Desierto de Gorafe (Ruta de Los Miradores)

Ruta circular desde Mirador Gorafe pasando por:
- Mirador Geoparque (1.5 km)
- Cuevas de la Meseta (7.3 km)
- Mirador al Desierto del lomo de la Minilla (8.2 km)
- Mirador de Los Coloraos (10.4 km)
- Mirador Los Coloraos (12.1 km)
- Loma de los Pinos (17.0 km)

Cómo llegar al inicio de ruta:

La forma más fácil de acceder a este entorno es desde la autovía A-92 entre Guadix y Baza por la carretera GR-6100 hasta llegar al parque Megalítico de Gorafe en el llano de los Olivares. Visitamos algunos dólmenes, porque esto requiere otra visita para ver la mayor concentración de dólmenes de Europa.

Este entorno, bien merece un fin de semana o varios días seguidos de estancia en la zona, por lo que, para quien quiera ver más, los mejores dólmenes de esta comarca, están muy cerca, bajando por la carretera hacia el barranco de Gor, nos encontraremos con un aparcamiento, muy cercano a las denominadas “Hoyas de Conquín”. Hay dos pistas. Se puede hacer en coche tanto hacia arriba como hacia abajo. Iremos encontrando con más dólmenes a lo largo de las pistas.


Unas pinceladas sobre el Paraje de Los Coloraos del Desierto de Gorafe y su parque megalítico.
Al norte de la provincia de Granada, las comarcas de Guadix y Baza, están dominadas por un territorio semidesértico (4.722 km2) a medio camino entre Sierra Nevada al Sur y Cazorla al Norte y la más cercana Sierra de Baza al Sureste. Tras decenas de millones de años sumergido bajo el agua, esta llanura de arcillas y margas afloró formando una gran depresión esculpida en forma de farallones rocosos, gargantas, cañones fluviales, crestas y cárcavas entre miles de formas y tres colores: ocre, grisáceo y colorao. En otras palabras, una apología a la erosión que ya tardaba en tener este distintivo: geoparque. Distintas instituciones como la Diputación de Granada, asociaciones municipales y universidades lucharón por poner en valor tan peculiar paraje, hasta que en el año 2020, consiguieron que pasara a formar parte de la Red Mundial de Geoparques de la UNESCO. El desierto de Gorafe es el corazón inerte de este páramo o un lugar ideal para desaparecer en uno de los rincones más desconocidos de Andalucía.

Granada es una provincia única, en la que se puede disfrutar de la nieve en Sierra Nevada, nuestra joya medioambiental, pero también contemplar uno de los desiertos más singulares del mundo, el de Los Coloraos de Gorafe. Una zona de barrancos y cárcavas de formas espectaculares que conforman uno de los tesoros del Geoparque de Granada. Los 'badlands' (tierras malas) son tierras arcillosas erosionadas por el agua y el viento a lo largo de millones de años, testimonio del gran lago interior que existió en la depresión de Guadix-Baza. Estados Unidos exportó al mundo su Cañón de Colorado. Pero Granada bien puede presumir del “Cañón de Los Coloraos de Gorafe”, que no le tienen nada que envidiar en belleza y espectacularidad paisajística. En lo único que es menor es en kilómetros cuadrados, `pero aún así este impresionante conjunto de cárcavas y barrancos, que es sin lugar a dudas, el mayor de España de sus características, alcanza hasta donde abarca nuestra vista, llegando hasta las inmediaciones del omnipresente cerro del Jabalcón con el embalse del Negratín a sus pies , en dirección Este, y el cerro Mencal Menor al Oeste, alzándose ambos, como islotes del altiplano granadino, como principales hitos orográficos relativamente cercanos. Y ya, más en la distancia: Sierra Nevada al Sur, la Sierra de Baza al Sureste: La inconfundible pirámide de la Sagra, con Castril y la sierra de Segura al nordeste; Cazorla al Norte, y Sierra Mágina al Noroeste.

Pero ni esto es “la Capadocia de Granada”, ni “el Cañón del Colorado de Andalucía”, aunque el símil no sea exagerado por sus dimensiones, características y curiosidades. Este es uno de los mayores desiertos de España. El de incontables cárcavas y badlands (que aunque literalmente se traduzcas como malas tierras, sería más correcto la traducción libre de “tierras baldías”) que estrujan una y otra vez el altiplano granadino para dejar a su paso un territorio odiado por agricultores y adorado por aventureros. Los mayores de la zona siempre solían decir: "Eso es un secarral donde no hay ná". Aquí no hay casas, tan solo cuevas; no hay ríos, solo ramblas, ni tampoco carreteras, solo veredas de esparteros o pistas terrizas y mucho menos sets de rodaje como en el desierto de Tabernas, si bien, de haber sabido de su existencia el mítico Director de Cine Sergio Leone, habría rodado aquí muchas escenas de algunos de sus míticos Spaghetti Western, como “Por un puñado de Dolares”, “La muerte tenía un Precio” o “El Bueno, el Feo y el Malo”. Lo que sí se ha rodado en el desierto de Gorafe es un capítulo de la popular serie de NETFLIX: “Black Mirror”, para la que la compañía “Guardian Glass” construyó una “casa totalmente de cristal”, que han bautizado como "La Casa del Desierto", aunque popularmente se la conoce como “Casa de Cristal”, perdido en medio de este páramo, donde no faltan huéspedes, que pagan 250€ la noche para dos personas. Esta curiosa casa, totalmente de cristal, es uno de los hitos que podemos ver al inicio y final de nuestra ruta.

Sobre el parque megalítico de Gorafe (dividido en varios sectores):
Antes de iniciar la ruta, al llegar inmersos en una niebla parecida a la de la mañana anterior, hicimos un alto al comienzo del camino de aproximación al inicio de ruta, para visitar uno de los conjuntos de dolmenes que forman parte de Parque Megalítico de Gorafe. De hecho Gorafe alberga una de las mayores concentraciones de megalitismo de Europa, con 240 ejemplares repartidos en diez necrópolis de diferentes tribus asentadas hace 6.000 años. Le han valido su reconocimiento como “Parque Megalítico”, todo ello complementados con elaborados paneles informativos muy didácticos.

A lo largo de nuestra ruta, también nos vamos encontrando con numerosos paneles informativos recientemente instalados en muchos de sus miradores naturales, que nos hablan principalmente de su geología y su austera flora (sobre todo espartales y retamas).

Unas breves pinceladas de nuestro itinerario:
Como casi la totalidad de sus 24 km son por pista terriza, mejor “zapatillas deportivas” que botas. Y si podemosescoger, mejor bicicleta que andando, para ganarle horas al día y ampliar nuestra visita a la cercana localidad de Gorafe y al conjunto completo de los dólmenes.

El inicio y final del recorrido se encuentra en las ruinas del cortijo de Manuel García, junto al cual podemos aparcar, y antes de iniciar la caminata asomarnos al borde del gran barranco que tenemos a nuestra izquierda, se trata del Barranco de Gor, al fondo del cual podemos contemplar la localidad de Gorafe, posible punto de partida en una futura ocasión oara conocer esta pequeña población de 383 habitantes y sus 485 cuevas. Que ubicado en el fondo del cañón, queda protegido, al abrigo de los vientos que sacuden este altiplano situado a mil metros de altitud, salpicado por almendros y dólmenes. Aunque curiosamente el camino que nos ha traído hasta aquí se le conocía antaño, como “Camino del llano de los Olivares”.

Uno de los primeros hitos de nuestro recorrido es el mirador de Don Diego. Este enclave es ideal para echar el último vistazo a la orografía del desierto y apreciar el contraste de aridez de la vegetación de la cara sur de las laderas frente a la norte.

El gris se mezcla ahora con el color rojizo, mientras el PR- A 426, que en la mayor parte de sus 24 km discurre por una pista terriza, nos guía hacia el mirador de Los Coloraos, la estrella geológica del lugar. Ante nosotros se conforma un cúmulo de montículos escarlata y laderas sinuosas ricas en mineral de hierro. El efecto del agua y la erosión se han dado un deleite aquí y una opción para apreciarlo es bajarse del vehículo y explorar sus cavidades, sus galerías y torrentes secos. Esperar aquí el atardecer y su sinfonía multicolor sobre las lomas tampoco es mal plan.

La parte más sobresaliente de esta ruta está en las vistas hacia el barranco del Caballo, donde están los “Coloraos”, imponentes farallones a modo de tubos de un gran órgano multicolor formado por los estratos de los sedimentos, primero marinos, cuando esta zona fue un mar interior y luego un gran lago. Predominan los colores rojos y ocres porque las tierras de las montañas circundantes tenían ese color.

La rambla de Los Anchurones es el punto más bajo de este peculiar itinerario en forma de “V”, y se encuentra al fondo del barranco que lleva su mismo nombre. Es esta la mayor avenida que comunica el desierto de norte a sur.
Aquí podemos disfrutar del fenómeno conocido en geología como “Piping”, del inglés Pipe = tubo. El agua de la escorrentía forma cascadas en rocas duras como las calizas, pero en este caso disuelve fácilmente la arcilla y arenisca verticalmente formando unos tubos. De manera que en distintos puntos del recorrido, podremos disfrutar de estos gigantescos “tubos”, que los podremos ver más de cerca, durante nuestro tránsito por la rambla de los Anchurones.

Al igual que el camino de retorno, cuando vayamos caminando sobre la loma de los Pinos mirando a nuestra izquierda en el barranco del Pollo, con vistas hacia el Jabalcón y el embalse del Negratín. Los colores cambian de una zona a otra. Por ejemplo, en el barranco del Pollo desaparece el ocre y aparece el gris como lo hacen las chimeneas de hadas en las paredes de sus enormes grietas. El viento deja el terreno seco, pero dicen los vecinos de Gorafe, que cuando llueve "esto da miedo", concretamente cuando "el agua circula a toda velocidad por las ramblas y los cañones entre un ruido de estruendo", donde hay que gritarse entre dos personas que estén relativamente cerca, para hacerse oir. También llama la atención el cerro Banderas, que recibe su nombre por las franjas de diferentes colores que luce, debido a la alternancia de margas, gredas, arcillas y cantos rodados… además de grietas, a modo de grandes cicatrices sedimentarias acumuladas en capas, donde se encuentra una falla inactiva.

Y entre formidables paisajes de cárcavas y barranqueras a ambos lados, pues durante gran parte del itinerario vamos caminando sobre divisorias de aguas y la parte superior de las lomas, que nos brindan magníficas vistas del entorno, vamos completando un itinerario que en lo que a belleza y peculiaridad geológica, debería estar catalogado como uno de los más genuinos y peculiares de toda España. Tan pobre en tierras fértiles, como hermoso en su agreste y desértica belleza.


Otros tracks de interés por la zona:

Gorafe - Ruta de los dólmenes I Majadillas
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=22204873

Gorafe - Ruta de los dólmenes II Hoyas de Conquín
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=3976311

Ruta Llano de Olivares (Gorafe)
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4407950


ACTUALIZACIÓN
En el año 2020 la Federación Andaluza de Montañismo ha homologado un sendero etiquetado como PR-A 426, cuyo folleto os podéis descargar en este enlace.

http://www.fedamon.com/senderos/prs/granada/PRA426/PR-A%20426%20Desierto%20de%20Gorafe_01v2.jpg

TRACK DEL PR-A 426
http://www.fedamon.com/senderos/prs/granada/PRA426/pr-a%20426%20RUTA%20DEL%20DESIERTO%20DE%20GORAFE.rar