Desfiladero del río Purón

Aprovechamos que visitamos la zona de Las Merindades para hacer una pequeña ruta. Nos acercamos al pueblo de Herrán para disfrutar del mismo. Dejamos el coche en el aparcamiento que hay a las afueras. No era nuestra intención hacer una ruta senderista, pero una familia que nos encontramos en el parking nos comentó que el Desfiladero del Río Purón merecía la pena. Así que nos venció el gusanillo y decidimos adentrarnos en aquel, aunque no teníamos tiempo para hacer la ruta completa (unos once kilómetros). 

Como digo, salimos del aparcamiento que hay a las afueras y tomamos dirección este. El camino llega hasta el desvío a la derecha que nos llevará hasta el desfiladero por el Camino de Herrán. Justo en la curva, nos encontramos con un molino de agua. El camino discurre al lado del río. Un poco más adelante nos encontramos con un área recreativa. Pasamos por una curva y nos topamos con las ruinas de la Ermita de San Felices. 

Seguimos andando por el camino. Si miramos hacia atrás, podemos disfrutar de las vistas. La pista va ascendiendo poco a poco y el río cada vez está más abajo. Sin embargo, descendemos poco a poco hasta que, en la siguiente curva, nos encontramos con una caída de agua. Seguimos andando y el lugar cada vez nos gusta más. Hay zonas en las que el río pasa por debajo del camino, con hermosas pozas. Llegamos a una verja y es justo en ese momento en el que decidimos iniciar el regreso. Nos hubiera gustado seguir más allá pero no teníamos más tiempo. La vuelta, la realizamos por el mismo camino por el que hemos venido. A la vuelta nos adentramos en el pueblo.

Época recomendada: primavera, verano, otoño e invierno.