Cuiña desde Piornedo

Bonita ruta por la Sierra de Ancares que desde el pintoresco pueblo de Piornedo nos llevará hasta el Cuiña, que con sus 1992 m de altitud corona estas preciosas montañas.
Hay a la entrada de este pueblo lucense lleno de pallozas una curiosa fuente, construída por aportación popular, en la que reza la inscripción: "Hizose en 1787. Viva Piornedo". En el centro hay una cruz, a cuya izquierda y derecha yacen un hombre y una mujer en actitud singular. No dejéis de ir a verla para dejar volar un poco la imaginación y encontrar su significado.
Salimos por tanto de Piornedo (1152 m), y tras pasar la noche y darnos una opípara cena en La Cantina del Mustallar, lugar entrañable donde los haya, salimos en dirección Sudeste de la parte alta del pueblo, y tras pasar la capela de San Lourenzo ya vemos una pista que al final se convertirá en camino y que nos llevará hasta la Mallada del Mustallar (o Mostallar), collado a 1700 m de altitud. Imposible perderse.
Durante estos 5 km ascenderemos 600 m, pasaremos una fuente con una agua rica rica, y dejando a nuestra derecha el Pico Agulleiro atravesaremos la Campa de Camporredondo hasta llegar a lo que fue una cabaña de piedra y que actualmente está en ruinas: La Cabaña del Pastor o Extremeño”, aunque yo siempre he pensado que sería más lógico denominarla La Cabaña del Pastor Extremeño. En cualquier caso es un sitio estupendo para reponer fuerzas antes de iniciar la subida a la Mallada del Mustallar, o Mostallar, Mostellar, Mustellar, Mustallar, Mostayal o Mostachal, que no deja de ser todo el mismo nombre dicho de diversas formas. Ésto se debe a que esta braña se encuentra rodeada de árboles de la especie Sorbus aria, también llamado serbal blanco o mostajo. Por esta zona se le conoce con el nombre de mostellar. Así que nos podemos hacer una idea de dónde procede el nombre de este paraje. Un sorbus aria o un grupo de ellos, sería un mostellar. Así, la braña rodeada de estos árboles sería la braña del Mostellar.Como dice Rutinas Varias (página muy muy recomendable) en su blog, lo que no se sabe es si la braña dio nombre al pico o el pico a la braña, aunque lo más lógico sería lo primero.
Es este collado unos de mis favoritos; al Oeste tenemos el Mustallar, imponente, al Este el Penalonga, y al Sur, cruzando la maldita e innecesaria alambrada que marca la divisoria entre Lugo y León , tenemos el más que precioso valle de Burbia, con su “temido” Reventón (ascenso de 320 m en un km). De aqui sale un camino hacia la cumbre del Penalonga (1870 m -se me olvidó el waypoint-) y que tendremos que abandonar al ver unas pedreras para poder llegar a la cima de esta curiosa montaña. El regalo visual es tan grande que podemos pensar que es mucho para el esfuerzo realizado. El Cuiña pondrá las cosas en su sitio. Vemos el omnipresente Mustallar, después el Pico Lanzas, Os Penedoes, el Cuerno Maldito con su peculiar figura, el Tres Obispos...Hacia el Este ya vemos el colladín que atravesaremos para iniciar el ascenso al Cuiña, a su derecha Dos Hermanitos, y detrás el Miravalles.
Iniciamos pues el descenso que nos llevará hasta el colladín desde donde iniciaremos el camino hacia la cima del Cuiña, cima esta bastante redondeada y que por tanto carece de pasos (ni fáciles ni difíciles ya que no existen) y que con paciencia y alguna que otra mirada al tremendo paisaje que vamos dejando a nuestra espalda pues se anda con bastante alegría. En la cima mucho viento y fresquete, como corresponde a esta altitud sin ningún tipo de protección. La vista es parecida a la que teníamos desde el Penalonga, pero mejor. Me emociona el tono azulado que colorea las montañas y su infinito, y como se pierde en el horizonte. En esta montaña me fascina mirar al Sudoeste, y apreciar todo el cordal, hasta el Cuerno Maldito (que de maldito sólo tiene el nombre) y más allá.
Descendemos un poco a una zona menos venteada y zampamos con la habitual “lareca” de estas ocasiones.
Tras volver de regreso a la cima del Penalonga, en vez de volver sobre nuestras pasos iniciamos el recorrido por el alto de esta Peña cuyo nombre indica claramente su forma. Enseguida aparece una senda que nos lleva por uno de los caminos menos conocidos y más bellos de esta zona de Ancares y que a una altitud de 1900 m nos regala un espectáculo bellísimo a izquierda y derecha. No las tenía yo todas conmigo ya que tras un prolongado descenso y la consabida pedrera (aunque no muy latosa) el camino se pierde entre unas escobas y aparece un bosque de acebos (Acevais) en el cual NO debemos entrar a no ser que vayamos por el camino que es franco. De no ser así nos podemos meter en un jardín del que nos puede llevar mucho tiempo salir. He marcado con un waypoint la entrada al susodicho bosque. El track es bueno, y no deberías tener ningún problema para encontrar el camino. Tras cruzar este curioso y bonito bosque salimos a la misma pista de la ida y que aproximadamente en un km nos lleva hasta la entrada del Piornedo.
La ruta la he calificado de fácil porque sin nieve/hielo carece de ninguna dificultad, y solo precisa de cierta preparación física por el desnivel (1215 m) y de bastante corazón.
Disfrutad.