Costa das Rías Baixas. Etapa 23: Ribeira (Corrubedo) ~ Porto do Son (Castros de Baroña)
near Corrubedo, Galicia (España)
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Trail photos
Itinerary description
Nuestra costa no decepciona. Si la anterior etapa fue bonita, esta fue impresionante. Un día muy agradable acompañó este trayecto repleto de playas que compitieron en belleza, senderos que nos recordaron al Camiño dos faros y un par de dificultades que dieron un plus de aventura a estos casi 25 Kms.
Partimos del punto anterior, la praia de Ladeira y desde ahí vamos a llegar al muelle de Corrubedo atravesando las primeras praias como As Furnas, Ribeiriña y Ribeira. Este trayecto lo hacemos por camino, por arena y también por las rocas en las que es necesario poner atención para evitar resbalones inesperados.
Pasado el pequeño porto cruzamos la praia Ribeira do Porto hasta su final y subimos por las rocas. El sendero que nos lleva hasta la EDAR de Corrubedo está algo cerrado por la vegetación pero es asequible; lo mismo pasa con el trayecto que nos conduce hasta el faro, se nota que no están muy transitados. Lo que se pierden!!
El Faro de Corrubedo, construido en 1854, pertenece al municipio de Ribeira y está gestionado por la Autoridad Portuaria de Vilagarcía de Arousa. En sus primeros años la similitud de su luz con la del faro de Sálvora produjo algún accidente y por ello fue necesario realizar algunas modificaciones, en una de ellas se utilizó una luz roja, razón por la cual se ganó el sobrenombre de Faro Comunista. Desde su ubicación se puede contemplar hacia un lado la amplitud del océano y hacia el otro a la Serra do Barbanza.
Continuamos camino siempre muy cerca del mar, pasamos por una zona llena de cantidad de rocas pequeñas y redondeadas que parecen el capricho de un gigante. Una vez que llegamos al saliente conocido como Punta do Francés comenzamos a recorrer la Praia das Barreiras, que rodeada de una pequeña duna se extiende hasta el saliente de Punta Laxe da Ría y que puede considerarse un arenal virgen, donde los vientos y las olas actúan con mucha fuerza, estamos ante mar abierto y se nota.
Tenemos un día bastante claro por lo cual las vistas son estupendas y nos permiten distinguir a lo lejos la silueta de Fisterra, nuestra meta final. Aunque para llegar allí aún nos quedan varias etapas y casi 200 kms por disfrutar.
Otro hermoso arenal, el de Espiñeirido también conocido como Recaveira, con casi 1km de longitud y en cuyo comienzo desemboca el Rego de Espiñeirido que se puede atravesar sin problema con marea baja. En esta praia dejamos atrás Ribeira y entramos en la costa del concello de Porto do Son.
La ruta es un continuo de pequeños rochedos y de praias solitarias a cual más bonita...Sus Brañas, Seráns, Catía, Basoñas y la más extensa de la etapa, la praia de Areas Longas con una longitud de 2.1 kms y que debido a su gran extensión de arena y su carácter aislado suele tener muy bajo grado de ocupación, detrás de este arenal se encuentra la Lagoa de San Pedro de Muro.
Un saliente rocoso que forma grandes grietas y conocido como Punta de Pedras Negras separa la praia de Areas Longas de la Praia das Furnas, tristemente conocida por el accidente sufrido por Ramón Sampedro donde una placa lo recuerda con estas letras: «Ramón Sampedro Cameán. Defensor da vida e a morte. Mariñeiro en terra. Poeta, veciño e amigo. 4-1-1943; 12-1-1998». Sampedro convirtió su deseo de morir en una lucha por la defensa de las libertades individuales y de la eutanasia.
Nuestros pasos siguen por otra bellísima praia, la del Río Sieira, rodeada de una zona de pinar y en cuyo extremo encontramos un importante caudal, se trata del río Sieira que baja con fuerza hacia el mar y que nos obliga a descalzarnos y a arremangar pantalones para poder cruzarlo. Con la excusa de secar los pies aprovechamos a hacer un pequeño descanso y comer el bocata en la cala que hay a continuación, se estaba de vicio con el sol y unas inmejorables vistas ;)
Toca seguir y lo hacemos por un sendero que sale desde este extremo y que nos lleva hasta la Praia Pementa o Conchido, donde además de cantidad de conchas encontramos una buena cantidad de gaviotas haciendo la siesta al sol y que apenas se inmutaron con nuestra presencia. Tras pasar este arenal comienza un zona rocosa en la que primero subimos o trepamos con mucho cuidado por las rocas y luego bajamos para cruzar el Rego do Corzo (señalizada como riesgo en el waypoint). Estamos en una zona de acantilado por lo cual es importante ir atentos. Luego llegamos a un punto en el que el sendero desaparece y no queda más remedio que ir hacia el interior, desde aquí tenemos una hermosa estampa de la Illa do Mar. Luego de dar un pequeño rodeo volvemos a la costa y cruzamos una pequeña praia y la zona rocosa de Corveiro da Laxe, intuyendo el sendero rodeamos el perímetro donde se encuentra el castro de Porto Nadelas, sin excavar y sin ningún tipo de cuidados ni señalización que lo proteja.
Tras pasar por la parte superior de la Praia de Porto Nadelas divisamos en lo alto un altar, se trata de una especie de pequeña ermita donde se encuentra una imagen en granito de la Virxe do Carmen. El lugar está muy cuidado y lleno de flores, se nota que es muy visitado. En la parte posterior, hacia el mar, se alza la cruz de Porto Nadelas, en homenaje a los cinco fallecidos del barco "Volverán", todos ellos vecinos del lugar.
La Praia de Seiras, en Queiruga, será el siguiente arenal que cruzaremos y no sin dificultad, ya que la arena es blanda incluso en la orilla y nos enterramos a cada paso. Desistimos de trepar las rocas del final de la praia ya que además de ignorar si existía camino parecían bastante empinadas. Así que dimos un pequeño rodeo por la zona de los pinares con un tramo de fuerte subida al principio y luego siguiendo un sendero que se suaviza y desde el cual pudimos apreciar que no hubiera sido tan descabellado (aunque sí algo peligroso) subir por las rocas ya que el sendero existía.
Las vistas hacia Baroña son impresionantes y hacia las pequeñas calas que se encuentran bajo el acantilado también lo son.
El último atranco de la ruta lo encontramos al llegar a la Praia do Dique ya que se encuentra la desembocadura del Río Maior. Cruzamos estas aguas por la zona de las piedras, hay que hacerlo con cuidado porque hay algunas algo movedizas, para quien no quiera arriesgar siempre queda la alternativa de quitarse las botas ;)
Nuevamente toca subir por las rocas, enseguida damos con un sendero que nos lleva hasta el Miradoiro de Baroña, desde el cual se puede apreciar la praia y el poblado castrexo. Seguimos por el sendero ya que la marea está casi en lo más alto y es imposible llegar al castro por la costa.
La singularidad de este asentamiento que data de la Edad de Hierro, es el hermoso enclave elegido, una pequeña península rocosa separada de la tierra por un istmo de arena. La excavación que dio lugar a su descubrimiento data del año 1933, sufriendo una importante restauración en 2012 que le devolvió parcialmente el estado original. En nuestro caso, como ya lo conocíamos de anteriores andainas, aceleramos un poco el ritmo con la intención de disfrutar de la puesta de sol desde lo alto de las rocas del castro. El tiempo prometía un broche final de ruta inmejorable y así fue, después de una de las etapas más bonitas disfrutamos de un solpor espectacular...
La ruta la calificamos como moderada, más que nada por las dificultades y peligros que puedan significar las pequeñas trepadas. Nada que no pueda hacer un senderista medianamente preparado como es nuestro caso. Por lo demás es fácil, quizás muchos kms de arena que la pueden hacer algo cansina, pero hay zonas en las que podréis seguir por el paseo de madera y evitar las praias.
Importantísimo conocer el estado de las mareas si se quiere seguir el track tal cual, ya que hay lugares que serían casi imposibles de cruzar con marea alta.
Otra etapa impresionante y súper recomendable.
A por la siguiente!!!
Partimos del punto anterior, la praia de Ladeira y desde ahí vamos a llegar al muelle de Corrubedo atravesando las primeras praias como As Furnas, Ribeiriña y Ribeira. Este trayecto lo hacemos por camino, por arena y también por las rocas en las que es necesario poner atención para evitar resbalones inesperados.
Pasado el pequeño porto cruzamos la praia Ribeira do Porto hasta su final y subimos por las rocas. El sendero que nos lleva hasta la EDAR de Corrubedo está algo cerrado por la vegetación pero es asequible; lo mismo pasa con el trayecto que nos conduce hasta el faro, se nota que no están muy transitados. Lo que se pierden!!
El Faro de Corrubedo, construido en 1854, pertenece al municipio de Ribeira y está gestionado por la Autoridad Portuaria de Vilagarcía de Arousa. En sus primeros años la similitud de su luz con la del faro de Sálvora produjo algún accidente y por ello fue necesario realizar algunas modificaciones, en una de ellas se utilizó una luz roja, razón por la cual se ganó el sobrenombre de Faro Comunista. Desde su ubicación se puede contemplar hacia un lado la amplitud del océano y hacia el otro a la Serra do Barbanza.
Continuamos camino siempre muy cerca del mar, pasamos por una zona llena de cantidad de rocas pequeñas y redondeadas que parecen el capricho de un gigante. Una vez que llegamos al saliente conocido como Punta do Francés comenzamos a recorrer la Praia das Barreiras, que rodeada de una pequeña duna se extiende hasta el saliente de Punta Laxe da Ría y que puede considerarse un arenal virgen, donde los vientos y las olas actúan con mucha fuerza, estamos ante mar abierto y se nota.
Tenemos un día bastante claro por lo cual las vistas son estupendas y nos permiten distinguir a lo lejos la silueta de Fisterra, nuestra meta final. Aunque para llegar allí aún nos quedan varias etapas y casi 200 kms por disfrutar.
Otro hermoso arenal, el de Espiñeirido también conocido como Recaveira, con casi 1km de longitud y en cuyo comienzo desemboca el Rego de Espiñeirido que se puede atravesar sin problema con marea baja. En esta praia dejamos atrás Ribeira y entramos en la costa del concello de Porto do Son.
La ruta es un continuo de pequeños rochedos y de praias solitarias a cual más bonita...Sus Brañas, Seráns, Catía, Basoñas y la más extensa de la etapa, la praia de Areas Longas con una longitud de 2.1 kms y que debido a su gran extensión de arena y su carácter aislado suele tener muy bajo grado de ocupación, detrás de este arenal se encuentra la Lagoa de San Pedro de Muro.
Un saliente rocoso que forma grandes grietas y conocido como Punta de Pedras Negras separa la praia de Areas Longas de la Praia das Furnas, tristemente conocida por el accidente sufrido por Ramón Sampedro donde una placa lo recuerda con estas letras: «Ramón Sampedro Cameán. Defensor da vida e a morte. Mariñeiro en terra. Poeta, veciño e amigo. 4-1-1943; 12-1-1998». Sampedro convirtió su deseo de morir en una lucha por la defensa de las libertades individuales y de la eutanasia.
Nuestros pasos siguen por otra bellísima praia, la del Río Sieira, rodeada de una zona de pinar y en cuyo extremo encontramos un importante caudal, se trata del río Sieira que baja con fuerza hacia el mar y que nos obliga a descalzarnos y a arremangar pantalones para poder cruzarlo. Con la excusa de secar los pies aprovechamos a hacer un pequeño descanso y comer el bocata en la cala que hay a continuación, se estaba de vicio con el sol y unas inmejorables vistas ;)
Toca seguir y lo hacemos por un sendero que sale desde este extremo y que nos lleva hasta la Praia Pementa o Conchido, donde además de cantidad de conchas encontramos una buena cantidad de gaviotas haciendo la siesta al sol y que apenas se inmutaron con nuestra presencia. Tras pasar este arenal comienza un zona rocosa en la que primero subimos o trepamos con mucho cuidado por las rocas y luego bajamos para cruzar el Rego do Corzo (señalizada como riesgo en el waypoint). Estamos en una zona de acantilado por lo cual es importante ir atentos. Luego llegamos a un punto en el que el sendero desaparece y no queda más remedio que ir hacia el interior, desde aquí tenemos una hermosa estampa de la Illa do Mar. Luego de dar un pequeño rodeo volvemos a la costa y cruzamos una pequeña praia y la zona rocosa de Corveiro da Laxe, intuyendo el sendero rodeamos el perímetro donde se encuentra el castro de Porto Nadelas, sin excavar y sin ningún tipo de cuidados ni señalización que lo proteja.
Tras pasar por la parte superior de la Praia de Porto Nadelas divisamos en lo alto un altar, se trata de una especie de pequeña ermita donde se encuentra una imagen en granito de la Virxe do Carmen. El lugar está muy cuidado y lleno de flores, se nota que es muy visitado. En la parte posterior, hacia el mar, se alza la cruz de Porto Nadelas, en homenaje a los cinco fallecidos del barco "Volverán", todos ellos vecinos del lugar.
La Praia de Seiras, en Queiruga, será el siguiente arenal que cruzaremos y no sin dificultad, ya que la arena es blanda incluso en la orilla y nos enterramos a cada paso. Desistimos de trepar las rocas del final de la praia ya que además de ignorar si existía camino parecían bastante empinadas. Así que dimos un pequeño rodeo por la zona de los pinares con un tramo de fuerte subida al principio y luego siguiendo un sendero que se suaviza y desde el cual pudimos apreciar que no hubiera sido tan descabellado (aunque sí algo peligroso) subir por las rocas ya que el sendero existía.
Las vistas hacia Baroña son impresionantes y hacia las pequeñas calas que se encuentran bajo el acantilado también lo son.
El último atranco de la ruta lo encontramos al llegar a la Praia do Dique ya que se encuentra la desembocadura del Río Maior. Cruzamos estas aguas por la zona de las piedras, hay que hacerlo con cuidado porque hay algunas algo movedizas, para quien no quiera arriesgar siempre queda la alternativa de quitarse las botas ;)
Nuevamente toca subir por las rocas, enseguida damos con un sendero que nos lleva hasta el Miradoiro de Baroña, desde el cual se puede apreciar la praia y el poblado castrexo. Seguimos por el sendero ya que la marea está casi en lo más alto y es imposible llegar al castro por la costa.
La singularidad de este asentamiento que data de la Edad de Hierro, es el hermoso enclave elegido, una pequeña península rocosa separada de la tierra por un istmo de arena. La excavación que dio lugar a su descubrimiento data del año 1933, sufriendo una importante restauración en 2012 que le devolvió parcialmente el estado original. En nuestro caso, como ya lo conocíamos de anteriores andainas, aceleramos un poco el ritmo con la intención de disfrutar de la puesta de sol desde lo alto de las rocas del castro. El tiempo prometía un broche final de ruta inmejorable y así fue, después de una de las etapas más bonitas disfrutamos de un solpor espectacular...
La ruta la calificamos como moderada, más que nada por las dificultades y peligros que puedan significar las pequeñas trepadas. Nada que no pueda hacer un senderista medianamente preparado como es nuestro caso. Por lo demás es fácil, quizás muchos kms de arena que la pueden hacer algo cansina, pero hay zonas en las que podréis seguir por el paseo de madera y evitar las praias.
Importantísimo conocer el estado de las mareas si se quiere seguir el track tal cual, ya que hay lugares que serían casi imposibles de cruzar con marea alta.
Otra etapa impresionante y súper recomendable.
A por la siguiente!!!
Waypoints
Comments (2)
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Etapa para disfrutar, el pero, la arena blanda de algunas playas, alguna escaladita y lo impresionante poder coincidir al final con una puesta de sol
Así es Manorive, mereció la pena a pesar de enterrarnos un poco en la arena 😜
Gracias por tu comentario y valoración!