De Pinos por la Nava de Alcalá

La finalidad de esta ruta es visitar unos grandiosos pinos negrales que se encuentran escondidos en el barranco que baja desde el collado de la Calzada Negra a los pies del Olmedilla.
Nos pusieron tras la pista de los pinos Pepe y su hijo Jorge de la Tienda de Dora.
Partimos de un rellano de la carretera entre la urbanización del Solano y el Puerto de San Rafael.
Empezamos junto a un pequeño barranco para buscar un vieja senda que llevaba a las ruinas de una serrería y que nos dejará en el camino que va a las Ontejas y la parte alta de la Nava.
En las Ontejas Altas dejamos el camino para tomar el inicio del barranco de las Ontejas hasta llegar a las marcas de la antigua GR 8, que seguiremos hasta las proximidades del Mas de las Ontejas Bajas.
Dejaremos el trazado viejo por una trocha a la izquierda que cruza el barranco de las Ontejas, entre dos saltos y nos deja en el trazado nuevo de la GR 8, en el camino que va por la parte baja de la Nava.
Seguimos ahora el GR en un bosque mixto de pinos silvestres y negrales.
Después de pasar el desvio al cañón del río Alcalá, el GR deja el camino por otro a la izquierda y empezamos a andar entre los cultivos a la derecha y un monte adehesado de sabinas a la izquierda.
En este tramo el camino cruza tres vaguadas que son las que forman el Regajo de la Nava junto a la Masía que vemos a la derecha.
Por estos tres barrancos se puede subir fácilmente al camino superior. Nosotros utilizaremos hoy el tercero que es donde están los pinos que buscamos.
En una curva a derechas del camino, cuando cruza una pared de piedra, lo dejamos para seguir unos prados a la izquierda que tapizan la vaguada por la que subiremos al camino superior.
Aunque hay algunos grandes pinos silvestres, vamos buscando dos pinos negrales que hemos visto en fotos que destacan sobre el resto.
Encontramos uno a la izquierda en una zona donde el barranco se ensancha junto a una pared de piedra seca.
Tras almorzar en este bonito lugar, vamos hacia una loma a la derecha para llegar al otro pino, el mas espectacular.
Este está cerca del camino superior y de una pequeña balsa donde abrevan los animales.
La vuelta la realizamos por el camino de la parte superior de la Nava que va realizando pequeños toboganes en un bosque de pinos silvestres y negrales a la sombra de las canteras de la Olmedilla, hasta llegar al barranco de las Ontejas, donde tomaremos el itinerario inicial para volver al vehículo.
Aunque hemos visitado dos grandes pinos, uno es el que habíamos visto en fotos, el otro lo encontramos casualmente. Nos falta por encontrar otro que nos mostraron, y puede que haya alguno mas en el barranco, ya que es una zona de pastos donde se dejaban algunos para hacer sombra (sesteros) o para extraer tea (tederos). Estos se libraban de las talas realizadas a lo largo de los años.