Cueva del Agua- Santuario- Castillo Peñas Negras- La Pedriza- Cueva Morceguillos- Bco. Presilla- Fuente Vadillo.Tíscar
near Tiscar, Andalucía (España)
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Itinerary description
Comenzamos esta ruta junto al aparcamiento grande de autobuses; desde allí parte un breve sendero que tras pasar por unos restos de murallas del Castillo nos conducirá a la famosa CUEVA DEL AGUA, también conocida como Cueva de la Virgen o de las Maravillas.
Este cañón, horadado por las aguas del arroyo de Tíscar, es una de las primeras grutas naturales descubiertas en nuestro país. Su espectacular belleza, conformando saltos, fuentes y cascadas de agua, hizo que fuese declarada Monumento Natural por la Junta de Andalucía. Desde el año 1.993 el Ayuntamiento de Quesada organiza cada mes de Agosto conciertos de música étnica, dada su magnífica acústica, convirtiendo la cueva en un espectacular escenario.
La entrada es libre y el acceso se realiza por un túnel de unos 10 metros de largo y 1 metro de alto, junto a una acequia. Es una interesante formación caliza, donde se funden el agua del río Tíscar y la roca del Monte del Caballo. Las dos sierras se abrazan para dejar bajo sus entrañas el agua que se pierde caprichosamente entre saltos, pilones, cascadas y fuentes, para seguir su curso zigzagueante río abajo hasta formar el idílico Pilón Azul camino de la Aldea de Belerda.
Desandando parte del camino, nos encaminamos al Santuario. La conquista del castillo de la Peña Negra tuvo lugar más de 70 años después de la toma cristiana de Quesada. Las dificultades de la conquista de la fortaleza provocaron la glorificación de este lugar, que comenzó a ser centro de devoción de la zona. Esto daría lugar a la construcción del SANTUARIO, cuyo exterior conserva gran parte de la traza original de los siglos XVI y XVII. Sin embargo, su parte interior presenta más alteraciones respecto a la construcción original, tras la restauración llevada a cabo para paliar los daños sufridos durante la guerra civil.
El actual santuario de Tíscar se consolidó, tal y como podemos verlo en la actualidad, a mediados del siglo XX. Está situado entre dos rocas impresionantes y sobre las ruinas de otros pequeños templos que le precedieron. El templo tiene planta rectangular y sus muros se construyeron con paramento irregular de piedra. La iluminación interior se resuelve con varios óculos en el nivel superior, próximos a la cubierta. En la puerta principal, sobre el dintel, hay una imagen de la Virgen entre dos árboles, esculpida en alto relieve. Rematando esta fachada se ubicó el campanario. En la plaza del Santuario hay una fuente de agua fresquita con un poema de Antonio Machado que dice:
En la sierra de Quesada
hay un águila gigante,
verdosa, negra y dorada,
siempre las alas abiertas.
Es de piedra y no se cansa.
Pasado Puerto Lorente,
entre las nubes galopa
el caballo de los montes.
Nunca se cansa: es de roca.
En el hondón del barranco
se ve al jinete caído,
que alza los brazos al cielo.
Los brazos son de granito.
Y allí donde nadie sube
hay una virgen risueña
con un río azul en brazos.
Es la Virgen de la Sierra.
Seguidamente nos dirigimos al restaurante Bar Soria para tomar energías para afrontar el resto de esta ruta. Después nos dirigimos al CASTILLO DE PEÑAS NEGRAS por un tramo vertiginoso de escaleras (a tener en cuenta si sufres de vértigo) para superar el casi vertical peñón que nos separa del castillo, en pésimo estado pero con vistas espectaculares.
Las primeras noticias conocidas del castillo de Tíscar datan del año 876 y aparece en las crónicas que relatan la invasión de las hordas procedentes de Córdoba. Del año 1240 es el torreón de Don Enrique, en el punto más alto del Puerto de Tíscar, y la torre del homenaje enclavada en las míticas Peñas Negras. En sus inmediaciones se han encontrado restos de muralla y cerámica romana. En este sitio tuvieron lugar muchas batallas hasta que se produjo la reconquista definitiva del reino nazarí de Granada por parte de los Reyes Católicos.
El castillo de Tíscar o de Peñas Negras, está ubicado en un hermoso y escarpado paraje. Las enormes dificultades para su acceso, dado lo escarpado del terreno, convertían esta fortaleza en un objetivo prácticamente inexpugnable. Al frente de la fortaleza musulmana estaba el caudillo árabe Mohammed Andón. La inaccesibilidad del castillo hizo que el sitio con el que habían cercado la plaza los cristianos se prolongara durante más tiempo del que tenían previsto. Entonces, uno de los escuderos de don García López Padilla, llamado Pero Hidalgo, decidió trepar entre los riscos y debilitar la guardia de los centinelas. Consiguió él solo acabar con la vida de los diez centinelas facilitando el ataque que les llevaría a la victoria. Mohammed Andón rindió la plaza con las 5000 personas que se refugiaban en su interior. El castillo de Tíscar ha tenido varias ampliaciones, llegando a ocupar hasta el lugar en el que hoy se levanta el santuario. Actualmente sólo quedan restos de la torre del homenaje.
Tras la conquista cristiana se mantuvieron y modificaron sus estructuras. En el patio de armas puede observarse todavía el escudo de armas de Pedro I (1052-1104). Con algo de dificultad y tras una pequeña trepada conseguimos acceder hasta el interior de la Torre del Homenaje.
Descendemos del Castillo por las escaleras y atravesando un olivar enlazamos con la VEREDA DEL VADILLO, tramo ligeramente ascendente sin dificultad alguna. Nos encontramos con un señor de 85 años oriundo de Tíscar, que iba a las tareas del campo y con el que estuvimos charlando largo rato sobre interesantes historias de antaño. Antes de llegar al collado, nos desviamos de la Vereda del Vadillo para encarar el tramo final de subida a LA PEDRIZA (1.182 mts.) por un incómodo terreno pedregoso (lapiaz) que nos conduce a la cima desde la que obtenemos unas espectaculares panorámicas de: El Rayal, Barranco de La Presilla, Peñas Negras con el Castillo, Cerro Carboneras, Cerro Don Pedro, etc..
Descenderemos de La Pedriza hasta llegar a una repisa de unos 5 m. de altura que bordea la valla de un cortijo y que nos conduce hasta el bello BARRANCO DE LA PRESILLA. Comenzaremos un tramo descendente por carril hasta la CARRETERA C-323 que une Quesada con Tíscar, con unas maravillosas vistas de las cuevas naturales de la cara Sur del Rayal y de la cara norte de La Pedriza, que por este lado se convierte en una pared rocosa vertical.
Una vez en la carretera C-323 la tomaremos a la derecha (200 m.), para desviarnos a la izquierda por una pista que desciende al BARRANCO DE LA TORRE. Después comienza un ascenso por el paraje conocido por LOS VILLARES, hasta llegar a una bifurcación. Tomaremos la izquierda enlazando con el GR-247 que discurre por la Vereda del Vadillo y que nos llevará, en un bonito y panorámico descenso, hasta la FUENTE DEL VADILLO.
La fuente del Vadillo se encuentra junto al RÍO TISCAR, en el punto kilométrico 13 de la carretera de Quesada a Pozo Alcón, creando entre ambos un paraje fresco e idílico. El agua procede de la falla de Tiscar y ha llegado hasta aquí circulando de forma subterránea por rocas carbonatadas. Se trata de una fuente rural y el uso del agua es para abastecimiento urbano y regadío. El tipo de surgencia es de manantial y su caudal medio es de 10-100 litros/segundo. El aspecto del Vadillo de Tiscar ha cambiado sustancialmente a lo largo de los años. Sobre el año 1910-15, el puente que cruzaba el río era de madera. También llama la atención la ausencia de arbolado en aquellos años.
Junto a la fuente hay hoy un restaurante actualmente cerrado. Históricamente, la Fuente del Vadillo ha sido la más caudalosa de toda la zona. En los años 70 y 80, tanto la calidad como el caudal de agua que salía por los tres caños era realmente espectacular. También el Arroyo Vadillo llevaba gran cantidad de agua. El agua incluso se desbordaba del arroyo, buscando salida al río por las rocas adyacentes que servían de tobogán en los juegos infantiles.
Desde El Vadillo continuaremos por la carretera, que tiene muy poco tráfico, y tras pasar el Cortijo del Toral entraremos en un túnel. A la salida de este encontraremos un precioso mirador con unas gratificantes vistas antes de concluir esta corta pero interesantísima ruta. Debido a problemas técnicos perdimos la mayoría de las fotos realizadas, con lo que las que hemos subido son extraídas de internet.
Este cañón, horadado por las aguas del arroyo de Tíscar, es una de las primeras grutas naturales descubiertas en nuestro país. Su espectacular belleza, conformando saltos, fuentes y cascadas de agua, hizo que fuese declarada Monumento Natural por la Junta de Andalucía. Desde el año 1.993 el Ayuntamiento de Quesada organiza cada mes de Agosto conciertos de música étnica, dada su magnífica acústica, convirtiendo la cueva en un espectacular escenario.
La entrada es libre y el acceso se realiza por un túnel de unos 10 metros de largo y 1 metro de alto, junto a una acequia. Es una interesante formación caliza, donde se funden el agua del río Tíscar y la roca del Monte del Caballo. Las dos sierras se abrazan para dejar bajo sus entrañas el agua que se pierde caprichosamente entre saltos, pilones, cascadas y fuentes, para seguir su curso zigzagueante río abajo hasta formar el idílico Pilón Azul camino de la Aldea de Belerda.
Desandando parte del camino, nos encaminamos al Santuario. La conquista del castillo de la Peña Negra tuvo lugar más de 70 años después de la toma cristiana de Quesada. Las dificultades de la conquista de la fortaleza provocaron la glorificación de este lugar, que comenzó a ser centro de devoción de la zona. Esto daría lugar a la construcción del SANTUARIO, cuyo exterior conserva gran parte de la traza original de los siglos XVI y XVII. Sin embargo, su parte interior presenta más alteraciones respecto a la construcción original, tras la restauración llevada a cabo para paliar los daños sufridos durante la guerra civil.
El actual santuario de Tíscar se consolidó, tal y como podemos verlo en la actualidad, a mediados del siglo XX. Está situado entre dos rocas impresionantes y sobre las ruinas de otros pequeños templos que le precedieron. El templo tiene planta rectangular y sus muros se construyeron con paramento irregular de piedra. La iluminación interior se resuelve con varios óculos en el nivel superior, próximos a la cubierta. En la puerta principal, sobre el dintel, hay una imagen de la Virgen entre dos árboles, esculpida en alto relieve. Rematando esta fachada se ubicó el campanario. En la plaza del Santuario hay una fuente de agua fresquita con un poema de Antonio Machado que dice:
En la sierra de Quesada
hay un águila gigante,
verdosa, negra y dorada,
siempre las alas abiertas.
Es de piedra y no se cansa.
Pasado Puerto Lorente,
entre las nubes galopa
el caballo de los montes.
Nunca se cansa: es de roca.
En el hondón del barranco
se ve al jinete caído,
que alza los brazos al cielo.
Los brazos son de granito.
Y allí donde nadie sube
hay una virgen risueña
con un río azul en brazos.
Es la Virgen de la Sierra.
Seguidamente nos dirigimos al restaurante Bar Soria para tomar energías para afrontar el resto de esta ruta. Después nos dirigimos al CASTILLO DE PEÑAS NEGRAS por un tramo vertiginoso de escaleras (a tener en cuenta si sufres de vértigo) para superar el casi vertical peñón que nos separa del castillo, en pésimo estado pero con vistas espectaculares.
Las primeras noticias conocidas del castillo de Tíscar datan del año 876 y aparece en las crónicas que relatan la invasión de las hordas procedentes de Córdoba. Del año 1240 es el torreón de Don Enrique, en el punto más alto del Puerto de Tíscar, y la torre del homenaje enclavada en las míticas Peñas Negras. En sus inmediaciones se han encontrado restos de muralla y cerámica romana. En este sitio tuvieron lugar muchas batallas hasta que se produjo la reconquista definitiva del reino nazarí de Granada por parte de los Reyes Católicos.
El castillo de Tíscar o de Peñas Negras, está ubicado en un hermoso y escarpado paraje. Las enormes dificultades para su acceso, dado lo escarpado del terreno, convertían esta fortaleza en un objetivo prácticamente inexpugnable. Al frente de la fortaleza musulmana estaba el caudillo árabe Mohammed Andón. La inaccesibilidad del castillo hizo que el sitio con el que habían cercado la plaza los cristianos se prolongara durante más tiempo del que tenían previsto. Entonces, uno de los escuderos de don García López Padilla, llamado Pero Hidalgo, decidió trepar entre los riscos y debilitar la guardia de los centinelas. Consiguió él solo acabar con la vida de los diez centinelas facilitando el ataque que les llevaría a la victoria. Mohammed Andón rindió la plaza con las 5000 personas que se refugiaban en su interior. El castillo de Tíscar ha tenido varias ampliaciones, llegando a ocupar hasta el lugar en el que hoy se levanta el santuario. Actualmente sólo quedan restos de la torre del homenaje.
Tras la conquista cristiana se mantuvieron y modificaron sus estructuras. En el patio de armas puede observarse todavía el escudo de armas de Pedro I (1052-1104). Con algo de dificultad y tras una pequeña trepada conseguimos acceder hasta el interior de la Torre del Homenaje.
Descendemos del Castillo por las escaleras y atravesando un olivar enlazamos con la VEREDA DEL VADILLO, tramo ligeramente ascendente sin dificultad alguna. Nos encontramos con un señor de 85 años oriundo de Tíscar, que iba a las tareas del campo y con el que estuvimos charlando largo rato sobre interesantes historias de antaño. Antes de llegar al collado, nos desviamos de la Vereda del Vadillo para encarar el tramo final de subida a LA PEDRIZA (1.182 mts.) por un incómodo terreno pedregoso (lapiaz) que nos conduce a la cima desde la que obtenemos unas espectaculares panorámicas de: El Rayal, Barranco de La Presilla, Peñas Negras con el Castillo, Cerro Carboneras, Cerro Don Pedro, etc..
Descenderemos de La Pedriza hasta llegar a una repisa de unos 5 m. de altura que bordea la valla de un cortijo y que nos conduce hasta el bello BARRANCO DE LA PRESILLA. Comenzaremos un tramo descendente por carril hasta la CARRETERA C-323 que une Quesada con Tíscar, con unas maravillosas vistas de las cuevas naturales de la cara Sur del Rayal y de la cara norte de La Pedriza, que por este lado se convierte en una pared rocosa vertical.
Una vez en la carretera C-323 la tomaremos a la derecha (200 m.), para desviarnos a la izquierda por una pista que desciende al BARRANCO DE LA TORRE. Después comienza un ascenso por el paraje conocido por LOS VILLARES, hasta llegar a una bifurcación. Tomaremos la izquierda enlazando con el GR-247 que discurre por la Vereda del Vadillo y que nos llevará, en un bonito y panorámico descenso, hasta la FUENTE DEL VADILLO.
La fuente del Vadillo se encuentra junto al RÍO TISCAR, en el punto kilométrico 13 de la carretera de Quesada a Pozo Alcón, creando entre ambos un paraje fresco e idílico. El agua procede de la falla de Tiscar y ha llegado hasta aquí circulando de forma subterránea por rocas carbonatadas. Se trata de una fuente rural y el uso del agua es para abastecimiento urbano y regadío. El tipo de surgencia es de manantial y su caudal medio es de 10-100 litros/segundo. El aspecto del Vadillo de Tiscar ha cambiado sustancialmente a lo largo de los años. Sobre el año 1910-15, el puente que cruzaba el río era de madera. También llama la atención la ausencia de arbolado en aquellos años.
Junto a la fuente hay hoy un restaurante actualmente cerrado. Históricamente, la Fuente del Vadillo ha sido la más caudalosa de toda la zona. En los años 70 y 80, tanto la calidad como el caudal de agua que salía por los tres caños era realmente espectacular. También el Arroyo Vadillo llevaba gran cantidad de agua. El agua incluso se desbordaba del arroyo, buscando salida al río por las rocas adyacentes que servían de tobogán en los juegos infantiles.
Desde El Vadillo continuaremos por la carretera, que tiene muy poco tráfico, y tras pasar el Cortijo del Toral entraremos en un túnel. A la salida de este encontraremos un precioso mirador con unas gratificantes vistas antes de concluir esta corta pero interesantísima ruta. Debido a problemas técnicos perdimos la mayoría de las fotos realizadas, con lo que las que hemos subido son extraídas de internet.
Waypoints
River
3,245 ft
Barranco de la Torre
Intersection
3,218 ft
Carretera C-323. Desvio derecha
Waypoint
3,011 ft
Cortijo Del Toral
Intersection
3,085 ft
Cruzar carretera C-323
Intersection
3,028 ft
Cruzar carreteraC-323
Intersection
3,498 ft
Desvío izquierda
Intersection
3,243 ft
Desvío izquierda por camino
Intersection
3,380 ft
Desvío Izuierda
Waypoint
3,416 ft
Los Villares
Ruins
3,660 ft
Ruinas de Cortijo
River
2,968 ft
Río Tíscar
Risk
3,674 ft
Seguir por repisa junto a valla
Tunnel
2,974 ft
Tunel
Waypoint
3,120 ft
Vereda Del Vadillo
Waypoint
3,526 ft
Vereda Del Vadillo
Comments (6)
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Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Ruta asequible aunque algo complicada de seguir en el tramo que discurre entre fincas olivareras (es fácil perder el sendero, aunque siempre se puede improvisar y seguir alguna pista más ancha; es lo que yo hice).
La ruta tiene varios atractivos que la hacen muy recomendable: el Santuario de Tiscar, el Castillo de la Peña Negra y la Cueva del Agua).
Mafmaquinas, gracias por tus comentarios y valoración.
Un saludo
Ruta preciosa aunque para la fecha que estamos debido a la climatología... Poca agua bajaba. El castillo más bien ruinas, está apuntalado en la parte alta, no subir. Por lo demás pueblo muy curioso e interesante. Recomendable 100%
mariadelmar6220, muchas gracias por tus comentarios. Efectivamente el castillo está muy deteriorado, es una pena que no se rehabiliten estas maravillas históricas, Si lo hicieran, sería un aliciente más para esta encantadora zona. De todas formas las panorámicas desde él hacen que merezca la pena subir. Una cosilla más, si valoras la ruta ya lo bordas :)
Un saludo.
Magnífica descripción acompañada por la historia del lugar. Gracias por el esfuerzo
Gracias a ti cannis24 por tu valoración y comentario.
Un saludo.