Corro-Peñalisa-Alto de la Carrasca

En esta ocasión toca un paseo mañanero a uno de los centenarios del valle de Valdegobía/Gaubea: el Peñalisa. El pequeño pueblo de Corro será nuestro punto de partida, y en sus cercanías tendremos la posibilidad de visitar las Cuevas de los Moros y una necrópolis. 9 kilómetros y solamente 350 metros de desnivel positivo para cerrar esta circular en la que pasaremos también por el Alto de la Carrasca..

Dejando el coche en las cercanías del molino, damos los primeros pasos por la silenciosa aldea camino a la iglesia. Junto a ésta vemos el cementerio, desde donde parte la pista que asciende a Peñalisa. Dejamos a nuestra izquierda un primer depósito y más adelande, tras cruzar un paso canadiense; topamos con otro depósito de agua más grande. El camino a seguir es claro y evidente; podemos usar una alambrada que hay a nuestra derecha como referencia, y ascender paralelos a élla; o sino continuar por la pista, girando en una próxima bifurcación a la derecha para no perder el rastro de la alambrada.

Poco a poco vamos ganando altura, dejando a nuestras espaldas una perfecta panorámica sobre el imponente Peña Karria. A nuestra derecha iremos dejando los montes de las Tres Erres: Risca, Rodil y Raso. Al llegar a un pequeño prado, el camino se bifurca en dos. Nosotros seguimos por la derecha, por el camino de la Fuente de la Sequilla. Cuando el camino parece que ha llegado a su cota más alta, descendemos unos pocos metros más y encontramos a mano izquierda las trazas del estrecho sendero que se abre paso entre la maleza hacia la verdadera cima de Peñalisa. Al llegar a la cima (973m.) no encontramos nada, y las vistas son escasas hacia el valle de Losa.

Regresando a la senda principal, la seguimos hacia el norte, cruzamos una alambrada y en pocos minutos alcanzamos el buzón de Peñalisa, en una cota bastante inferior a la de la cima verdadera (952m.). A continuación iniciamos el descenso hacia el collado que nos separa del Alto de la Carrasca; pasando por un pinar con cierto encanto, muy diferente a los que estamos acostumbrados a ver...

Tomando la senda principal después, continuamos de frente (W) y volvemos a ganar altura hasta llegar al Alto lo Quemado, donde girando a la izquierda enfilamos ya a la cima del Alto de la Carrasca (923m.). Es una cima sin interés, pero aprovechamos aquí para hacer un corto almuerzo.

Toca regresar a Corro, para ello desandamos sobre nuestros pasos y tomamos la primera senda que encontramos a mano derecha (S). Tras poco más de medio kilómetro, dibujamos una zeta siguiendo por un estropeado camino que hay a nuestra izquierda y que enlaza con la senda del Barranco del Monte. El amplio y cómodo camino desciende después por la fuente del Bardal, dejamos atrás los pozos y entramos en Corro; cerrando una tranquila ruta mañanera.