Desde el Pazo de Sabadelle hasta Santa María de Pesqueiras

El Pazo de Sabadelle está situado en la parroquia de Sabadelle, muy cerca de Chantada (Lugo).

Se trata de un auténtico pazo construido en el siglo XIII y que perteneció durante muchas generaciones a poderosas familias hidalgas como la del obispo Varela de Temes.

Actualmente su propietario es Xosé Figueroa quien además de tener una parte del edificio destinada para alojamiento organiza varios eventos que sirven para dinamizar la cultura gallega en todos sus aspectos.

El Pazo está muy bien conservado y bien merece una visita. Pasar allí una noche es regresar en el tiempo muchos años y , además, podremos disfrutar de excelentes alimentos de primera calidad ya que se dedican a la producción agrícola y ganadera de forma tradicional y biológica.

Desde allí, siguiendo los antiguos caminos que unían poblaciones antes de construirse las carreteras nos acercamos hasta el lugar de O Outeiro en donde se encuentra la iglesia de Santa María de Pesqueiras Nova. Esta iglesia no tiene nada de especial pero muy cerca de allí podemos tomar un precioso camino, muy antiguo, que nos lleva hasta la Iglesia de Santa María de Pesqueiras, la antigua.
Este camino recibe el nombre de Camiño da Virxe encontrando al poco rato una antigua fuente llamada Fonte da Virxe.

La iglesia de Santa María de Pesqueiras es otra de las joyas arquitectónicas que tiene esta parte de Galicia llamada Ribeira Sacra precisamente por la gran cantidad de arte Románico que podemos encontrar en ella.

Esta iglesia está situada en medio de un frondoso bosque de carballos y muy cerca del Encoro de Belesar.
Era la iglesia de un convento de benedictinas que desapareció después de que las monjas fueran trasladadas a Santiago de Compostela en el año 1515. Felizmente quedó la iglesia con muchos elementos arquitectónicos románicos y pinturas en el interior.

Una posibilidad de regresar hasta Sabadelle es seguir por una pista que pasa por allí y que recorre la parte superior de viñedos socalcados aunque nosotros preferimos volver a subir por el Camiño da Virxe y recorrer unas preciosas pistas entre carballeiras y castaños.

Es una ruta muy sencilla con mucha naturaleza y con lugares muy interesantes para visitar.