184 Dehesa de Montejo-Tosande-Pico de Las Cruces-Cervera de Pisuerga

Se inicia el recorrido en el km 2 de la carretera CL-626, a 850 m de Dehesa de Montejo, en donde hay un aparcamiento para automóviles y autobuses. Un sendero de pequeño recorrido desciende, cruza el arroyo de Valdesgares y se dirige hacia el arroyo de Tosande, cruzando por debajo de un puente la línea de ferrocarril de vía estrecha Bilbao-León.
Se alcanza el arroyo de Tosande por cuyo cauce, generalmente seco, transcurre el sendero. Se atraviesa una pequeña pradera y a continuación el sendero se enfila por un pasillo entre rocas. El camino transcurre entre robles, cuyas ramas se rodean de líquenes, musgo y otras especies vegetales.
Una vez recorridos 4,1 km el valle se abre en una amplia pradera con una pequeña caseta con tejado rojizo, con el fondo del pico de la Celada (1.560 m) y el circo que cierra el valle por el noroeste. Al sureste emerge la cima de la Horadada, según el IGN, u Oracada (1.818 m), en cuya ladera está la Tejeda de Tosande.
Se abandona el arroyo de Tosande por la pradera situada al suroeste, sin camino señalizado, pasando junto a un panel informativo de la Tejeda. Después el sendero ahora ya con postes indicativos, se interna en un bosque de hayas por una vaguada. Se ha cuidado el camino con escalones de madera y más arriba con protecciones laterales y plataformas de madera, que pueden estar resbaladizas en caso de lluvia o nieve, para evitar la erosión de la montaña y proteger la cubierta vegetal. El camino se abre paso entre las hayas y después van apareciendo ejemplares de tejos. Se alcanza una derivación, tomando en este caso el desvío hacia la derecha, realizando algunos zig-zags, pasando junto a tejos de ramas muy retorcidas. El camino llega a un tramo horizontal llegando al mirador, a 1.405 m de altitud, desde el que se divisa el Pico de las Cruces al otro lado del valle de Tosande.
Se desciende por el mismo camino hacia la pradera, situada a unos 1.200 m de altitud, cruzando el arroyo de Tosande para ascender por senderos en la otra ladera hasta un collado a 1.364 m de altitud, que me he permitido llamar Collado de Recuencos. Se sube después hacia el Este por la ladera de la montaña un desnivel de unos 80 m por una zona más factible, evitando las rocas situadas más al sur, y en la que parece haber restos de algún antiguo sendero que ascendía por la montaña. Después se sigue en horizontal en la dirección de dos pequeñas hayas aisladas que crecen en el perfil rocoso de la ladera, alcanzando una especie de collado desde el que hay que descender unos pocos metros a una pequeña vaguada. Allí se gira hacia el nordeste, ascendiendo y buscando un paso amplio entre la vegetación arbustiva a una zona ya libre de la misma. El trayecto en este tramo va cortando las curvas de nivel casi perpendicularmente. Cuando se está a punto de llegar a la cresta cimera se cruza por encima de unos arbustos.
Desde la cima se desciende por la cresta, superando el punto de acceso a la misma y siguiendo hacia el sur, hasta alcanzar un collado desde el que se ve fácil el avance, evitando los arbustos, enlazando con el trayecto de ida en la pequeña vaguada citada. Se asciende ligeramente para pasar de nuevo cerca de las dos pequeñas hayas solitarias y se va buscando la vaguada que desciende del collado de Recuencos, en la zona superior del boque de hayas. Al principio de vislumbran trazos de sendero entre las hojas de las hayas a la izquierda de la vaguada, pero después hay que estar atentos para encontrar vestigios de camino entre el tapiz de hojas, separándose más el trayecto de la vaguada y a su izquierda.
Tras salir del bosque se puede ver el Parador de Turismo de Fuentes Carrionas.
Se alcanza una pista llamado camino de las Calicatas que conduce a Ruesga. Tras cruzar el río Rivera se sigue por la carretera de Cervera de Pisuerga unos 920 m y se toma el segundo desvío a mano izquierda que conduce a Cervera.