Cordal del Pinoso por el hayedo de Diustes hasta el Cerro Ostaza de Monte Real, regreso por el Valle superior del rio Ostaza.
near Diustes, Castilla y León (España)
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Trail photos
Itinerary description
Diustes es una encantadora aldea de Tierras Altas de Soria, aunque quedó despoblada, como tantos otros núcleos de la zona, en la segunda mitad del pasado siglo no se encuentra abandonada y si conservada y acogedora, mereciendo bien una visita. Se accede a esta por un estrecho carretil asfaltado, el cual se toma en la localidad de Yanguas propiamente, situada en la carretera general de Soria a Arnedo, por el puerto de Oncala y Enciso.
Cruzado el rio Ostaza, por un puentecillo, caminaremos por su orilla derecha, topándonos rápidamente con el poste indicador del GR-86 "Ibérico soriano". Por él iniciaremos el ascenso en un autentico goce, pues nos sumergiremos en el célebre Hayedo de Diustes verdadera reliquia natural superviviente de otras eras glaciares y de otros climas más húmedos y propicios. En definitiva un verdadero tesoro digno de perdurar y ser valorado como lo que es y representa.
Para cuando alcancemos "El Collado" la cubierta vegetal habrá cambiado drásticamente y estaremos bajo el dominio absoluto del pino albar o royo (pinus silvestris). Que en estas tierras, antaño inmenso pastizal agostadero de cientos de miles de ovejas merinas trashumantes a lo largo de los siglos, bajo la protección de La Mesta. En el torbellino social y humano de los 50 y 60 todo este espacio fue ocupado y transformado por el Patrimonio Forestal del Estado en lo que hoy aparece ante nuestros ojos. Cada cual que opine libremente lo que quiera.
Desde el citado Collado no haremos otra cosa que caminar por el larguísimo cortafuegos que recorre todo el cordal de Pinoso por su eje cenital. Esta cima aparecerá redondeada y coronada por un vértice geodésico, sin aportarnos gran cosa ya que no ofrece vistas a causa del fuste adquirido por los pinos. Anteriormente si habremos obtenido buenas panorámicas sobre todo el valle alto del Cidacos y una extensa porción de sierras y cimas entre Soria y La Rioja, desde Piqueras hasta El Moncayo.
En la ladera de descenso de Pinoso, el GR-86 nos dejará por la izquierda para enfilar hacia Santa Cruz de Yanguas, nosotros guiados por el cortafuegos avanzaremos en busca del Alto de La Herrería, donde disfrutaremos de una inigualable vista de toda la Sierra de Monte Real con su prominencia de Canto Hincado. La extensión de bosques que dominamos desde aquí y la sensación soledad, pueden llegar a abrumarnos.
Al poco tomaremos una pista forestal, por la que en un santiamén nos plantaremos en el refugio de cazadores, justo donde tomamos contacto con la artificial divisoria entre provincias, siendo esta zona conocida por Collado Delantero. En mi caso aún estiro la andada por la linea divisoria al objeto de alcanzar la primera y modestísima elevación del Cerro Ostaza o La Redonda en Monte Real propiamente. Las vistas que se toman hacia el pueblecito de Ajamil en La Rioja, con toda la cubeta en la que se asienta orlada de hayedos, bien habrá merecido el pequeño esfuerzo.
Desandando nuestros pasos hasta el Collado delantero, nos aguarda la última y gozosa sorpresa de la jornada: caminar por el valle del curso superior del Ostaza. Me ahorro las explicaciones y que cada caminante viva sus propias sensaciones entre saltarinas aguas claras y rodales de hayas entremezcladas con rebollos (quercus pirenaica).
Recorrido realizado el día 23 de abril de 2016.
Quienquiera que haga uso y seguimiento total o parcial de este track y de su información adicional, asume la plena responsabilidad ante los riesgos propios de la práctica de la actividad, ya que esta información tiene únicamente carácter orientativo.
Cruzado el rio Ostaza, por un puentecillo, caminaremos por su orilla derecha, topándonos rápidamente con el poste indicador del GR-86 "Ibérico soriano". Por él iniciaremos el ascenso en un autentico goce, pues nos sumergiremos en el célebre Hayedo de Diustes verdadera reliquia natural superviviente de otras eras glaciares y de otros climas más húmedos y propicios. En definitiva un verdadero tesoro digno de perdurar y ser valorado como lo que es y representa.
Para cuando alcancemos "El Collado" la cubierta vegetal habrá cambiado drásticamente y estaremos bajo el dominio absoluto del pino albar o royo (pinus silvestris). Que en estas tierras, antaño inmenso pastizal agostadero de cientos de miles de ovejas merinas trashumantes a lo largo de los siglos, bajo la protección de La Mesta. En el torbellino social y humano de los 50 y 60 todo este espacio fue ocupado y transformado por el Patrimonio Forestal del Estado en lo que hoy aparece ante nuestros ojos. Cada cual que opine libremente lo que quiera.
Desde el citado Collado no haremos otra cosa que caminar por el larguísimo cortafuegos que recorre todo el cordal de Pinoso por su eje cenital. Esta cima aparecerá redondeada y coronada por un vértice geodésico, sin aportarnos gran cosa ya que no ofrece vistas a causa del fuste adquirido por los pinos. Anteriormente si habremos obtenido buenas panorámicas sobre todo el valle alto del Cidacos y una extensa porción de sierras y cimas entre Soria y La Rioja, desde Piqueras hasta El Moncayo.
En la ladera de descenso de Pinoso, el GR-86 nos dejará por la izquierda para enfilar hacia Santa Cruz de Yanguas, nosotros guiados por el cortafuegos avanzaremos en busca del Alto de La Herrería, donde disfrutaremos de una inigualable vista de toda la Sierra de Monte Real con su prominencia de Canto Hincado. La extensión de bosques que dominamos desde aquí y la sensación soledad, pueden llegar a abrumarnos.
Al poco tomaremos una pista forestal, por la que en un santiamén nos plantaremos en el refugio de cazadores, justo donde tomamos contacto con la artificial divisoria entre provincias, siendo esta zona conocida por Collado Delantero. En mi caso aún estiro la andada por la linea divisoria al objeto de alcanzar la primera y modestísima elevación del Cerro Ostaza o La Redonda en Monte Real propiamente. Las vistas que se toman hacia el pueblecito de Ajamil en La Rioja, con toda la cubeta en la que se asienta orlada de hayedos, bien habrá merecido el pequeño esfuerzo.
Desandando nuestros pasos hasta el Collado delantero, nos aguarda la última y gozosa sorpresa de la jornada: caminar por el valle del curso superior del Ostaza. Me ahorro las explicaciones y que cada caminante viva sus propias sensaciones entre saltarinas aguas claras y rodales de hayas entremezcladas con rebollos (quercus pirenaica).
Recorrido realizado el día 23 de abril de 2016.
Quienquiera que haga uso y seguimiento total o parcial de este track y de su información adicional, asume la plena responsabilidad ante los riesgos propios de la práctica de la actividad, ya que esta información tiene únicamente carácter orientativo.
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