De Nerva a Berrocal por el ferrocarril minero
near Nerva, Andalucía (España)
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Itinerary description
--Sendero Nerva-Berrocal. [https://senderosconfinalfeliz.es.tl/]
Esta ruta nos lleva de Nerva, localidad de 5.700 habitantes que debe su nombre a una placa aparecida en honor al emperador romano Nerva, a Berrocal, a lo largo del cauce del río Tinto, siguiendo el trazado del ferrocarril, para adentrarnos en el corazón de la cuenca minera y en sus instalaciones, lavaderos de mineral, escolleras, talleres. La ruta transcurre entre la vía del tren y el río Tinto hasta el Puente de Cachán, cuando abandona la vía, cruza el río y asciende de forma pronunciada hasta Berrocal. Si quieres evitarte esta subida y hacer la ruta más cómoda, hazla en sentido contrario: de Berrocal a Nerva.
El ferrocarril de Riotinto empezó a construirse en 1873, cuando la Riotinto Company Limited obtuvo la concesión para explotar las minas. La obra se completó en el tiempo record de dos años. El sistema ferroviario comprendía más de 300 km. de vías, de los cuales 84 correspondían a la línea comercial. Conectaba las diferentes minas con el Muelle de Riotinto, en Huelva. También incluyó otros ramales que sirvieron para el transporte de viajeros y obreros desde las diferentes localidades de la zona. El trazado recorría el cauce sinuoso del río, contando con 8 puentes y varios túneles. Estuvo en uso hasta 1975.
El trazado se ha restaurado hace un año a partir de la Estación de los Frailes. El espacio por el que transcurre el sendero es un universo mineral, en el que la escala cromática va desde el rojo, al amarillo, al verdoso o al negro, conociendo de cerca el pasado reciente de este territorio singular.
1.-Itinerario:
--Parking: salida tren turístico Nerva. Al otro lado de la carretera hemos dejado las escombreras de Cerro Colorado. Llegamos al edificio de recepción y estación de partida del tren turístico. Funciona desde que fuera recuperado por la Fundación Riotinto. Está tirado por la locomotora de vapor nº 14, de 1875, la más antigua de España en funcionamiento. Casa de las Palancas, antiguo edificio del cambio de agujas ahora restaurado.
--Antigua fundición de cobre: los aproximadamente tres kilómetros que siguen hay que hacerlos sobre balasto (base de piedras sobre la que se sustentan los raíles de la vía). Precaución en el tramo junto a la vía del tren turístico. A un kilómetro del parking pasamos junto a las ruinas de la antigua fundición de cobre.
--Puente: la ruta pasa bajo un puente.
--La Naya: a la derecha todavía se conservan los restos de la aldea La Naya, construida en 1883, en la laderas de la Sierra del Águila, a pie de tajo, para ahorrar desplazamientos de los trabajadores, constaba de 5 calles, en ella finaliza el túnel 16 y el material extraído era después de pasar por el machaqueo transportado a Huelva en tren. Tiempo después, esta aldea fue derribada por la compañía y los trabajadores fueron reubicados en Riotinto.
--Las Cocheras: en la parte inferior derecha se encuentran unas naves, unas cocheras para locomotoras en la zona Naya. La pigmentación amarilla del terreno se debe al cianuro. Las teleras eran calcinaciones al aire libre del mineral extraído en las minas de cobre. Se supone que se lanzaban a la atmosfera unas 500 toneladas anuales de gas contaminante, que envolvía la comarca de emanaciones sulfurosas y extinguía la vegetación.
--Zarandas-Naya: la ruta llega ahora a los antiguos talleres y las instalaciones para el mantenimiento del tren turístico del complejo minero denominado Paraje de Zarandas-Naya. Pueden observarse algunas locomotoras y vagones en desuso en las vías adyacentes.
--Casa ferroviaria: a la izquierda, la vía pasa junto a los restos de una casa. A la izquierda se encuentra un carril paralelo a la vía. Es preferible seguir esta senda para evitar la incomodidad del balasto. Este camino muere en la Estación de los Frailes.
--Terrazas: la senda continúa paralela a la vía, con frecuentes visiones de los meandros del río Tinto, pasando por bosques de pinos, y más adelante entrando de lleno en la zona minera. A la izquierda, en la ribera del Tinto, se distinguen terrazas para la decantación del mineral y escolleras.
--Puente de Las Majadillas: más adelante, a seis kilómetros de la salida, el ferrocarril salva un pequeño arroyo, frontera entre Huelva y Sevilla. Hay bosques de pinos a izquierda y derecha, en contraste con la ausencia de vegetación del paisaje anterior.
--La Tirolina: poco después, se encuentran los restos de una tirolina para el transporte de mineral, con una casa aledaña.
--La Pasada de El Madroño: abajo, a la izquierda, hay un precario puente peatonal que salva el río Tinto. Este puente forma parte del sendero llamado “Ruta de los Mineros”, que lleva hasta El Madroño. La Pasada de El Madroño se encuentra a 7 kms del punto de inicio del sendero. Se trata de una pasarela de hormigón algo insegura, construida por los mineros, que cruza el rio.
--Río Tinto Oscuro: llama la atención la rojez del Tinto a partir de este tramo. Sus aguas carecen de oxígeno, no hay en ellas peces, ni anfibios, pero eso no quiere decir que no exista la vida, antes al contrario: estas aguas contienen una comunidad de miles de microorganismos únicos, que se alimentan de minerales, capaces de soportar condiciones extremas de acidez y carencia de oxígeno (por eso se denominan extremófilos). Las condiciones del río Tinto podrían ser parecidas a las que se dieran en Marte, al menos en el pasado de este planeta.
--Estación de los Frailes: la senda llega al apeadero de los Frailes, encalada, el punto hasta el que llega el actual tren turístico, que ha recuperado un trazado de 12 kilómetros para su uso recreativo. La Estación está a 3 kms de la Pasada del Madroño. En este lugar es fácil aproximarse a las aguas del río, contemplar su coloración y percibir su olor ferruginoso. Hay un merendero y un pilar abrevadero con agua aparentemente limpia. No es complicado vadear el río en esta zona, toda vez que hay un lecho muy pedregoso. Cuidado con el agua, porque además de su gran acidez, una mancha sobre nuestra ropa quedará allí para siempre.
--Camino Polivalente del Río Tinto: a partir de Los Frailes, el camino se encuentra completamente acondicionado, sin vías, con un firme de grano ligero que sustituye al balasto. Hay una enorme barandilla de madera a lo largo del trayecto para garantizar nuestra seguridad en los lomos y escolleras. La seguridad que te ofrece el terreno te permite fijar menos la vista en el suelo y más en el paisaje del Tinto. Contempla este cauce único, con una paleta de colores que va desde el rojo intenso de sus aguas hasta el amarillo de las rocas de su ribera. Un río en el que no existe vegetación de ribera, debido a la gran acidez de sus aguas, con gran contenido de sales ferruginosas.
*Landmark: a la izquierda, en lo alto del collado, fíjate en unos cipreses. Llaman la atención sobre el bosque mediterráneo circundante. Corresponden al cementerio de Berrocal, muy cerca del pueblo. Son un buen punto de referencia para saber dónde se encuentra el pueblo.
--Barranco: a 1 km de Los Frailes, a la derecha, un barranco baja de los montes con agua clara, ideal para lavar el calzado manchado del Tinto.
--Puente Cachán: a 1’6 kms de Los Frailes se encuentra el Puente Cachán, el segundo puente peatonal que salva el río Tinto desde que comenzó la senda, una pasarela peatonal de hierro, diseñada en 1875 por el ingeniero británico George Bruce. En realidad forma parte de la enorme obra de ingeniería, dirigida por el propio Bruce, que supuso la construcción del ferrocarril de las minas. Este puente es el único restaurado del viejo recorrido del tren. Un poco más adelante, llama la atención un nuevo puente rojo en la vía para salvar otro afluente del Tinto, la rivera de Cachán, que da nombre al puente peatonal.
--La Aurorita: el sendero, a partir de ahora, durante cinco kilómetros, pasa a la orilla izquierda del Tinto y abandona de forma definitiva la vía férrea. El camino pasa junto al recuerdo funerario de la Aurorita, una joven de 14 años asesinada de cinco puñaladas en ese lugar el 27 de octubre de 1897.
--Horno de cal o tejar: a unos cien metros encontramos dos indicadores: Nerva 13’3 kms / Berrocal: 4’9. Seguimos hacia Berrocal por el camino paralelo al Tinto unos 300 metros, no nos dejamos tentar por los nuevos caminos que se nos abren a la izquierda, sino que esperamos a encontrar los indicativos de senderismo que vamos a encontrar a continuación y que nos conducen directamente a la calzada romana que sube siseando por la ladera a Berrocal. Pasamos junto a las ruinas de un horno o tejar.
--Barranco de la Fuente: pasamos el curso del barranco.
--Mirador de los Riscos: el camino es ya una pronunciada cuesta hasta la cúspide. Hay un rudo empedrado. A la derecha, una pared semiderruida. Una subida de muy señor mío. Casi en la cúspide, unas rocas ofrecen una vista excepcional de la zona.
*Landmark: si no encuentras los indicativos de la calzada romana luego de haber pasado el puente de Cachán, guíate siempre por el camino imaginario que te conduce por debajo del cementerio (acuérdate de los cipreses) hasta los dos postes del tendido eléctrico que se ven en el collado, a la derecha de los cipreses.
--Berrocal: detrás de los dos postes del tendido eléctrico, la calleja se ensancha. Aparecen a nuestra vista diferentes huertas, señal inequívoca de que estamos cerca de una población. El sendero entra en Berrocal por la cruz.
Ojalá que te hayan valido estas humildes indicaciones, hechas sin profesionalidad, pero con afán de servicio. El senderismo debe ser un ejemplo de actividad solidaria, gratuita, altruista, una invitación a contactar con la naturaleza sanadora y respetarla, a tejer una red social y emocional de apoyo, a compartir experiencias y hacer amigos. Un fuerte abrazo. No olvides decirme “hasta pronto” en el camino.
2.-Ficha Técnica:
-Distancia: 15 kms.
-Tiempo: 4h 30’.
-Dificultad: moderada, zona llana (vía ferroviaria), salvo la fuerte subida de los últimos 5 kms.
-Valoración estética de la ruta: 10.
-Autorización: no
-Sombra: muy poca, no recomendada para días calurosos.
-Tipo de firme: balasto al principio, pista en buen estado y calzada romana.
-Ruta lineal (coches a ambos lados de la ruta): el coche de Ana lo dejamos en El Berrocal, y los otros dos coches los llevamos a Nerva por la carretera de El Madroño. Al regreso, Ana nos lleva a Nerva con su coche y regresamos. ¡Atención!: al llegar a El Madroño, no encuentras indicadores, pero sigue la carretera a la izquierda, y no a la derecha: evitarás una vuelta innecesaria.
-Señalización: a partir del puente Cachán, pero escasa.
-Flora: primer tramo: sin vegetación; segundo: pinar; tercero: arbustiva.
Esta ruta nos lleva de Nerva, localidad de 5.700 habitantes que debe su nombre a una placa aparecida en honor al emperador romano Nerva, a Berrocal, a lo largo del cauce del río Tinto, siguiendo el trazado del ferrocarril, para adentrarnos en el corazón de la cuenca minera y en sus instalaciones, lavaderos de mineral, escolleras, talleres. La ruta transcurre entre la vía del tren y el río Tinto hasta el Puente de Cachán, cuando abandona la vía, cruza el río y asciende de forma pronunciada hasta Berrocal. Si quieres evitarte esta subida y hacer la ruta más cómoda, hazla en sentido contrario: de Berrocal a Nerva.
El ferrocarril de Riotinto empezó a construirse en 1873, cuando la Riotinto Company Limited obtuvo la concesión para explotar las minas. La obra se completó en el tiempo record de dos años. El sistema ferroviario comprendía más de 300 km. de vías, de los cuales 84 correspondían a la línea comercial. Conectaba las diferentes minas con el Muelle de Riotinto, en Huelva. También incluyó otros ramales que sirvieron para el transporte de viajeros y obreros desde las diferentes localidades de la zona. El trazado recorría el cauce sinuoso del río, contando con 8 puentes y varios túneles. Estuvo en uso hasta 1975.
El trazado se ha restaurado hace un año a partir de la Estación de los Frailes. El espacio por el que transcurre el sendero es un universo mineral, en el que la escala cromática va desde el rojo, al amarillo, al verdoso o al negro, conociendo de cerca el pasado reciente de este territorio singular.
1.-Itinerario:
--Parking: salida tren turístico Nerva. Al otro lado de la carretera hemos dejado las escombreras de Cerro Colorado. Llegamos al edificio de recepción y estación de partida del tren turístico. Funciona desde que fuera recuperado por la Fundación Riotinto. Está tirado por la locomotora de vapor nº 14, de 1875, la más antigua de España en funcionamiento. Casa de las Palancas, antiguo edificio del cambio de agujas ahora restaurado.
--Antigua fundición de cobre: los aproximadamente tres kilómetros que siguen hay que hacerlos sobre balasto (base de piedras sobre la que se sustentan los raíles de la vía). Precaución en el tramo junto a la vía del tren turístico. A un kilómetro del parking pasamos junto a las ruinas de la antigua fundición de cobre.
--Puente: la ruta pasa bajo un puente.
--La Naya: a la derecha todavía se conservan los restos de la aldea La Naya, construida en 1883, en la laderas de la Sierra del Águila, a pie de tajo, para ahorrar desplazamientos de los trabajadores, constaba de 5 calles, en ella finaliza el túnel 16 y el material extraído era después de pasar por el machaqueo transportado a Huelva en tren. Tiempo después, esta aldea fue derribada por la compañía y los trabajadores fueron reubicados en Riotinto.
--Las Cocheras: en la parte inferior derecha se encuentran unas naves, unas cocheras para locomotoras en la zona Naya. La pigmentación amarilla del terreno se debe al cianuro. Las teleras eran calcinaciones al aire libre del mineral extraído en las minas de cobre. Se supone que se lanzaban a la atmosfera unas 500 toneladas anuales de gas contaminante, que envolvía la comarca de emanaciones sulfurosas y extinguía la vegetación.
--Zarandas-Naya: la ruta llega ahora a los antiguos talleres y las instalaciones para el mantenimiento del tren turístico del complejo minero denominado Paraje de Zarandas-Naya. Pueden observarse algunas locomotoras y vagones en desuso en las vías adyacentes.
--Casa ferroviaria: a la izquierda, la vía pasa junto a los restos de una casa. A la izquierda se encuentra un carril paralelo a la vía. Es preferible seguir esta senda para evitar la incomodidad del balasto. Este camino muere en la Estación de los Frailes.
--Terrazas: la senda continúa paralela a la vía, con frecuentes visiones de los meandros del río Tinto, pasando por bosques de pinos, y más adelante entrando de lleno en la zona minera. A la izquierda, en la ribera del Tinto, se distinguen terrazas para la decantación del mineral y escolleras.
--Puente de Las Majadillas: más adelante, a seis kilómetros de la salida, el ferrocarril salva un pequeño arroyo, frontera entre Huelva y Sevilla. Hay bosques de pinos a izquierda y derecha, en contraste con la ausencia de vegetación del paisaje anterior.
--La Tirolina: poco después, se encuentran los restos de una tirolina para el transporte de mineral, con una casa aledaña.
--La Pasada de El Madroño: abajo, a la izquierda, hay un precario puente peatonal que salva el río Tinto. Este puente forma parte del sendero llamado “Ruta de los Mineros”, que lleva hasta El Madroño. La Pasada de El Madroño se encuentra a 7 kms del punto de inicio del sendero. Se trata de una pasarela de hormigón algo insegura, construida por los mineros, que cruza el rio.
--Río Tinto Oscuro: llama la atención la rojez del Tinto a partir de este tramo. Sus aguas carecen de oxígeno, no hay en ellas peces, ni anfibios, pero eso no quiere decir que no exista la vida, antes al contrario: estas aguas contienen una comunidad de miles de microorganismos únicos, que se alimentan de minerales, capaces de soportar condiciones extremas de acidez y carencia de oxígeno (por eso se denominan extremófilos). Las condiciones del río Tinto podrían ser parecidas a las que se dieran en Marte, al menos en el pasado de este planeta.
--Estación de los Frailes: la senda llega al apeadero de los Frailes, encalada, el punto hasta el que llega el actual tren turístico, que ha recuperado un trazado de 12 kilómetros para su uso recreativo. La Estación está a 3 kms de la Pasada del Madroño. En este lugar es fácil aproximarse a las aguas del río, contemplar su coloración y percibir su olor ferruginoso. Hay un merendero y un pilar abrevadero con agua aparentemente limpia. No es complicado vadear el río en esta zona, toda vez que hay un lecho muy pedregoso. Cuidado con el agua, porque además de su gran acidez, una mancha sobre nuestra ropa quedará allí para siempre.
--Camino Polivalente del Río Tinto: a partir de Los Frailes, el camino se encuentra completamente acondicionado, sin vías, con un firme de grano ligero que sustituye al balasto. Hay una enorme barandilla de madera a lo largo del trayecto para garantizar nuestra seguridad en los lomos y escolleras. La seguridad que te ofrece el terreno te permite fijar menos la vista en el suelo y más en el paisaje del Tinto. Contempla este cauce único, con una paleta de colores que va desde el rojo intenso de sus aguas hasta el amarillo de las rocas de su ribera. Un río en el que no existe vegetación de ribera, debido a la gran acidez de sus aguas, con gran contenido de sales ferruginosas.
*Landmark: a la izquierda, en lo alto del collado, fíjate en unos cipreses. Llaman la atención sobre el bosque mediterráneo circundante. Corresponden al cementerio de Berrocal, muy cerca del pueblo. Son un buen punto de referencia para saber dónde se encuentra el pueblo.
--Barranco: a 1 km de Los Frailes, a la derecha, un barranco baja de los montes con agua clara, ideal para lavar el calzado manchado del Tinto.
--Puente Cachán: a 1’6 kms de Los Frailes se encuentra el Puente Cachán, el segundo puente peatonal que salva el río Tinto desde que comenzó la senda, una pasarela peatonal de hierro, diseñada en 1875 por el ingeniero británico George Bruce. En realidad forma parte de la enorme obra de ingeniería, dirigida por el propio Bruce, que supuso la construcción del ferrocarril de las minas. Este puente es el único restaurado del viejo recorrido del tren. Un poco más adelante, llama la atención un nuevo puente rojo en la vía para salvar otro afluente del Tinto, la rivera de Cachán, que da nombre al puente peatonal.
--La Aurorita: el sendero, a partir de ahora, durante cinco kilómetros, pasa a la orilla izquierda del Tinto y abandona de forma definitiva la vía férrea. El camino pasa junto al recuerdo funerario de la Aurorita, una joven de 14 años asesinada de cinco puñaladas en ese lugar el 27 de octubre de 1897.
--Horno de cal o tejar: a unos cien metros encontramos dos indicadores: Nerva 13’3 kms / Berrocal: 4’9. Seguimos hacia Berrocal por el camino paralelo al Tinto unos 300 metros, no nos dejamos tentar por los nuevos caminos que se nos abren a la izquierda, sino que esperamos a encontrar los indicativos de senderismo que vamos a encontrar a continuación y que nos conducen directamente a la calzada romana que sube siseando por la ladera a Berrocal. Pasamos junto a las ruinas de un horno o tejar.
--Barranco de la Fuente: pasamos el curso del barranco.
--Mirador de los Riscos: el camino es ya una pronunciada cuesta hasta la cúspide. Hay un rudo empedrado. A la derecha, una pared semiderruida. Una subida de muy señor mío. Casi en la cúspide, unas rocas ofrecen una vista excepcional de la zona.
*Landmark: si no encuentras los indicativos de la calzada romana luego de haber pasado el puente de Cachán, guíate siempre por el camino imaginario que te conduce por debajo del cementerio (acuérdate de los cipreses) hasta los dos postes del tendido eléctrico que se ven en el collado, a la derecha de los cipreses.
--Berrocal: detrás de los dos postes del tendido eléctrico, la calleja se ensancha. Aparecen a nuestra vista diferentes huertas, señal inequívoca de que estamos cerca de una población. El sendero entra en Berrocal por la cruz.
Ojalá que te hayan valido estas humildes indicaciones, hechas sin profesionalidad, pero con afán de servicio. El senderismo debe ser un ejemplo de actividad solidaria, gratuita, altruista, una invitación a contactar con la naturaleza sanadora y respetarla, a tejer una red social y emocional de apoyo, a compartir experiencias y hacer amigos. Un fuerte abrazo. No olvides decirme “hasta pronto” en el camino.
2.-Ficha Técnica:
-Distancia: 15 kms.
-Tiempo: 4h 30’.
-Dificultad: moderada, zona llana (vía ferroviaria), salvo la fuerte subida de los últimos 5 kms.
-Valoración estética de la ruta: 10.
-Autorización: no
-Sombra: muy poca, no recomendada para días calurosos.
-Tipo de firme: balasto al principio, pista en buen estado y calzada romana.
-Ruta lineal (coches a ambos lados de la ruta): el coche de Ana lo dejamos en El Berrocal, y los otros dos coches los llevamos a Nerva por la carretera de El Madroño. Al regreso, Ana nos lleva a Nerva con su coche y regresamos. ¡Atención!: al llegar a El Madroño, no encuentras indicadores, pero sigue la carretera a la izquierda, y no a la derecha: evitarás una vuelta innecesaria.
-Señalización: a partir del puente Cachán, pero escasa.
-Flora: primer tramo: sin vegetación; segundo: pinar; tercero: arbustiva.
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