CORTIJO BLANCO-LA COVACHA-MINA BERJA-BALSA DEL SABINAR-PECHO CUCHILLO

La ruta se adentra en la sierra de Gádor, pasando en buena parte por bosques de pinos, con alguna zona de chaparro y también un buen tramo de paisaje más estepario.

Ofrece varios platos fuertes, como la ascensión a Pecho Cuchillo, una de las cimas emblemáticas de esta sierra; además de bellos rincones, destacando por su singularidad y rareza en esta sierra, tan aparentemente falta de agua, la presencia de la Balsa de Sabinar, una laguna natural.

En cuanto a su trazado en su mayor parte se puede catalogar como una ruta senderista, sin ninguna complicación a nivel técnico; hasta que acometemos la bajada desde el Cordel de la Retumba. Se desciende sin sendero, por una loma con bastante pendiente y algo de piedra suelta, que junto con la presencia de matorral, hará que sea imprescindible extremar nuestra atención para no resbalar (el senderista puro aquí no se encontrará cómodo). Son 100 m de bajada hasta alcanzar un cortafuegos. La llegada al cortafuegos no facilitará el descenso, pues sigue la fuerte pendiente en un terreno que si está duro requerirá de nuestra pericia para no perder la estabilidad. Por ello lo mejor es meterse en el pinar cuanto antes, con mejor terreno.

No obstante, mi recomendación para los que no sois muy dados a este tipo de bajadas, es que hagáis la ruta en sentido inverso; ya que estos desniveles en este tipo de terreno siempre se hacen de forma más segura (más fácil a nivel técnico) en subida que en bajada.

La ruta comienza en Cortijo Blanco, lugar de inicio del PR-A 146 “Senda Cortijo Blanco-Castala”. De hecho usamos su trazado para comenzar el recorrido.

El sendero asciende por el interior del pinar, bifurcándose o encontrándose con otros, todos sendas antiguas que usaron en el pasado los habitantes de la sierra para extraer de ella sus productos (leña, plantas aromáticas…) y los mineros. En este sentido, dejaremos atrás la Senda de los Pájaros, luego dejaremos el PR que llevamos y que se dirige a Castala, para coger otro en dirección a Fuente Vieja. Este nuevo PR también lo dejaremos para coger una senda que se dirige al refugio-vivac de la Covacha.

En realidad nuestro recorrido no pasa por la puerta de este vivac, si no que se queda muy cerca. Por lo que si nos apetece conocer este pequeño refugio solo tendremos que desplazarnos unos 50 m a la derecha.

Para quien no lo conozca, decir que este refugio es buen reflejo de su nombre “covacha”, pues se trata de un refugio minúsculo y oscuro (sin ventanas). Consta de dos habitáculos, el primero, con chimenea, hace de cocina y de comedor; el segundo, algo más grande, es la zona del dormitorio. Está construido sobre unas antiguas caleras.

Recuperado el sendero, marcharemos en dirección contraria a la Covacha, volviendo a ver señales de PR (este nuevo PR se dirige en dirección a la Retumba).

Junto al pinar, aparecerán ahora algunos chaparros y, antes de alcanzar el cortafuegos, el sendero se introduce en un umbrío bosque de pinos.

Con la llegada al cortafuegos abandonaremos el trazado del PR y, durante unos pocos metros, continuaremos ascendiendo por él pegados a la izquierda. Justo al acabar el pinar, por este lado, nos saldremos del cortafuegos para seguir por un claro sendero.

Iremos atentos al track para coger la siguiente bifurcación y progresivamente el pinar y los chaparros irán quedando atrás hasta meternos de lleno en un paisaje de monte bajo. No obstante, en este paisaje estepario todavía quedará algo de pinar.

A medida que nos adentramos en el llano, los socavones, la tierra removida y las escombreras se irán sucediendo, hasta llegar a Mina Berja.

Mina Berja fue una explotación de fluorita y galena (plomo), situada en la llamada “Loma del Sueño”. Comenzó su explotación en septiembre de 1797, alargando su actividad hasta julio de 1801, cuando se cerró por exceso de producción (en aquellos tiempos el plomo se explotaba en régimen de monopolio, por lo que se controlaba la producción a fin de asegurar los precios en el mercado).

En la década de 1970 la empresa “Minas de Almagrera” decidió explotar antiguas minas de plomo en la Sierra de Gádor. Las nuevas técnicas permitían extraer el metal de forma más eficiente. Se reabrieron viejas minas y, además, se aprovechó el mineral que quedaba en las escombreras de antaño.

En la “Mina Berja” se excavaron grandes galerías que permitían el paso de maquinaria pesada y camiones para la extracción del mineral, de ahí su enorme entrada.

El recorrido sigue por la pista en dirección norte, hasta que en 500 m se desvía para continuar en dirección sur, para ir en busca de una pequeña joya, la balsa del Sabinar.

La balsa del Sabinar es una laguna natural, que se encuentra en la zona más al sur del poljé del Sabinar. Esta laguna se forma gracias a las arcillas rojas impermeables acumuladas en el fondo del poljé, que mantienen en superficie las aguas de las lluvias. La balsa se mantiene por la mano del hombre y sirve como abrevadero y descanso para la ganadería local. A parte tiene mucha importancia como bebedero para la fauna de la zona. También es el lugar de una planta única en el mundo, Coronopus navasi, un endemismo de la sierra de Gádor, que está protegido legalmente como especie amenazada y que solo se ha encontrado en algunas depresiones arcillosas de esta sierra y en ninguna parte más del mundo.

Continuaremos camino hasta el cercano refugio-vivac del Sabinar, que a pesar de su aspecto descuidado y algo ruinoso por fuera, se encuentra por dentro en bastante buen estado.

A partir de aquí tomaremos rumbo hacia el vértice geodésico de Pecho Cuchillo, una de las cimas emblemáticas de Sierra de Gádor. En los últimos 1’2 km no hay camino ni sendero; pero el campo a través es fácil desde el punto de vista técnico y, cómodo, desde el punto de vista físico.

Como ya comentamos al inicio de la descripción, la dificultad técnica la encontraremos en una parte de la bajada, pero que afortunadamente es un tramo pequeño.

Una vez que alcancemos el trazado de ida nos quedarán algo más de 5 km para regresar al inicio de la ruta, usando el mismo recorrido.

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Tened presente que tanto el track como la descripción de la ruta deben ser tomados solo como una información orientativa. El entorno natural es un entorno cambiante (donde antes había senderos puede con el tiempo no haberlos, donde antes había pasos fáciles, puede que ya no los haya…) y las condiciones climatológicas pueden complicar hasta la ruta más fácil. Por otra parte, la preparación física y técnica de cada cual añadirá o restará dificultad a cualquier ruta. Por todo ello, es responsabilidad de quién decida realizar la ruta, tomar las medidas de seguridad apropiadas para el itinerario (valorar su forma física y su preparación técnica) y llevar bien estudiada la ruta para solventar cualquier imprevisto que pueda surgir, eximiéndose la autora de responsabilidad alguna, ante cualquier percance que pudiera sufrir quién por voluntad propia o inducida realice la ruta.

QUE LA DISFRUTÉIS y recuerda LLÉVATE A CASA TODA TU BASURA, POR PEQUEÑA QUE SEA.