Circular Sierra de Parapanda 2019 desde Alomartes

Intelligent Benchmark Prediction: IBP 104
¿Qué es IBP index?
ESFUERZO de una ruta = Forma física + Ritmo de avance + Climatología + IBP (¿+ nivel de estrés?)

RESÚMEN

Tipo de Ruta: Circular de ~21 km.
Tipo de Terreno: Sendero (85%), Pista (15%)
Indicada para: Senderismo/Montañismo
Fecha: 08/12/2019

Ruta circular rodeando la sierra de Parapanda subiendo al Morrón de la Sierra de Parapanda desde Alomartes, descendiendo por el Tajo de las Granjas (IGN, OpenStreetMap) y regresando por la Hoya de los Endrinos y los Montes Orientales.

ADVERTENCIAS:

TODO LO DESCRITO EN ESTA PÁGINA SON OPINIONES PERSONALES SUBJETIVAS Y NO IMPLICAN NINGUNA GARANTÍA. LA RUTA PROPORCIONADA ES UNA ORIENTACIÓN APROXIMADA Y NUNCA UNA VERDAD ABSOLUTA. ES RESPONSABILIDAD DE CADA UNO TOMAR LAS PRECAUCIONES NECESARIAS Y VALORAR SU CAPACIDAD PARA AFRONTAR LOS RIESGOS DE LA MONTAÑA.

EN RUTA:

Comenzamos la ruta desde el Árera Recreativa de Alomartes, población granadina a la que se accede fácilmente por la A-336.

(Árera Recreativa de Alomartes)

Atravesamos el Cortijo de Parapanda, acompañados por los efluvios de las granjas porcícolas allí situadas. Cruzamos la arboleda en dirección NO y atravesamos la Cañada Honda, en un ascenso suave y contínuo.

(Cañada Honda)

El camino llega junto a una antiga Casa forestal y gira en dirección Norte. A partir de este punto la pendiente se hace algo más acusada. El trayecto discurre por en medio de un agradable bosque, aunque seguir el sendero original se hace arduo porque se ve interrumpido en numerosas ocasiones por troncos y ramas caidos. Al mismo tiempo las profundas rodadas de motos han erosionado o destruido muchas partes de dicho sendero de herradura. Así pues hace falta prestar atención para no perderlo despistados por las marcas de las ruedas de motos.

(Sendero muy roto por troncos y ramas)

Conforme vamos ascendiendo el sendero se hace más claro y entramos en una zona donde se ve bien balizado.

(Sendero balizado)

En el kilómetro 2 del recorrido accedemos a un cruce importante. Llegamos al Cerro de los Santos y a este punto regresaremos por el sendero que conecta con la Calera. De momento inspeccionamos la entrada de un sima vertical y nos aupamos a lo alto del cerro para gozar de sus vistas.

(Cruce Cerro de los Santos y sendero a la Calera)

Continuamos un poco más al Oeste y visitamos la Cueva del Agua. Es una gruta poco profunda. Se ve que ha sido utilizada como refugio de animales y quizás para hacerla más cómoda se han arrancado todas sus estalactitas. Algunas rocas ahuecadas han sido convertidas en pequeños depósitos de agua. Las vistas merecen la pena. El cartel informativo es ilegible.

(Cueva del Agua. Vistas)

Unos centenares de metros más adelante llegamos a un cruce de senderos. Seguimos el de la derecha.

(Cruce. sendero a derecha)

Enlazamos con un sendero rectilíneo y bien dibujado. Por él ganaremos suave pero rápidamente unos 100 metros de altitud.

(Sendero original)

En el siguiente tramo enlazamos con un zigzagueo vertiginoso que nos hará ganar otros 200 m y situarnos en la curva de nivel de los 1.300 m.

(Sendero zigzagueante)

Terminado el zig-zag se abre el paisaje a una meseta pedregosa donde seguiremos ascendiendo, pero ya de manera muy suave.

(Meseta rocosa)

En el siguiente cruce tomaremos la desviación de la izquierda. Nos llevará casi en línea recta a lo alto de la meseta.

(Cruce. Izquierda)

Tras sobrepasar la parte alta, giramos un poco a la derecha y descendemos un poco. Enseguida nos tropezamos con una enorme grieta artificial. Debió ser una cata de cantera fallida, pero por su inmenso tamaño imaginamos el enorme esfuerzo que supuso.

(Cata de cantera)

Llegando a la Hoya del Brezal atravesamos un cruce donde nuestro sendero conecta con el PR-A 284 (Sendero Homologado por la Federación Andaluza de Montañismo).

(Cruce con Sendero PR-A 284)

Desde este cruce se divisa claramente un recorrido que corta directamente hacia el Morrón. Pero nosotros vamos buscando el sendero original y por ello seguimos las balizas. Nos llevan primero hacia la izquierda por la pista, para enseguida desviarse a la derecha. Nos introducimos en el bosque y vamos siguiendo el cómo sendero de ascenso.

(Sendero al Morrón)

Salimos a la pista que conduce a las antenas que colonizan la cima del Morrón. La seguimos hacia la derecha, buscando la base de la instalación principal (antenas TV).

(Pista)

El vértice geodésico no es accesible por encontrase en el interior del vallado de las antenas.

(Vértice geodésico del Morrón, 1.608 m)

Desde el Morrón las vistas son excelentes, pero la proliferación de antenas estorba el disfrute de los paisajes. Así que descendemos de nuevo a la pista y tomamos dirección NE, hacia las antenas de telefonía. Apenas un par de metros quedan libres de vallado y dan acceso al Mirador del Morrón, donde las panorámicas mejoran un poco.

(Mirador del Morrón)

Retrocedemos hasta el poste indicador y giramos a la derecha, hacia el pedregal. Hay que buscar las marcas blanco/amarillas que pintadas en las rocas nos van indicando la dirección a seguir.

(Siguiendo las marcas de pintura)

Una vez adentrados en el mar de piedras, localizamos al fondo los extremos más altos de unas antenas. Ellas nos indican la dirección del Mirador de la Caseta. Y siguiendo las marcas alla nos dirigimos.

(Hacia las antenas. Siguiendo las marcas de pintura)

Accedemos a un tramo de pista y ella nos lleva directamente al citado mirador, cuya redonda silueta se recorta sobre el fondo de Sierra Nevada.

(Mirador de la Caseta)

Echamos un vistazo al cartel informativo. Éste sí está en perfecto estado y nos permite reconocer los perfiles de los elementos geográficos más característicos visibles desde este privilegiado observatorio.

(Mirador de la Caseta. Cartel informativo)

Tras un descanso y un refrigerio, emprendemos ahora el descenso en dirección Norte. Intentamos seguir las marcas de pintura, pero en ocasiones se hace bastante dificil no perderlas. Algunas están colocadas en piedras bien visibles, pero otras no.

(Marca bien visible)

Especialmente "poco visible" resulta la marca de entrada al Tajo de las Granjas. La marca está situada en una piedra que resulta dificil de ver si no te acercas a pocos metros.

(Tajo de las granjas. Entrada al descenso)

Iniciamos la bajada con bastante cuidado porque sobre todo al principio el descenso es bastante vertical y las piedras están algo húmedas. Tenemos como referencia un puntal que divisamos en la parte baja. Las marcas de pintura, ahora más visibles, nos guían hacia él.

(Tajo de las Granjas. Hacia el puntal)

Al echar la vista atrás podemos admirar las verticales paredes del Tajo de las Granjas.

(Vista del Tajo desde el puntal)

Giramos ahora a la izquierda, sin sobrepasar el puntal. Continuamos el descenso, ahora en dirección Norte.

(Giro hacia el Norte)

Llegamos al final del descenso. Nos encontramos un poste señalizador con dos indicaciones. Una apunta hacia el sendero que hemos descendido. Ahora vamos a seguir la otra, en dirección SE.

(Fin del descenso)

Llevamos ya unos 12,5 km de recorrido y la parte más dura ya está hecha. Seguimos avanzando y unos centenares de metros más adelante pasamos junto a un Helipuerto Forestal.

(Helipuerto forestal)

Giramos al Este y enseguida enlazamos con el sendero balizado PR-A 284. Vamos ahora por una pista y tras 200 metros pasamos junto a la fuente de Ramos.

(Fuente de Ramos)

En el siguiente cruce, situado al pie del Mirador de la Caseta, seguimos por la izquierda. El camino de la derecha nos llevaría hacia el cruce de la Hoya del Brezal, donde vimos la enorme Cata de Cantera.

(Desvío a la izquierda)

Nuestro camino desciende en dirección al Cerro de la Mesa. Al llegar a su altura abandonamos el camino y nos introducimos en un pequeño sendero que nos conducirá hasta la Hoya de los Endrinos.

(Desvío hacia la Hoya de los Endrinos)

Cruzamos la Hoya de los Endrinos y giramos a la izquierda, en dirección Este, para descender atravesando el bosque.

(Hoya de los Endrinos. Vista atrás)

Descendemos por una zona muy pedregosa y siguiendo un sendero bastante marcado por el paso de motos y bicicletas.

(Descenso desede Hoya de los Endrinos)

Llegando al kilómetro 16 de nuestro recorrido nos encontramos una bifurcación. La ruta más habitual suele ser la de la izquierda, pero el instinto exploratorio nos pide reconocer el otro. Así pues nos lanzamos por la derecha suponiendo que este sendero podrá desembocar (como así será) en la Calera cercana al Cerro de los Santos.

(Sendero a la Calera y Cerro de los Santos)

Conforme vamos adentrándonos en este sendero comprendemos nuestro acierto. El camino es precioso. No está roto por el paso de motos. Se ve claramente que era un sendero de herradura muy frecuentado. La estructura de piedras de refuerzo aún se conserva en buen estado. Además las panorámicas que nos ofrece son magníficas. A ello contribuye en buena medida que su trazado se mantiene siempre por encima del nivel de los 1.000 metros.

(Sendero a la Calera. vistas a Íllora y al perfil montañoso del horizonte)

Caminamos por los Montes Orientales y poco a poco llegamos a la base de la Peña del Águila.

(Peña del Águila)

Llegamos a la Calera (Km. 18,6), situada en lo alto de la Cañada Honda, aproximadamente en el nivel de los 1.080 m de altitud. Hay un desgastado cartel informativo y quedan restos de lo que antaño fuera el horno de cal.

(Calera)

Apenas medio kilómetro más de recorrido y nos encontramos en el cruce del Cerro de los Santos, ya visitado al inicio de la ruta. Sólo nos queda recorrer en sentido inverso los aproximadamente 2 km de sendero para retornar al inicio de la ruta.

(Cruce del Cerro de los Santos)

Descendemos con rapidez para aprovechar las postreras luces del atardecer. Atravesamos el Área Recreativa, esta vez bajando por el cortafuegos y terminamos así nuestra ruta.

(Llegando al Área Recreativa de Alomartes)
¡Disfrutadla!
"La meta es el camino"