Desde Arritxulo a Bianditz-Galtzarrieta-Gaztin Borda-Artikutza-Munagirre-Cromlech Oianleku-Arritxulo

Ruta organizada por Senderismo y Rutas de Gipuzkoa.
Comenzando desde el albergue de Arritxulo, zona limítrofe entre Gipuzkoa y Navarra, en donde el entorno invita a manchar nuestras botas de barro y realizar diferentes recorridos.
Sus Bosques, cimas, restos neoliticos merecen la pena de visitar
Tras aparcar con comodidad junto al albergue de Arritxulo nos dirigimos hacia la borda de Aritxulegi. Aquí veremos varias mesas es una opción para hacer un buen picnic.
Junto a la borda comenzaremos a ascender por pista siguiendo las marcas blancas y rojas del sendero GR.
La subida alterna tramos más llevaderos con subidas con un pendiente algo más exigente. En cualquier caso es suficientemente breve como para poder ser realizada sin mayor dificultad.
Tras superar la subida más exigente de la ruta llegaremos a un collado donde giraremos a la izquierda, abandonando las marcas GR para dirigirnos a la cima de Bianditz.
Una vez en la cima tendremos una vistas espectaculares de Donosti y del mar así como de montañas como Jaizkibel, Peñas de Aia o Larun.
Seguimos por el cordal dirección Suroeste y en unos 300 metros, llegamos a la cima del Galtzarrieta de unos 814 metros junto a su respectivo buzón, desde ahí tenemos unas vistas realmente bonitas, mires donde mires solo verás montes y más montes. En este punto comienza la bajada hasta Gaztin borda (REFUGIO LIBRE PERTENECIENTE A LESAKA). Seguimos bajando hasta llegar a la entrada de Artikutza, pero esta vez la bajada es por bosque. A modo personal, de los más bonitos que yo he visto y he transitado.
En la entrada de Artikutza, nos dirigimos a la derecha y veremos un puerta que nos llevará a una pista, la que iremos subiendo hasta llegar a la carretera la cual seguimos durante unos 150 metros, llegamos a un punto, en el que giramos a la izquierda e iremos por el Collado de Bianditz y durante 1 kilómetro y medio más o menos llegamos al Munagirre de 781 metros. Las vistas desde ahí no defraudan pero antes de llegar a esta cima, pasamos por Gogoren herriko Torrea de 772 metros y poco a poco a Munagirre.
Hacemos fotos y de ahí, hacemos un giro de casi 90 grados hacia la derecha dirección Nordeste donde iremos descendiendo entre bosques, hasta llegar a la borda de Oinaleku la que está bien cuidada y conservada y de ahí, a la joya de la ruta. El Cromlech de Oinaleku
para muchos, uno de los lugares más mágicos de Gipuzkoa. Esa energía especial que algunos aseguran reconocen sentir en este precioso rincón del parque natural de Aiako Harria, debía despertar las mismas sensaciones entre los antiguos pobladores de Gipuzkoa. De hecho, eligieron este lugar para el descanso eterno de sus seres queridos y prueba de ello son los crómlechs y túmulos que se encuentran en la zona.
Aunque siempre se habla del crómlech de Oianleku, en realidad, en este lugar se encuentran dos círculos de piedras. Uno de ellos, cuenta con un diámetro de 9,5 metros y 29 piedras o testigos que marcan la circunferencia de uno de los crómlechs mejor conservados en Euskal Herria.
El segundo monumento funerario prehistórico es algo más pequeño. 18 piedras marcan el círculo de 6,8 metros de circunferencia.
Habiendo hecho las fotos pertinentes, nos desviamos hacia la derecha hasta llegar el Collado Urmendi, y de ahí nos metemos en el camino de Oialeku durante 1,5 kilómetros. Habiendo recorrido ese tramo, nos metemos en el PR-GI 1008 que va paralelo al río Tornola. Este PR sí lo seguimos, nos llevará directamente al punto de salida pero antes de llegar a él, nos adentrará por bosque, practicaremos lo que en Japón se llama: Shinrin Yoku o baños de bosque y se han popularizado como un sistema sencillo y natural de mejorar la salud. Se trata de dar paseos largos por el bosque, sin prisas ni ruidos excesivos aunque...esto último lo dejamos pasar. Esto lo disfrutaremos durante los últimos 3 kilómetros más o menos.

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