Cordal del Pagolar y Pagonabarra

CORDAL DEL PAGOLAR Y PAGONABARRA

Bilbao, a 5 de junio de 2016.
El paseo de hoy nos va a llevar a recorrer montes muy trabajados por la explotación maderera del pino y el eucalipto.
Cuentan por tanto con innumerables pistas, con unos porcentajes que a mi juicio resultan un poco más altos que lo que a mí me gusta, y que sin gps hacen fácil los despistes.
Así que avisaos quedáis, pinos, eucaliptos, vistas solo en lo alto y rampas con desnivel alto.
Seguro que alguno me llamará exagerao…

Salimos del centro de Luiando y vamos poco a poco a visitar la iglesia y el puente medieval, después merecerá la pena una visita más pausada, el pueblo lo merece.
Atravesamos la carretera cerca del radar, cuidado no os pillen, y subimos por una pista cementada, que nos hace sudar enseguida, hasta el barrio de Isardio, que cuenta con cuatro caserios, alguno muy bien reconstruido.
Aquí se acaba el cemento y enseguida por detrás de la casa más alta buscamos una pista que nos lleva al camino del oleoducto, que por la loma y todo recto nos sube todo tieso hasta el mismo cordal del Pagolar. Quinientos metros de desnivel.
Ahora toca un fácil paseo hasta alcanzar la cima del Mostatxa, con una gran Cruz, buzón montañero y escultura de madera. Las vistas son de primera y alcanzan bien lejos ya que esta bastante despejado de arbolado.
Volvemos atrás y recorriendo el cordal pasamos por la cota del Kastanarri y llegamos al Pagolar bordeando la antena. Aquí nos encontramos con una buena cuadrilla de montañeros, saludos y a seguir camino.
Ahora toca bajar, y bastante. Hay varias pistas para dar más o menos vueltas, nosotros fuimos por una de las directas, (preparar las rodillas). Unos trescientos de desnivel en poco más de un kilómetro.

Poco a poco vamos acercándonos al Pagonabarra, primero sorteamos la cota del Pagonabarra Txiki y nos plantamos en el collado que la separa de la cima final.
Nosotros subimos por el camino derechitos sin mirar nada más que nuestras botas, por que el desnivel es de ¡aupa!, con deciros que a ratos no pisaba con el tacón sino solo con la zona delantera del pie. Hicimos mal, porque para bajar usamos una pista que es mucho mas fácil porque hace una zeta.
Asi que mi recomendación es que si vas a subir aquí, no lo hagas todo parriba, si no que al de poco de comenzar por el pinar veras a tu izquierda una pista mucho mas transitable.
En cualquier caso una vez en la cima se disfruta de poquitas vistas por que el arbolado nos las tapa.
En el camino de vuelta subimos sin sendero claro a pisar la cima del Pagonabarra Txiki, aunque no tiene nada de especial, quizás no merezca la pena. Ahhh pero soy un tachacimas…
Continuamos camino pasando al borde de un enorme y cerrado caserío cuyo techo se está cayendo y que en su día seguro fue una gran explotación ganadera.
Vamos bajando por pista que llanea un poco pero rápidamente coge inclinación que nos hará poner a prueba, de nuevo, nuestras rodillas, hasta que alcanzamos el precioso lugar de la Ermita de San Lorenzo, buen sitio para descansar y almorzar un poco.
A partir de aquí por carretera asfaltada llegamos a Luiando.

Mis sensaciones han sido de enfrentarme a rampas de más desnivel del que me gusta, pero de haber hecho una buen a circular, cansado pero a gusto.

Hasta otra, nos vemos en el monte.