Circular La Cancelilla Igueste S. Andres

Una ruta para disfrutar de los sentidos. La Naturaleza, afortunadamente, aún puede sorprendernos con sus contrastes y maravillas. Respetarla y cuidarla son la clave para que podamos seguir encontrarnos con lugares llenos de magia y encanto, al igual que los visitados en esta ocasión. Siempre Anaga, ese paraíso, que tenemos la inmensa suerte de poder patear sin cansarte aunque repitas mil veces.
Una ruta moderada en exigencia y con una duración de siete horas para poderla recorrer sin prisas.
Decidimos comenzar en el mirador de la Cancelilla, junto a la Carretera de la Cumbre TF 123. Descendemos por el sendero de la izquierda, dirección Igueste de San Andrès. Estamos en las Rehoyas, con paisaje de laurisilva. Seguimos por el Lomo del Bucio. Cruzamos el cause del barranco de Igueste y seguimos por la derecha. Impresionantes moles de piedra custodian el borde del barranco y podemos imaginar la fuerza de éstas rodando montaña abajo. Llegamos a la Pista de los Juncos. Seguiremos el sendero TF 5 hacia Las Casillas pasando por Fuentecillas y Gollada el Cuchillo. Un grupo de casas abandonadas nos indica que estamos en Las Casillas. Seguimos cerca de la Hoya Gollada las Veredas. Atravesamos el barranco el Dornajo y, unos metros adelante, el inicio del barranco de Ijuana para llegar a la carretera 123. Pasamos por el Salto de Ijuana. Atravesamos varias veces la carretera y llegamos al inicio de la pista que lleva a Cabeza de Tejo. Subimos por el camino la Chamuscada por un pequeño sendero. Continuamos por la Ensillada. Nuevamente un poco de carretera. Seguimos por Cabezo la Mina, el Pijaral, un corto recorrido por la TF 123 y estamos en el punto de partida.
La vegetación está constituida primordialmente por el monteverde, es decir, nutridos ejemplares de laurisilva y fayal-brezal de entre los que cuenta con numerosos endemismos. Destacan algunas especies, tales como el saúco, la esparraguera, la adelfa de monte y la violeta de Anaga. Sin embargo, la principal protagonista de este ecosistema es una especie vegetal denominada píjara: es un helecho que puede sobrepasar ampliamente los dos metros. Posee un color verde oscuro y es típico de las zonas más sombrías y húmedas de Anaga.
Cuidado en la zona del Pijaral con los resbalones debido a la humedad del terreno y no olvidarse de solicitar el permiso en el Cabildo para poder circular por esta zona protegida.