI–3795. Seguimos por esta unos cientos de metros para desviarnos a la derecha evitando el gran bucle que da acceso a la autopista A–8.

Seguimos por el amplio camino sin desvío alguno hasta llegar a una carretera donde la pista se desvía a la derecha. Siguiendo por él llegamos al poco a otro cruce junto a unas casas, donde cogemos el camino de la izquierda. El camino ahora, herboso y con la visión de la empresa Derivados del Flúor casi colgada sobre el mar y el inmenso mar Cantábrico de frente, entra en una zona de praderíos y, poco a poco, en ligero descenso junto a los postes del gasoducto, va bajando hasta acceder al camino costero sobre los acantilados. Entramos en el tramo más interesante y espectacular de la ruta, sin desmerecer todo lo andado hasta ahora.

Nada mas llegar a la amplia pista giramos a la derecha para, en unos metros, parar un poco en el amplio mirador y aparcamiento situado encima de las ruinas de antiguas instalaciones mineras. La panorámica costera que divisamos es maravillosa. Mientras tomamos unos tragos de agua vemos cómo el mar golpea furiosamente los acantilados levantando nubes de espuma. Iniciamos el camino costero al lado de un cartel pintarrajeado del Ayto. de Castro Urdiales que indica el inicio de la Vía Verde del Piquillo, alertando del posible desprendimiento de cascotes desde los acantilados situados por encima nuestro.

Seguimos por el horizontal camino que sigue el trazado de una antigua vía férrea y que daba servicio a toda la zona minera que por aquí existía. Al poco pasamos un túnel con un entramado de madera para evitar la caída de piedras sobre los paseantes. El amplio camino asfaltado sigue adelante y pasamos ante una fuente, para llegar al poco a una zona con unas antiguas edificaciones mineras en la que el camino gira a la izquierda a muy pocos metros por donde hace un rato hemos pasado. Ahora nos desviamos de nuevo hacia la costa, llegando al parking, mirador y zona de picnic de Cobarón, donde también nosotros aprovechamos a hacer nuestro propio picnic. Un poco de fruta, chocolate y bebida isotónica nos reconfortan lo suficiente para seguir nuestro camino, que aún nos queda mucha ruta que andar.

Como digo, el amplio camino sigue adelante bordeando los acantilados durante un buen rato hasta llegar a una zona donde existía un antiguo cargadero de mineral (Cargadero del Castillo), y que parece están recuperando. Hay una moderna pasarela sobre el mismo para apreciarlo con más detalle. La ruta va girando hacia la derecha andando por el lateral de la bocana de la playa de La Arena, que se ve en toda su amplitud abajo a nuestra izquierda. Al poco se acaba la ruta costera para, tras bajar una larga escalinata bajo las encinas, llegar a la esquina de la playa de La Arena, a pocos metros de la ermita de Nuestra Señora del Socorro, donde giramos a la derecha por la carretera de la ermita. Estamos en Pobeña.
Seguimos por la carretera sin desvío alguno para pasar tras unos cientos de metros junto al desvío donde antes hemos abandonado la carretera general BI–3795 junto al gran cartel de Itsas Lur y hemos seguido parte del Camino de Santiago.

A partir de ahora y hasta el inicio de la ruta vamos a seguir exactamente el mismo camino por el que hemos venido. Claro, si hubiéramos partido en la ruta desde aquí (Pobeña) – algo mucho mas lógico por otra parte – nos hubiéramos ahorrado al menos ocho kilometros entre la ida y la vuelta. Y como seguimos exactamente el mismo camino de ida no lo vamos a describir, ya que si tenemos alguna duda no hay más que seguir la ruta por wikiloc.

En definitiva, ruta relativamente larga que podemos acortar y hacerla mucho mas viable partiendo desde Pobeña y no desde San Juan de Muskiz. Que cada cual juzgue, salga desde donde quiera y vaya por donde desee. De todas formas es una ruta con unos paisajes de quitar el hipo, que recomendamos encarecidamente. Nosotros volveremos desde Pobeña, seguro, para quedarnos a comer en alguno de sus excelentes restaurantes.

Un saludo a todas y todos.