Circular Villa de Arico-Camino de La Cisnera-El Río- Camino Real del Sur

Comenzamos avanzando unos metros por la carretera general TF-28 hasta la Iglesia de San Juan Bautista para continuar siguiendo el PR-TF 86 por la Calle Benítez de Lugo y Calle Calvario, pasando una antigua fuente, los Lavaderos del Lomo después y más adelante junto a la Ermita de El Calvario.

Después de algo más de cien metros de la ermita abandonamos el PR-TF 86 que se dirige hacia El Contador y la zona de escalada de Ortiz tomando a la izquierda por el Camino de La Cisnera, según la señal hacia La Cisnera y El Río por una calle asfaltada que pronto continua de tierra y desciende hacia el cauce del Barranco Moreno. Cruzamos el barranco y en pocos metros nos desviamos a la izquierda según una señal marcada en un poste de madera, hacia el cauce del Barranco de la Fuente Blanca.

Avanzamos unos pocos metros hasta encontrar una señal a la izquierda sobre una gran piedra que indica la dirección del Camino de La Cisnera.

Antes de seguir este camino continuamos ascendiendo por el cauce, en este tramo el barranco toma el nombre de Barranco de la Magdalena o Barranco de Abejones, con algún que otro desnivel no muy difícil de superar unos 1.2 km hasta la Galería de Abejones, donde un gran desnivel en el cauce nos impide continuar, regresando para continuar el Camino de La Cisnera.

El camino asciende con moderada pendiente guiándonos también de una tubería, con vistas a un gran risco de tosca a la izquierda que desciende hasta el barranco, pasa por una zona de fincas hasta una pista asfaltada.

Continuamos de frente por la pista de tierra que cruza la pista asfaltada, pasando Hoya el Guirre y más adelante un barranquillo, después continua como pista asfaltada, el Camino de Fuente Blanca, hasta un cruce en el que continuamos por calle San Diego, también asfaltada, que desciende hacia el cauce del Barranco Tagoro y sigue hasta cruzarnos con otra pista asfaltada. Descendiendo a la izquierda se continúa hacia La Cisnera.
Nuestro camino va a la derecha de esta pista según la señal de El Callejón, ascendiendo solo unos metros para después desviarnos a la izquierda atendiendo a la indicación de las señales, por la Pista Lomo el Conde con dirección a El Río.

Seguimos la pista Lomo el Conde, sin desviarnos que en pocos metros continua en moderado descenso, pasando una zona de fincas y los cauces del Baranquillo el Hornillo y Barranco Fuente el Asno después, por tramo donde se conserva aún algo del antiguo empedrado.
Una atarjea sobre un puente en estado ruinoso cruza el cauce del Barranco Fuente el Asno, continuando en suave ascenso, pasando también otros tramos empedrados para volver a descender hacia el cauce del Barranco de Carmona, que es el nombre que toma el Barranco de Guasiegre en este tramo.

Salimos del cauce para más adelante descender, con tramos de empedrado original, hacia el cauce del Barranco del Azúcar y continuar después el camino que sigue más tarde como pista agrícola hasta una pista asfaltada.

Tomamos esta pista a la izquierda descendiendo con moderada pendiente hasta la Calle San Bartolomé también asfaltada, que abandonamos en una curva, siguiendo de frente el camino que lleva hacia los Lavaderos del Río.

Desde Los Lavaderos del Río se continúa descendiendo el camino que otra vez lleva a la Calle San Bartolomé por la que avanzamos hasta la Iglesia de San Bartolomé, en El Río. Cruzamos la TF-28 y después de unos metros más descendiendo por esta calle llegamos hasta un cruce con la Calle El Barranco y Calle las Flores que siguen el trazado del Camino Real.

Seguiremos el Camino Real, señalizado con marcas de sendero, de vuelta a la Villa de Arico. Tomamos a la izquierda por Camino El Barranco, primero descendiendo y después llaneando. En el cruce tomamos de frente por Calle la Montaña, también asfaltada, por la que poco después se sigue descendiendo, descartando los desvíos a la derecha, con dirección al cauce del Barranco del Azúcar.

Salimos del cauce que sigue un tramo del empedrado original del Camino Real, hacia el cauce del Barranco Guasiegre, que también conserva parte de él.
Ascendemos del cauce, el camino continúa empedrado, para después en suave pendiente salvar los cauces de dos barranquillos, el Barranquillo de los Gatos y el Barranquillo de los Atajos, desde donde el camino continua en moderado ascenso hacia una construcción solitaria en la zona de Las Crucitas.
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Continuamos la pista sin desviarnos hasta que llega a zona asfaltada, la Calle de las Crucitas, por la que seguimos hasta unos metros antes de llegar a la TF-28, donde nos desviamos a la derecha siguiendo una marca de sendero en un poste de madera, por un camino que lleva hacia el cauce del Barranquillo de la Rasca, del que saldremos ascendiendo en moderada pendiente hasta la carretera TF-28.

A algo menos de cien metros siguiendo la carretera a la derecha, después del restaurante, tomamos a la derecha por una pista de cemento que lleva a Calle Los Franciscos, por la que descendemos unos pocos metros y giramos a la izquierda también descendiendo, hasta que acaba el asfalto.

Continuamos a la derecha por un camino con el empedrado en muy buen estado de conservación, hacia el cauce del Barranquillo la Zumbadera desde el que ascendemos hasta una calle asfaltada, la Calle Gelesa,, continuando por ella de frente unos cien metros para desviamos a la derecha por pista de tierra hacia el cauce del Barranco de la Fuente, que remontamos hasta la carretera TF-28.

Finalmente seguimos a la derecha por esta carretera los últimos 400 metros que nos separan de nuestro punto de partida (después de unos metros por TF-28, hay una señal de sendero a la izquierda siguiendo unas escaleras de piedra, por donde continúa realmente el sendero señalizado y que igualmente llevan a nuestro destino.

Esta ruta sigue el mismo trazado, a excepción del tramo extra que nos llevó por el Barranco de la Magdalena y los últimos metros que hicimos por carretera, que la ruta que describe con todo detalle Francisco Fariña y que puede consultar en este enlace:

Villa de Arico–El Río-Villa de Arico (Por el Camino de la Cisnera y regreso por el Camino Real del Sur







La Villa de Arico, conocida también como El Lomo, fue declarada como Bien de Interés Cultural en 2005 con categoría de Conjunto Histórico. BIC-Villa de Arico

Su principal edificio de principios del siglo XVII es la Iglesia de San Juan Bautista, situada en la Plaza de Los Condes de Santa María de Abona. Aunque en principio se constituyó como una pequeña ermita, en 1639 se erigió como parroquia. En su costado derecho adosada a la Iglesia está la casa parroquial, añadida a finales del siglo XIX o principios del siglo XX. En 1985 fue declarada como Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento. BIC-Iglesia de San Juan Bautista

Las casas más antiguas siguen la Arquitectura Popular Canaria. Generalmente son de gran austeridad y organizadas en torno a un patio rectangular, que quedaba abierto a la calle. En un lado del patio están las cocinas y bodegas, enfrente los dormitorios, y sobre éstos un granero, cubierto de teja como el resto de dependencias al que se accede mediante una escalera exterior de madera.

La Calle Benítez de Lugo parte desde la misma plaza e Iglesia de la Villa y llega hasta el chorro de agua pública, erigido en el año 1964. La Calle del Calvario posee viviendas terreras, con tejados a dos aguas, y de dos plantas con azotea, también aparecen las molduras de cantería y balcón de madera arcos y chimeneas y una pequeña ermita, la Ermita del Calvario con cubierta a dos aguas y teja francesa, arco de cantería en la puerta de acceso y piso de mosaico.

El Camino Real del Sur o Camino de La Calzada, del que aún se conservan algunos tramos de su empedrado original y de sus muros, se construyó en la segunda mitad del siglo XVI para unir la capital de la isla con las distintas poblaciones del sur. Un Camino Real debía tener el ancho de una soga toledana (casi 7 metros), un buen firme con muros de piedra en sus bordes y evitar en lo posible las pendientes excesivas.
El Camino de La Cisnera, que une la Villa de Arico con El Río es un antiguo camino alternativo al Camino Real y en el que también se conserva parte de su empedrado.