Desde ZIOSO, por ERENTZIN ZABALA a TXURTXIPI (Jaizkibel)

**Hoy bonito paseo por Jaizkibel, con niebla al principio, y luego con tímidos claros, y luz perfecta, y con calorcito agradable desde media mañana.
**Hemos comenzado a caminar en suave descenso, desde Zioso, junto a la carretera GI 3440 (km 11,7), bajando por la amplia pista forestal, pasando junto a las ruinas de la txabola Artxinar, hasta Aierdi (encrucijada de caminos), donde se sitúa la rueda de molino con la inscripción “camino de Gastarrotz” y señales del Talaia bidea (rojiblancas). Llevamos hasta aquí caminando poco más de un (1) km.
**Seguimos por la pista del centro, dejando a nuestra izquierda la que va a Leuta y Gaztarrotz, y la de la derecha, que es por donde sube la GR121, y pasamos junto al cuartel abandonado y el pequeño monte Isiro. Hemos recorrido unos dos (2) km.
**Tras una subidita “un poco pendiente” llegamos a unas rocas donde se ve una construcción de sillares de piedra arenisca con la roca como techo, Erregeharpea, junto a un escondido aprisco, lugar muy bello y vistoso de Jaizkibel, para disfrutar también en las rocas y la vegetación de alrededor.
**Seguimos descendiendo por la pista hasta ver Erentzin Zabala, “playa” de casi 400 m de longitud. Vista increíble de las concreciones silíceas diagenésicas (nombre correcto según un geólogo reconocido), de diversas y variadas formas, con el ‘Guardián de las paramoudras’ en lo alto (usamos este término para entendernos; otros llaman a este lugar “playa de los fósiles”…). Paseamos por la ‘playa’ junto a la “Cueva de Mari”.
**Seguimos hacia el pequeño valle de Mintegi, con su “piscina natural” y lugar en donde vemos una gran cantidad de ejemplares de ‘Armeria Euscadiensis’, y de “zapaburus” (renacuajos) en la ‘erreka’… parece que no llega aquí el agua de mar... Tras atravesar la regata, comenzamos el ascenso por el cordal de Martitxe, Y en Erentzin Txiki (donde nos detenemos un buen rato), y en la punta Biosnar, muchas más armerias, incluidas unas cuantas albinas (de un color blanco impactante), en rincones casi imposibles; explosión de belleza en flores, formas de rocas y paisaje.
** Las rocas que llamamos ‘Altamira’ tienen colores y ‘dibujos’ de formas abstractas, que nos recuerdan a la cueva cántabra. Vemos la cascada de Sisurko, y bajamos para ver el reloj de sol grabado en una gran roca.
**Seguimos hasta Txurtxipi, regata y pequeño valle, y pasamos cerca del importante yacimiento J 3, donde se encontraron en 2003, restos óseos de un varón de 30-40 años, enterrado en posición fetal (en decúbito lateral) en un conchero (que ha neutralizado la acidez del suelo y ha hecho que estos huesos hayan llegado hasta hoy día), datado hace más de 8.000 años. El esqueleto fue expuesto en Hondarribia (Arma Plaza) en 2018, y en Donosti, San Telmo Museoa (exposición 'Heriotza)' en 2019.
**Continuamos, tras atravesarlo, por la margen derecha del riachuelo, que trae agua todo el año, para comenzar el regreso, por donde vemos lirios acuáticos amarillos (‘Limniris pseudacorus’, ‘ezpataina’ o ‘liri-gorria’), por un ancho y cómodo camino a través del bosque, donde nos llama la atención el vistoso azul de las ‘Aquilegia vulgaris’, y robles americanos entre otros árboles, y por desgracia, ejemplares de la invasora ‘Phytolaca americana’. Y ya en continuo y suave ascenso, llegamos a la carretera GI 3440, y tras caminar un último km, llegamos de nuevo al aparcamiento de Zioso.
**Recorrido cómodo y bien bonito, con la agradable compañía de Enrique (el guía), Jose Luis y Fernando, todos participantes en el Taller +55 de Sensibilización Medioambiental, y “fotógrafos”, hoy durante 12 km y algo más de 400 m de desnivel acumulado.