CUCULLA DE FARTÀRITX por Can Huguet

La ruta Cuculla de Fartàritx por Can Huguet, tiene como objetivo coronar la cima de esta montaña. Parte del Camí Vell Lluc-Pollença; pasa por las Casas de Can Huguet y regresa por el Pas de l’All y el Camí del Ninot.

Dejamos aparcado nuestro vehículo en el camí Vell Pollença-Lluc (GR-221). Unos metros después de haber pasado el punto conocido como Pi de Son Grua, donde este camino se encuentra con la carretera Ma-10 Pollença-Lluc, a la altura del kilómetro 5,3, tomamos
dirección Lluc, y enseguida vemos un espacio a mano izquierda donde caben varios coches.

Comenzamos a caminar por el camí Vell Pollença-Lluc, dirección Pollença. Al principio este camino discurre por el umbral del Torrent de la Vall d’en Marc y casi paralelo a la carretera Ma-10.

Cuando hemos recorrido unos tres kilómetros por este estupendo camino, lo abandonamos para coger el Camí de Can Romí por nuestra derecha. Es un camino ancho y asfaltado. Unos metros más adelante cruzamos un puente que salva el Torrent de la Vall d’en Marc y a continuación el camino hace un giro a la derecha y continua a lo largo de poco más de un kilómetro paralelo al Camí Vell de Lluc-Pollença, dejando entre ambos el torrente, una zona de árboles y tierras de cultivo.

Luego el camino describe una curva a la izquierda y enseguida vemos una desviación también a la izquierda que obviamos y en unos pocos minutos alcanzamos las Cases Noves de Can Huguet, que las bordeamos por la parte de atrás donde arranca un sendero de herradura. Ya hemos recorrido 4.8 km. desde el punto de inicio.

Continuamos por este sendero que comienza a ascender y en unos pocos metros llegamos a las Cases Velles de Can Huguet, aparentemente abandonadas. Un poco más arriba cruzamos un portell y nos adentramos en un bosque de encinas. El camino ahora comienza a describir lazadas para salvar la pendiente y más adelante las encinas van dando paso al carrizo y al matorral bajo.

Al cabo de un rato vemos a nuestra derecha el camino que por esta parte viene del Camí Vell de Lluc-Pollença. Caminamos por él unos metros con la finalidad de observar las vistas que nos ofrece sobre Pollença y su bahía.

Luego regresamos de nuevo a nuestro camino que enseguida nos presenta una visual de la Cuculla y del imponente Tomir, que aún quedan lejos. El camino que sigue subiendo presenta tramos empedrados y otros en los que ya ha desaparecido. Ahora avanza entre el matorral y algunos olivos y acebuches. Luego aparece una zona de rocas y a continuación alcanzamos una pared de piedra.

Detrás de esta pared de piedra tenemos las Casas de Fartàritx Gran y Fartàritx d’en Roig que se encuentran en un estado ruinoso y de abandono. En su día tuvieron su importancia como explotación agrícola-ganadera. Hemos caminado hasta aquí 7.6 km. desde la salida.

Después de visitar estas casas regresamos a la pared de piedra y continuamos paralelos a ella. Ahora el terreno es llano. Pasamos por una enorme era de trillar y un poco más adelante y ligeramente a la izquierda se encuentra la Font de Fartàritx, en las proximidades de un encinar.

La fuente es una mineta rectangular de reducidas dimensiones, tapada con una rejilla. El agua sale por una tubería de plástico y se deposita en un pequeño estanque, para su distribución.

El camino para subir a la Cuculla se encuentra detrás de la fuente. Tenemos que saltar por unas grandes rocas y luego nos adentramos en un frondoso encinar. Aquí el camino es poco evidente, pero hay hitos que nos van a guiar por donde seguir. Nos dirigimos a nuestra izquierda, siempre en subida. El encinar ha dado paso al carrizo que oculta el camino, por lo que hay que estar atentos a los hitos.

Al cabo de un rato de subir por este incómodo terreno llegamos a una roca lisa, que constituye un mirador natural y que nos ofrece unas vistas magníficas de Pollença, su puerto, las dos bahías y todo el entorno.

Subimos un poco más y antes de llegar al Passet de la Moleta, vemos a nuestra izquierda el camino para acceder a la Cuculla desde Pollença por las Casas de l'Assarell y a continuación tenemos el paso, situado a 614 m de altura y a 8.6 km. del punto de inicio, que lo reconocemos por el hito que corona una roca. Es un paso fácil que no presenta ninguna dificultad.

Superado el paso continuamos por nuestra derecha, primero entre unas rocas y luego por un sendero poco evidente que en continua ascensión nos va a llevar hasta la cima de la Cuculla de Fartàritx.

Esta cima situada a 712 m de altitud y a 9 km de la salida, está coronada por un gran hito de piedras y nos ofrece unas vistas espectaculares. Se puede distinguir el Puig de Ca Miner; el Puig Tomir; el Puig Roig; el Puig Caragoler; el Puig Gros de Ternelles; la península de Formentor; las Bahía de Pollensa y Alcudia, el Cap Ferrutx, etc.

Después de disfrutar de estas vistas iniciamos el descenso para dirigirnos al Pas de l’All. Para ello bajamos unos metros por el mismo camino y luego nos desviamos a nuestra derecha, siguiendo los hitos.

Descendemos hacia el Coll que vemos desde arriba, por un terreno con mucha piedra suelta y abundante carrizo. El Pas de l’All queda enfrente de nosotros, indicado con un hito encima de una roca.

Este paso, situado a 612 m. de altitud, es una brecha entre dos bloques de rocas, con grandes piedras que hacen de escalones. No presenta muchas dificultades, pero requiere algo de técnica. Obliga a usar manos y pies para salvar un desnivel de unos 35 m. con una verticalidad que infunde respeto. No está dotado de equipamiento, por lo que hay que extremar el cuidado.
Superado el paso seguimos bajando, siguiendo una senda poco evidente, que discurre entre arbustos espinosos y que nos acerca a Fartàritx d’en Vila. Antes de llegar se ve un grupo de árboles: Pinos, chopos, cipreses, etc., que nos identifican este lugar. Actualmente este sitio está cercado con una rejilla que impide el paso, si bien han colocado alrededor unas indicaciones de madera, para ir al Tomir o a Pollença.

Siguiendo la dirección que indica “Tomir”, alcanzamos un ancho camino de carro que conduce a Fartàritx des Racó. A la izquierda hay una barrera metálica candada y detrás continua el camino hasta las Casas de Fartàritx d’en Vila, que no se ven desde este punto.

Seguimos por nuestra derecha en suave subida hasta llegar a unos grandes pinos y luego el camino desciende ligeramente. En esta ocasión no visitamos las casas de Fartàritx des Racó, sinó que un poco antes de llegar salimos del camino y giramos a nuestra derecha atravesando una explanada. Hay unos postes indicadores de las direcciones “Puig Tomir/Pollença/Camí del Ninot”.

Tomamos la dirección del Camí del Ninot y unos hitos nos ayudan a encontrar el paso que conecta con este camino, también conocido como camí del Pujol. Es un corto paso entre las rocas que no tiene ninguna dificultad. El camino deja a la izquierda una profunda vaguada e inicia el descenso hacia la finca del Pujol.

Este camino era muy usado en otros tiempos por los «nevaters» que bajaban el hielo de la Casa de Nieve de Fartàritx, situada más arriba. Presenta en muchos de sus tramos restos de la pared de sostenimiento.

Un poco más abajo franqueamos una barrera metálica y el camino va describiendo una serie de lazadas para salvar la pendiente. Las vistas sobre el valle ofrecen una panorámica de extraordinaria belleza.

También divisamos una roca que tiene una forma peculiar que se asemeja a un ninot, de aquí el nombre que se ha dado a este camino. Más abajo llegamos a una rosseguera donde el camino se difumina un poco. Luego se adentra en una zona boscosa, donde predomina el pino y el matorral bajo. Cruzamos un portell y seguimos descendiendo hasta que más abajo conectamos con la pista que conduce a las Casas de el Pujol que quedan a nuestra derecha según bajamos.

Por lo tanto continuamos por la izquierda, bajando hasta alcanzar una barrera que tiene una escalerilla a su derecha, por donde saltamos y nos deja en el Camí Vell Lluc-Pollença(GR-221). Ahora solo se trata de seguir este camino hasta el lugar donde dejamos aparcado nuestro coche, dando por finalizada esta extraordinaria excursión.


-Los componentes del grupo hemos sido: Jaime, Pepe, Emiliano, Salvador y yo (Juan González Blázquez) como guía.

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