Costa Ártabra. Etapa 4: Playa de Mera ~ Sada
near Serantes, Galicia (España)
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Trail photos
Itinerary description
Esta cuarta etapa de la Costa Ártabra la comenzamos en la misma playa del pueblo de Mera, donde dejamos la anterior. Para realizarla unimos partes de dos PRG: el 87 conocido como el de Costa de Dexo, comprendido entre los faros de Mera y el puerto de Lorbé, del cual seguimos toda su costa y el PRG 96, Roteiro Mariñan da Costa Doce, desde Lorbé hasta Sada.
Partimos desde la misma Playa de Mera, lugar en el que habíamos abandonado la anterior etapa y desde allí, siguiendo el paseo nos acercamos a la playa de Espiñeiro. Seguimos siempre por asfalto hasta Punta de Mera, donde nos encontramos los dos faros, que en realidad son unas torres de enfilación construidas en 1917 y que tienen como objetivo orientar la navegación de los barcos a través de la combinación de sus luces. El Faro Pequeño está alineado con el Faro Grande, de tal modo que los barcos deben enfilar hacia el puerto siguiendo la luz de ambos en línea recta para evitar los escollos del fondo marino. Son visibles a una distancia de 8 millas. Para ver el Faro Pequeño hay que ir detrás de la aula o centro de recepción de visitantes, se puede bajar hasta el borde del acantilado. Tiene 11 metros de altura y está situado a 56 metros sobre el nivel del mar.
Una vez visitado el lugar de los faros volvemos hacia atrás siguiendo un camino que rodea el Faro grande y que nos llevará hasta la Rúa Celso Emilio Ferreiro, desde la cual y siguiendo las indicaciones nos acercamos hasta la zona urbanizada de Canabal, en dicho trayecto podemos encontrar una fuente a pie de camino.
Seguimos avanzando hasta encontrarnos con la zona conocida como Seixo Branco, que debe su nombre a un gran filón blanco de cuarzo que se puede observar acercándose al acantilado. La ubicación escarpada y estratégica convirtió la zona en el emplazamiento de una batería militar diseñada antes de la Guerra Civil y abandonada a partir de la II Guerra Mundial. Ésta y otras baterías de costa instaladas en el Golfo Ártabro tenían como función la protección de la zona costera.
El camino nos lleva ahora pegados al mar y los enormes acantilados de la costa convierten en una belleza espectacular todo el entorno. Nos encontramos con algunas furnas valladas como las de A Regocha, Ollo Grande y la de Ollo Pequeño, un lugareño nos explicó que en la zona eran también conocidas como "fumarolas", que son una especie de cuevas marinas formadas por la acción del mar y que en días de fuertes tormentas, el mar embravecido se dispara con su fuerza por estas furnas.
Seguimos el sendero y nos apartamos un poco del borde costero, internándonos en un pinar, hasta que más adelante volvemos a dirigirnos hacia el mar en la Punta Rasa. Antes, habremos visto algunos carteles informativos a los castros de la zona, como el de Subiña o el de Castromán, pero decidimos no ir ya que nuestro interés es seguir, en lo posible, siempre cercanos a la costa.
Continuamos las indicaciones y nos dirigimos hacia Porto de Dexo, después de cruzar un pequeño puentecito de madera, nos encontramos con dicho puerto enclavado en una pequeña y estrecha apertura al mar que aún conserva la polea con la que izaban o descendían los barcos y una estrecha escalera para descender hasta el mar. Según he leído, su escaso calado ha sido la causa del desuso del puerto, pero ahora es casi como una gran piscina natural.
A la derecha del puerto seguimos una pequeña senda que nos llevará a recorrer los siguientes acantilados rocosos gozando de excelentes vistas hacia la ensenada y el puerto de Dexo y a partir de aquí seguimos sendereando para llegar a lo que sería el final del primer PRG costero, el puerto de Lorbé, al cual nos acercamos por zona de carretera asfaltada.
Una vez que hemos visitado el puerto y disfrutado de las vistas, comenzamos a buscar una alternativa al asfalto para comenzar el PRG 96. Encontramos unas escaleras que suben por detrás del restaurante Puerto de Lorbé, una vez arriba tuvimos que rodear una casa ya que no había otra salida posible para localizar el camino. Seguimos hacia la Playa de Cirro observando las bateas del puerto de Lorbé que quedaban atrás. Pasamos por la pequeña población de San Pedro que cuenta con la pequeña playa de mismo nombre y camping. Seguimos camino hasta encontrar el cruce conocido como Campo de la Cruz, desde ahí recomendamos tomar el desvío a la izquierda (de ida y vuelta) que en 1 km aprox. nos lleva hasta el mirador de Punta de San Mamede, desde donde podemos divisar en una bella estampa las rías de Ares, Betanzos y la entrada a la ría de Ferrol.
De vuelta en el cruce seguimos y pasamos muy cerca de la hermosa cala de Lourido y avanzamos hacia la aldea de Carnoedo, siempre siguiendo el PRG pasamos cercanos a la escondida playa de Armenteiro y a Das Fontiñas y seguimos un camino entre un bosque de eucaliptos hasta llegar a la playa de Arnela a la que divisamos desde arriba contemplando toda su belleza paradisíaca. El camino sigue siempre próximo a la costa y pasando Punta Arnela encontramos el Mirador de la Ría que nos ofrece una panorámica a algunas de las playas de la Ría de Betanzos y Ares.
Llegamos así hasta la cala de Morazón y subimos hacia la zona donde se encontraba el Castillo de Fontán, desde allí podemos divisar ampliamente el puerto y el pueblo de Sada y bajando por sus calles llegamos hasta el Paseo Marítimo que recorremos y donde ponemos fin a esta bella etapa que calificamos de fácil ya que no encontramos mayor dificultad. Como siempre en la costa, importante tener en cuenta el estado de las mareas.
Partimos desde la misma Playa de Mera, lugar en el que habíamos abandonado la anterior etapa y desde allí, siguiendo el paseo nos acercamos a la playa de Espiñeiro. Seguimos siempre por asfalto hasta Punta de Mera, donde nos encontramos los dos faros, que en realidad son unas torres de enfilación construidas en 1917 y que tienen como objetivo orientar la navegación de los barcos a través de la combinación de sus luces. El Faro Pequeño está alineado con el Faro Grande, de tal modo que los barcos deben enfilar hacia el puerto siguiendo la luz de ambos en línea recta para evitar los escollos del fondo marino. Son visibles a una distancia de 8 millas. Para ver el Faro Pequeño hay que ir detrás de la aula o centro de recepción de visitantes, se puede bajar hasta el borde del acantilado. Tiene 11 metros de altura y está situado a 56 metros sobre el nivel del mar.
Una vez visitado el lugar de los faros volvemos hacia atrás siguiendo un camino que rodea el Faro grande y que nos llevará hasta la Rúa Celso Emilio Ferreiro, desde la cual y siguiendo las indicaciones nos acercamos hasta la zona urbanizada de Canabal, en dicho trayecto podemos encontrar una fuente a pie de camino.
Seguimos avanzando hasta encontrarnos con la zona conocida como Seixo Branco, que debe su nombre a un gran filón blanco de cuarzo que se puede observar acercándose al acantilado. La ubicación escarpada y estratégica convirtió la zona en el emplazamiento de una batería militar diseñada antes de la Guerra Civil y abandonada a partir de la II Guerra Mundial. Ésta y otras baterías de costa instaladas en el Golfo Ártabro tenían como función la protección de la zona costera.
El camino nos lleva ahora pegados al mar y los enormes acantilados de la costa convierten en una belleza espectacular todo el entorno. Nos encontramos con algunas furnas valladas como las de A Regocha, Ollo Grande y la de Ollo Pequeño, un lugareño nos explicó que en la zona eran también conocidas como "fumarolas", que son una especie de cuevas marinas formadas por la acción del mar y que en días de fuertes tormentas, el mar embravecido se dispara con su fuerza por estas furnas.
Seguimos el sendero y nos apartamos un poco del borde costero, internándonos en un pinar, hasta que más adelante volvemos a dirigirnos hacia el mar en la Punta Rasa. Antes, habremos visto algunos carteles informativos a los castros de la zona, como el de Subiña o el de Castromán, pero decidimos no ir ya que nuestro interés es seguir, en lo posible, siempre cercanos a la costa.
Continuamos las indicaciones y nos dirigimos hacia Porto de Dexo, después de cruzar un pequeño puentecito de madera, nos encontramos con dicho puerto enclavado en una pequeña y estrecha apertura al mar que aún conserva la polea con la que izaban o descendían los barcos y una estrecha escalera para descender hasta el mar. Según he leído, su escaso calado ha sido la causa del desuso del puerto, pero ahora es casi como una gran piscina natural.
A la derecha del puerto seguimos una pequeña senda que nos llevará a recorrer los siguientes acantilados rocosos gozando de excelentes vistas hacia la ensenada y el puerto de Dexo y a partir de aquí seguimos sendereando para llegar a lo que sería el final del primer PRG costero, el puerto de Lorbé, al cual nos acercamos por zona de carretera asfaltada.
Una vez que hemos visitado el puerto y disfrutado de las vistas, comenzamos a buscar una alternativa al asfalto para comenzar el PRG 96. Encontramos unas escaleras que suben por detrás del restaurante Puerto de Lorbé, una vez arriba tuvimos que rodear una casa ya que no había otra salida posible para localizar el camino. Seguimos hacia la Playa de Cirro observando las bateas del puerto de Lorbé que quedaban atrás. Pasamos por la pequeña población de San Pedro que cuenta con la pequeña playa de mismo nombre y camping. Seguimos camino hasta encontrar el cruce conocido como Campo de la Cruz, desde ahí recomendamos tomar el desvío a la izquierda (de ida y vuelta) que en 1 km aprox. nos lleva hasta el mirador de Punta de San Mamede, desde donde podemos divisar en una bella estampa las rías de Ares, Betanzos y la entrada a la ría de Ferrol.
De vuelta en el cruce seguimos y pasamos muy cerca de la hermosa cala de Lourido y avanzamos hacia la aldea de Carnoedo, siempre siguiendo el PRG pasamos cercanos a la escondida playa de Armenteiro y a Das Fontiñas y seguimos un camino entre un bosque de eucaliptos hasta llegar a la playa de Arnela a la que divisamos desde arriba contemplando toda su belleza paradisíaca. El camino sigue siempre próximo a la costa y pasando Punta Arnela encontramos el Mirador de la Ría que nos ofrece una panorámica a algunas de las playas de la Ría de Betanzos y Ares.
Llegamos así hasta la cala de Morazón y subimos hacia la zona donde se encontraba el Castillo de Fontán, desde allí podemos divisar ampliamente el puerto y el pueblo de Sada y bajando por sus calles llegamos hasta el Paseo Marítimo que recorremos y donde ponemos fin a esta bella etapa que calificamos de fácil ya que no encontramos mayor dificultad. Como siempre en la costa, importante tener en cuenta el estado de las mareas.
Waypoints
Fountain
125 ft
Fonte de Canabal
Waypoint
99 ft
Camino sin acceso, seguir por la carretera.
Waypoint
82 ft
null
Waypoint
122 ft
Playa de Arnela
Comments (6)
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Etapa con unas vistas muy bonitas y un recorrido precioso, destacaria las furnas por su tamaño y profundidad.
A las furnas hay que volver un día de mar bravo, para disfrutar del espectáculo!!!
Gracias por tu comentario y valoración manolorive.
Wgc en nada vaya
Buenas tardes, Manuel Blanco. No se entiende tu comentario y mucho menos, después del aplauso que le das a la ruta, tu valoración. Te recuerdo que tanto una cosa como la otra deben ser de ayuda para quienes se decidan a seguir el track. Un saludo.
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Information
Easy to follow
Scenery
Easy
Un tramo de costa preciosa 💖 Nos valió de mucho vuestro track. Sois encantadores 😘
Sí!! es un tramo muy bonito. Nos alegra mucho que os valiera el track 😉 Gracias a vosotros por perfeccionarla y por toda la info 😊