Cueva del Pirata.

Ruta fácil de seguir a pesar de los innumerables caminitos que conducen al mismo sitio y perfectamente realizable en dos horas y media. Antes de que sigáis leyendo y os enganchéis a esta ruta os tengo que decir que hoy día 16-05-2021 el compañero de caminatas Pino la ha realizado y me comunica que la cueva del Pirata y la del Pont se encuentran totalmente cerradas a cal y canto, con paredes de cemento y candado en las puertas. Por lo tanto de momento la podéis utilizar para llegar a la zona de Cala Varques, que según también me han comentado senderistas, el acceso desde la carretera Ma-4014 está super complicado, con paredes altas y terminación de vidrio.

Dejamos el vehículo estacionado junto al complejo turístico Romántica, al que antes de ser urbanizado se le conocía y se le conoce como s'Estany d'En Mas, y nos dirigimos hacia la playa saliendo de esta por el acantilado de su lado derecho. Lo más cómodo es tomar como referencia los edificios de Calas de Mallorca que se ven muy a lo lejos; nosotros cogimos el que va algo más cerca de la costa. Durante el trayecto vimos varios ejemplares de tortugas mediterráneas (Testudo hermanni) que en esta época después de la hibernación comienzan a estar activas.

El primer punto importante lo tenemos en la bajada del camino por el que venimos para más adelante acceder a la Cueva del Moro. No se encuentra señalizado. Haciéndolo con precaución no presenta ningún peligro. Según bajamos cogemos el sendero a la derecha pasando bajo una balma en busca, a lo lejos, de un promontorio que nos servirá de referencia. Llegados a él, de frente a la izquierda, se halla la Cueva Dels Colons que es solo accesible desde el mar. Si miramos a la derecha veremos nuestra cueva con una pequeña abertura y una gran roca a modo de dintel. Sus dimensiones resultan modestas con varias cámaras y unas grandes columnas que unen el techo con el suelo. A la salida regresamos al montículo y deshacemos el camino, pero no volveremos por el mismo lugar de la bajada. Hay que trepar un poco, pero resulta sencilla la ascensión.

De regreso al camino por el que veníamos, que está bien pisoteado, continuamos a la izquierda en busca de una pared seca con un botador, aunque ya no realiza su función pues el muro está derruido. Enfrente tenemos Cala Falcó a la que tenemos que llegar a su cola de arena para tomar el camino que atraviesa el torrente de un lado a otro. No subimos por el camino ancho que sale de la cala.

En unos diez minutos se llega al puente natural de Es Caló Blanc, que en algunos sitios he visto que también le llaman El Pont de Cala Varques, lugar de gran atractivo fotográfico, que toma el nombre de la cala de rocas que se encuentra a su lado.

Pasada la cala llegamos a Cala Varques con una arena en buen estado y algo más allá también había otro arenal más pequeño al que no llegamos.

Después de tomar fuerzas con los bocatas regresamos al puente natural y entre unos acebuches a la izquierda sale el camino de regreso a Cala Falcó. Se ahorra algo de tiempo atajando por aquí. Atravesamos nuevamente el torrente y vamos en busca de la pared derruida con el botador que ya habíamos pasado, pero no hace falta llegar hasta ella. Un sendero que sale a la izquierda nos lleva a un portal del que a lo lejos se ve una de sus columnas, waypoints 22 y 23. La pared del botador es la misma que la del portal. Según lo atravesamos giramos a la izquierda por un camino ancho y plano que siempre en línea recta y con una pared a nuestra izquierda nos conduce a la Cova des Pont. Para llegar a ella unos 30 metros antes de un paso ancho que nos topamos de frente en una pared, waypoint 28, entre acebuches torcemos a la izquierda e inmediatamente la vemos. La vez que fui el año pasado la puerta estaba abierta pero esta vez estaba cerrada con cadena, aunque alguien ha abierto un boquete en el marés posibilitando su visita. A destacar el puente que le da nombre y el lago Victoria de su interior, al que no llegamos.

Salimos nuevamente al camino ancho sentido hacia la costa y en el primer cruce giramos a la izquierda para dirigirnos a la Cueva del Pirata. Tampoco se halla señalizada. El desvío lo encontramos a la derecha, sentido Cala Romántica, entre acebuches. Aquí tambien han intentado impedir el acceso con puertas de hierro, pero también se puede pasar. Tiene unas dimensiones mucho mayores que las otras dos en donde cámaras y formaciones calcáreas se encuentran por doquier. Se habilitó para su visita en 1987 pero no llegó a ser explotada; prueba de ello son los restos de bancos que se ven en la primera sala que eran para que los turistas esperaran para visitar la cueva. La laguna interior es algo inesperado que atrae al visitante.

De regreso a la pista forestal continuamos hasta llegar a la depuradora a partir de la cual el camino ya comienza a ser de asfalto. Algo antes habremos visto por la izquierda una cisterna con un pozo y dos picas para abrevar al ganado. El asfalto nos conduce hasta el complejo Romántica, donde una barrera con candado nos cierra el paso, aunque sea este el único camino que va a la depuradora de titularidad pública.

Aquí tenemos dos opciones: la primera es salvar la puerta por el lado izquierdo rodeando un pequeño muro de bloques y continuar por el asfalto por enmedio del complejo hasta la puerta de entrada, cerrada también con candado y salvarla por su muro de la derecha, opción fácil; la segunda es salvar la puerta circulando por el cauce del torrente, pasar bajo un puentecito y llegar por la parte externa de la puerta de entrada del complejo y saltar un muro de 1 metro para llegar a la calle, opción fácil siempre que el torrente como hoy se encuentre seco, cosa que podemos comprobar antes de iniciar la ruta ya que el coche lo estacionemos en la calle de entrada al hotel.

A tener en cuenta: no hay sombra durante todo el recorrido, sólo en Cala Varques; la ruta no está señalida, existiendo muchas sendas para realizarlo; aunque sea llano, el tipo de terreno es rocoso; también se puede hacer el regreso por el mismo por el mismo camino de ida.

Compañeros de ruta: Magdalena, Cristina y Juan.