Circular río Cebollón, desde La Resinera al Puente Monticana

Circular por el El Río Cebollón, que, aún estando en el mismo Parque Natural que el famoso Chillar, no es tan conocido, ni está tan concurrido como este último. Pero que si que es igualmente bonito o mas, bajo mi particular punto de vista.
De aguas limpias, frescas e incluso, con truchas.
Su nacimiento se da de la unión de las aguas aportadas por los barrancos de la Culebra y de las Alfajas en la espectacular cascada bajo el puente de la Monticana en pleno Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, siguiendo desde ahí el curso hasta llegar a La Resinera, donde se une al río Algar y al río Cacín, de cual es afluente, desembocando, finalmente, en pantano de los Bermejales.
Este Parque Natural no es tan conocido ni frecuentado, pero si enorme y lleno de rincones bonitos: ríos, cascadas y pozas de agua cristalinas, vegetacion abundante, practicamente durante todo el recorrido y todo el año.
Ésta, es una ruta que, en este caso haremos circlar, aunque es mas frecuente hacerla lineal por el río, ida y vuelta. En ambos caso es espectacular.
La comenzamos, dejando los coches en la Resinera, o punto de información actualmente, continuamos por el Camino de la Plancha, carril, hasta llegar al puente de la Monticana. Seguimos unos metros mas y hay un carril de bajada (muy tapado por la abundante vegetación y la falta de paso, hay que ir muy atento de no pasarlo), de ahí bajamos a la cascada, paramos un rato, hacemos las típicas fotos y emprendemos el camino de vuelta. En este caso, lo hacemos por el río, menos en algunos tramos que tomamos un carril paralelo en todo su recorrido al río, pudiendo bajar en cualquier momento a darnos un baño en cualquiera de las innumerables pozas que nos vamos encontando por su recorrido.
Y hasta llegar nuevamente a la Resinera y así completar la circular.
Son algo más de 23 kms, por lo que se recomienda una mediana, buena preparación física, calzado adecuado y agua abundante.
Ruta muy recomendable y que a mí, particularmete, me encanta, y que sin duda, merece el pequeño esfuerzo.