Costa da Vela - O Hío

Paseo por la costa de Cangas.

Partiendo de la playa de Liméns enseguida subimos hasta Nerga, desde donde ya son visibles las señales del GR-59, el Sendero Ecológico del Morrazo, cuyo recorrido quedó alterado después de la construcción de la vía rápida y no se ha recuperado en esos tramos. En la ruta que seguimos hoy las señales se conservan en muy buen estado a lo largo de todo el tramo. En Nerga ya estamos dentro del espacio natural de la Costa da Vela.

Desde Nerga vamos a internarnos en el sistema dunar de la playa de Nerga, sistema de arena blanca que se halla fijado por la vegetación de bosque de pinos; saldremos al extremo occidental de la playa de Nerga y aprovechando la bajamar paseamos por la playa de Viñó y desde ahí atravesamos la playa de Barra.

Desde Barra ascendemos poco a poco por un sendero que nos lleva hasta las pistas de tierra que rodean el Cabo do Home, visitando los faros de Subrido, Punta Robaleira y Cabo do Home y nuestra última playa del día, Melide. Es de destacar el color blanco de la arena de las playas que hemos visitado y la constante presencia de las Cíes en el horizonte.

Una vez recorrido o Cabo do Home caminamos hasta Donón y ascendemos al Monte Facho visitando el castro que hay en su cima. Desde aquí divisamos todo el entorno del Cabo do Home y entendemos claramente el porqué del nombre Costa da Vela que se halla a nuestros pies. Para relatar la historia de este monte nada mejor que recurrir a la información de la web del concello de Cangas:

“En primeiro lugar, desde o século X A.C. ata o século VII A.C., existiu un poboado na ladeira este do que a penas temos información salvo a do seu excepcional tamaño. A partir do século VI a.C. xorde o castro galaico, poboado fortificado que subsistirá ata o século I a.C. Del aínda podemos ver parte das murallas, o foso, as pedras que conformaban as súas vivendas e que hoxe cobren as ladeiras do monte, os vertedoiros de lixo nas marxes do poboado ou a topografía actual do monte que deriva tanto da construcción mesma do poboado como da configuración natural.

Posteriormente, un santuario levantado sobre o cumio vai a recoller as vellas crenzas de quen vivira no castro para dotalas, ao longo dos séculos II ó IV d.C., dun novo carácter, agora marcado polo proceso de asimilación da cultura latina na rexión do imperio romano chamado Gallaecia. Finalmente no século XVIII constrúese o posto de vixiancia costeira con fins militares do cal pervive a garita.
Apareceron 161 altares, no que fai casei dous mil anos debeu de ser un bosque de aras levantadas sobreo cumio do monte.”

Después de una merecida pausa en el monte Facho descendemos y continuamos hasta el crueiro de O Hío siguiendo las marcas del GR-59.