De Mondariz-Balneario à Ponte das Poldras de Tatín
near Mondariz-Balneario, Galicia (España)
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Itinerary description
Mondariz-Balneario es un municipio de España en la provincia de Pontevedra, comunidad autónoma de Galicia. En 2018 tenía 618 habitantes y tiene una superficie de 2,31 km², siendo el más pequeño de Galicia.
El municipio se creó por segregación del de Mondariz en la década de 1920. El 17 de abril de 1925, la localidad recibió el título de «Muy Hospitalaria Villa» por parte del rey Alfonso XIII.
Se trata de una pequeña villa que creció alrededor de sus preciadas fuentes medicinales.
Entró en decadencia al pasar de moda el termalismo pero desde hace unos años ha vuelto a resurgir con fuerza gracias al potencial turístico que le da el río Tea con sus playas fluviales y sus sombreados paseos.
Los concellos de Covelo y Mondariz se encuentran divididos por un obstáculo natural que es el río Tea. El río, debido a su caudal, se hace difícil de vadear según la época del año. Para ello, desde tiempos remotos se han habilitado diversos puentes y pasos para lograr este objetivo.
Desde tiempos inmemoriales el río era atravesado por diversas rutas de arrieros que recorrían la comarca provenientes de las orillas del Miño en dirección al norte de Galicia. Varios puentes lo cruzan, entre ellos el de Cernadela, cargado de leyendas, que vamos a encontrar a mitad de camino.
En diversos lugares del río, debido a la dificultad y el gran coste que entrañaba la construcción de puentes en lugares de difícil acceso, se habilitaron diversos “pasos” o “poldras” sobre el río en forma de piedras intercaladas y dispuestas a una distancia entre ellas que hicieran que fuera posible el paso entre unas y otras con el fin de alcanzar la otra orilla.
También eran utilizados para la pesca, que antaño era uno de los motores económicos de toda la cuenca del Tea. Peces como la lamprea, la trucha o el salmón, alimentaban antaño a la población. Sobre la antigüedad y origen de los pasos, hay quién asegura que tienen pasado romano o incluso anterior.
Uno de esos paseos es el que nos lleva por una margen del río hasta el lugar de Tatín en conde encontraremos un puente de grandes piedras ("poldras" en galego) y volveremos por la otra margen siguiendo un pequeño sendero de pescadores hasta el puente de Cernadela.
Los pasos de Tatín se localizan en Outerelo, en la parroquia de Lougares y permitían el paso sobre el Tea y ahorrar a los vecinos de Lougares y Sabaxáns un gran rodeo ya que el puente más cercano tanto río abajo como río arriba está a dos kilómetros.
Junto a los pasos encontraremos un pequeño molino “de canle” restaurado en donde podremos ver la moega, a caixa de fariña y un pé y una moa, que quizás fueran las originales. Sobre los dinteles de la puerta veremos un par de cruces de protección.
Todo el camino es a la sombra de un bosque de carballos y árboles de ribera atlántica como los ameneiros, salgueiros, laureles e, incluso, bosquetes de cañas y bambú.
También vamos a poder disfrutar de varias áreas de picnic y de bastantes playas fluviales.
Es una caminata de baja dificultad para la que no necesitaremos calzado especial ni bastones. Bastará una cantimplora de agua ya que no vamos a encontrar agua potable en todo el camino y un buen gorro porque en esta zona el calor suele ser bastante fuerte en verano.
El municipio se creó por segregación del de Mondariz en la década de 1920. El 17 de abril de 1925, la localidad recibió el título de «Muy Hospitalaria Villa» por parte del rey Alfonso XIII.
Se trata de una pequeña villa que creció alrededor de sus preciadas fuentes medicinales.
Entró en decadencia al pasar de moda el termalismo pero desde hace unos años ha vuelto a resurgir con fuerza gracias al potencial turístico que le da el río Tea con sus playas fluviales y sus sombreados paseos.
Los concellos de Covelo y Mondariz se encuentran divididos por un obstáculo natural que es el río Tea. El río, debido a su caudal, se hace difícil de vadear según la época del año. Para ello, desde tiempos remotos se han habilitado diversos puentes y pasos para lograr este objetivo.
Desde tiempos inmemoriales el río era atravesado por diversas rutas de arrieros que recorrían la comarca provenientes de las orillas del Miño en dirección al norte de Galicia. Varios puentes lo cruzan, entre ellos el de Cernadela, cargado de leyendas, que vamos a encontrar a mitad de camino.
En diversos lugares del río, debido a la dificultad y el gran coste que entrañaba la construcción de puentes en lugares de difícil acceso, se habilitaron diversos “pasos” o “poldras” sobre el río en forma de piedras intercaladas y dispuestas a una distancia entre ellas que hicieran que fuera posible el paso entre unas y otras con el fin de alcanzar la otra orilla.
También eran utilizados para la pesca, que antaño era uno de los motores económicos de toda la cuenca del Tea. Peces como la lamprea, la trucha o el salmón, alimentaban antaño a la población. Sobre la antigüedad y origen de los pasos, hay quién asegura que tienen pasado romano o incluso anterior.
Uno de esos paseos es el que nos lleva por una margen del río hasta el lugar de Tatín en conde encontraremos un puente de grandes piedras ("poldras" en galego) y volveremos por la otra margen siguiendo un pequeño sendero de pescadores hasta el puente de Cernadela.
Los pasos de Tatín se localizan en Outerelo, en la parroquia de Lougares y permitían el paso sobre el Tea y ahorrar a los vecinos de Lougares y Sabaxáns un gran rodeo ya que el puente más cercano tanto río abajo como río arriba está a dos kilómetros.
Junto a los pasos encontraremos un pequeño molino “de canle” restaurado en donde podremos ver la moega, a caixa de fariña y un pé y una moa, que quizás fueran las originales. Sobre los dinteles de la puerta veremos un par de cruces de protección.
Todo el camino es a la sombra de un bosque de carballos y árboles de ribera atlántica como los ameneiros, salgueiros, laureles e, incluso, bosquetes de cañas y bambú.
También vamos a poder disfrutar de varias áreas de picnic y de bastantes playas fluviales.
Es una caminata de baja dificultad para la que no necesitaremos calzado especial ni bastones. Bastará una cantimplora de agua ya que no vamos a encontrar agua potable en todo el camino y un buen gorro porque en esta zona el calor suele ser bastante fuerte en verano.
Waypoints
Comments (4)
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Un agradable sendero con playas fluviales, molinos, espesa vegetación, todo lo necesario para una estupenda excursión en compañía de tu pareja y algunos amigos.
La única pega es que la gente sigue ensuciando nuestro medio ambiente, dejando pañales, papeles e incluso compresas.
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Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
La única pega es que la gente sigue ensuciando nuestro medio ambiente, dejando pañales, papeles e incluso compresas.
Bonita ruta, facil de realizar y de seguir ..