CIRCULAR POR LOS TUNELES DE BREGUA Y SUBIDA AL MONTE DO CASTRO

A CORUÑA

Comenzamos esta circular en la aldea de O Corgo de Abaixo, descendemos desde el pueblo por bosque atlántico hasta llegar a las proximidades del río Grande que por error atravesamos por un puente, damos la vuelta y entramos en un prado donde encontramos una traza de camino que avanza paralelo al río y que nos llevará a una carretera que viene de O Campo de Trixezo, allí encontraremos la entrada a la abandonada vía férrea Santiago-A Coruña, inaugurada en 1943 estuvo en funcionamiento hasta el año 2006 en que quedó sin servicio por la apertura de la variante de Bregua entre Boedo y Uxes. La antigua vía se encuentra en un estado total de abandono y la naturaleza ha ifo recuperando terreno, adueñándose de muchos tramos lo que aún la hace más espectacular.

Caminando por la vía llegaremos al primero de los túneles, de dos kilómetros de longitud, obligatorio el uso de frontal o linterna para pasar por el, el silencio y la oscuridad, además de la espectacularidad de la entrada sobrecogen. Impresionante y fascinante penetrar en un lugar así. La luz al final del túnel desde la lejania apenas es un punto que se va agrandando a medida que avanzamos hacia ella, llenando de verde el hueco de salida del profundo túnel. Seguiremos por las vías hasta el pueblo de Boedo.

Tras un corto tramo por carretera volvemos a la abandonada vía para llegar al segundo túnel, más corto, 800 metros pero igual de fascinante. De nuevo el silencio y la oscuridad rotas por la luz del frontal y las pisadas. Al inicio muchas ramas de árboles que alguien llevó allí y escombro, que raro que el ser humano no haya dejado huella, aún así se pasa bien, las mismas sensaciones, la salida del túnel aún es mucho más hermosa, el verde recuperador de la naturaleza salvaje. Apagamos y guardamos el frontal, nuestra próxima parada la vieja estación de Bregua.

Hoy convertida en restaurante, pasamos por ella y aquí dejamos la aventura por la vía, de nuevo un corto tramo de carretera que dejaremos pronto para coger un camino hasta la aldea de A Esfarrapada, atravesar la AC-523 y comenzar la subida al Xalo, concretamente al Monte do Castro. Senderos y caminos hasta coronar esta atalaya que nos muestra el litoral atlántico desde Arteixo hasta casi Valdoviño, divisamos perfectamente lis dos puertos exteriores de Coruña y Ferrol.

No queda más que descender por caminos para bajar a O Corgo y cerrar esta preciosa y sorprendente ruta.

NOTA. La ruta en sí no es difícil, lo he puesto por el largo recorrido entre túneles que obliga a llevar frontal y estar atento a la pisada.