Cortes de la Frontera - Cresteo por Sierra Blanquilla: Altos Cresta y Martín Gil (1395 m), 2017-03-28

Bonita ruta lineal y circular, de nivel moderado alto (casi difícil en algunos puntos) en Sierra Blanquilla, cerca de Cortes de la Frontera. El objetivo principal es crestear por la cordal de Sierra Blanquilla, pasando por los Altos Cresta y subiendo al Martín Gil, el pico más alto (1395 m) de esta sierra.

Dejamos los coches en el lado norte del pueblo, a unos 630 m de altitud, y comenzamos el tramo lineal de la ruta, subiendo por la pista del antiguo Camino de Grazalema. Llegamos al navazo del Cortijo del Valle y continuamos subiendo por el otro lado hasta una bonita fuente con un enorme pilar: la Fuente del Pilar de Cortes el Viejo. Desde allí continuamos por un atajo hasta un collado a 1000 m de altitud. En este collado hay una encrucijada de caminos, en la que iniciamos el tramo circular de la excursión. Nos desviamos a la derecha y en fuerte subida hacia el Cerro de las Arenitas. Lo bordeamos por la izquierda y alcanzamos el Puerto de las Arenitas. Cerca del puerto observamos una sima.

A partir de ahí, subimos por suelos rocosos y lapiaces (con algunos puntos de cierta dureza y afinando con el track) a los Altos Cresta (1306 y 1363 m) y al Martín Gil (1395 m). Desde arriba de estos picos, disfrutamos de magníficas panorámicas a Ronda, El Palo, los Llanos de Líbar, el Salamadre, etc Gran parte de este tramo se realiza por la cordal y hay que tener experiencia de caminar por lapiaces y crestas calcáreas.

Descendemos por la cara norte del Martín Gil y giramos a la izquierda, manteniéndonos en senderos de la ladera oeste de Sierra Blanquilla, sin bajar a los Llanos de Líbar. Continuamos por esta ladera hasta conectar con el Camino de Grazalema en el collado donde iniciamos el tramo circular. Desde aquí, desandamos el tramo lineal para finalizar esta dura y bonita ruta junto a Cortes.

Aunque atravesamos zonas de bosque mediterráneo con antiguas encinas y abundantes espinos blancos o majuelos, en las Arenitas, el Alto Cresta y el Martín Gil dominan las rocas desnudas, el típico paisaje kárstico de lapiaces, crestas, hoyos, simas, sumideros, dolinas, poljés, etc.

En definitiva, ruta para senderistas expertos, acostumbrados a cierta dureza y con afición a la montaña pura.