79. Ciudad Encantada de Piedra en Monasterio de la Sierra

INDICE IBP de Dificultad de la Ruta

Para Criterios y Tabla de Interpretación, Ir a:
https://www.ibpindex.com/index.php/es/

El resultado del análisis IBP es de 45 (para Senderismo): dificultad 'Fácil' para una preparación física 'Media'.

El cómputo del desnivel acumulado de la ruta por parte de IBP es de 381 metros (superior al que estima Wikiloc).


***********************
Ayer, 1 de abril de 2022, viernes, nevaba; con algo de pereza; a ratos compitiendo con los claros de sol. No cuajó porque “nevaba sobre mojado”; literalmente. Pero esta noche ha insistido; y con más intensidad. Las aceras, los tejados, los parques, los coches, amanecen cubiertos de blanco. Me temo que el barro (bueno, y la baja visibilidad; eso, si no vuelve a nevar…) ha ‘arruinado’ nuestro fin de semana senderista.

Así que, si ahora no es posible disfrutarlo en vivo, aprovecharemos para rememorarlo: subiré a Wikiloc algunas rutas realizadas hace algún tiempo. En su momento no lo hice, pero de ellas guardamos documentación del itinerario y fotografías. La que ahora presento tuvo lugar hace un año menos tres días ‘y pico’, exactamente. Curiosamente, viendo la indumentaria en las fotos, el azul y limpio cielo, y recordando nuestras sensaciones, era un día realmente primaveral. En claro contraste con el crudo invierno que hoy nos envuelve.

***********************

Fue ésta una de nuestras primeras rutas (algo repentizada, he de reconocer). En alguna web turística, habíamos visto promocionada la ‘Ciudad Encantada de Burgos’, en el sur de la Sierra de la Demanda. Después de mirar algunas fotos y comentarios, no nos lo pensamos. No nos detuvimos a buscar referencias de trazados bien definidos por otros senderistas. Sólo tomamos nota de algunas sugerencias de itinerario y nos pusimos en marcha.

Ese plan sin pautas prefijadas nos permitió improvisar, pero también nos llevó a cometer algunos errores de omisión. Lo que vimos realmente nos encantó. Pero algún tiempo después, consultando distintos trazados en Wikiloc para esta ruta, vimos que nos habíamos perdido cosas interesantes. Nos dio pena, pero a la vez sirvió para animarnos a realizarla otra vez, mejorada, con novedades y variantes.

Lo haremos (y yendo mejor preparados para fotografiarlo todo…). De momento, y dada la muy grata experiencia previa, creemos que merece la pena reflejarla tal cual ocurrió. La ruta original, como aquí la describimos, fue realizada el 29 de marzo de 2021 (la ‘prehistoria’ para nosotros). Aunque publicada en Wikiloc bastante más tarde (el 2 de abril de 2022), conservamos vivo su recuerdo. Es lo que ocurre con las buenas (y las novedosas) experiencias.

Aún nos encontrábamos a caballo entre el invierno y la primavera. El verdor vegetal empezaba a brotar débilmente. El brezo que puebla el paraje, extendido entre las caprichosas figuras pétreas, tenía un desvaído color. En los bosques aledaños, los robles mostraban sólo unas pocas hojas secas. Lo que más resaltaba eran las construcciones rocosas erosionadas por el viento, la lluvia y el hielo. Ése era, precisamente, nuestro objetivo.

La ruta parte del pueblo de Monasterio de la Sierra. Asciende con calma y serpentea por el camino del Cargaduelo durante poco más de 4 km, hasta posicionarnos en el vértice norte del paraje natural conocido como El Castillejo. Introduciéndonos en éste, vamos descendiendo por la ladera de El Valladar durante casi 2 km (o cuanto queramos alargarlos), moviéndonos entre los innumerables roquedos. Un poco antes de llegar al fondo del valle, nos desviaremos a la derecha (atención: el punto exacto no es de fácil localización), para encontrar el bonito puente de piedra que se eleva sobre el río Valladares. Desde allí, el camino de Peñalrayo nos devolverá, a través del bosque, a Monasterio de la Sierra.

Únicamente encontramos dificultades de orientación a la hora de localizar el puente por el que cruzar el río Valladares e iniciar el regreso. Creo que nos asistió la fortuna. Por toda el área de la Ciudad Encantada, dependemos de la intuición subjetiva y la referencia objetiva del valle al fondo (en su extremo sur), casi siempre a la vista. No hay sendero alguno, y sí abundante vegetación (a veces, en exceso para la movilidad) entre las rocas. De la exigencia física de todo el recorrido, sólo destacaría esta parte como más demandante. Aunque todo el trayecto en ella es de bajada, caminar por ese terreno agreste no resulta cómodo.

Sin duda, la parte más atractiva y característica de la excursión, su sello exclusivo, la constituye la Ciudad Encantada. Uno puede quedarse allí extasiado, con los sentidos arrebatados; caracoleando durante horas en incansable búsqueda y hallazgo de novedades; contemplando y fantaseando sobre las extrañas rocas esculpidas durante millones de años por la naturaleza. Realmente, esa parte colmó nuestras expectativas. Ya desde su ‘puerta’ de entrada, en el extremo norte, impresionan los dos monolitos erguidos cual impasibles centinelas.

Pero hay, además, otra parte sobresaliente: el bosque de vetustos robles a lo largo del todo el camino de regreso. Curiosamente, siendo todos de la prolífica familia ‘Quercus’ (parece que se hibridan muy fácilmente entre ellos), hay una gran variedad en el bosque: desde los más altos robles albares, o robles del invierno, hasta los robles negrales, también denominados rebollos, más achaparrados y retorcidos, recubiertos de musgo. Todos ellos, aun deshojados, resultan cautivadores; aportan un aire mágico al lugar.

Si bien los dos aspectos resaltados tienen suficiente entidad para conferir excelencia a la ruta, ésta puede expandirse (sin alagarla en exceso) con algunas atracciones adicionales. Una de ellas, ineludible, la constituyen las calderas de Matalhierro, situadas sólo un poco más al este. Hay opciones senderistas en Wikiloc que han unido ambas áreas en una excursión. En el paraje de Matalhierro encontraremos una cascada y sedantes saltos y pozas de agua, discurriendo por un terreno erosionado como el de la Ciudad Encantada.

(*) En una excursión posterior, realizamos otra ruta que, partiendo también de Monasterio de la Sierra, sube por el monte San Vicente y llega hasta las ruinas del monasterio de Alveinte ( https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/monasterio-de-la-sierra-y-ruinas-de-alveinte-82910986 ). Ya en verano, con los robles ataviados en traje de gala. Un bello y espectacular entorno paisajístico el que rodea a este pueblo.