Deusto –Artxanda (por Buenavista) – Bagatza bidea – Enekone bidea – Monte Banderas y vuelta por Berriz y Arangoiti

Salimos de La calle Luis Power de Deusto para llegar a la iglesia de San Pedro, frente a la cual se encuentra una estela con el escudo de la anteiglesia de Deusto, que estaba situada en el antiguo ayuntamiento hasta su anexión a Bilbao en el año 1925. Hay un panel informativo.

Seguimos por el lateral derecho de la iglesia para cruzar Ramón y Cajal y seguir unos metros de frente pasando bajo las antiguas vías del tren de Las Arenas. Giramos de inmediato a la derecha para iniciar las duras cuestas en zigzag que suben a las distintas casas del barrio de Buenavista. Una vez terminadas las zigzagueares rampas subimos unas escaleras y al terminar, giramos a la izquierda por un callejón entre dos casas y aterrizamos en la carretera que sube a Berriz. Tras unos dos o trescientos metros hacia arriba giramos bruscamente a la derecha y a los pocos metros nos desviamos a la izquierda por unas escaleras estrechas, antiguas y muy poco frecuentadas, a juzgar por lo poco pisadas que están.

Las escaleras terminan y seguimos a la derecha por un sendero encajonado entre vallas y setos que limitan huertas a ambos lados, y que tras un rato de ascenso desemboca en un camino más amplio que parece provenir de las casas más altas de Arangoiti. Justo enfrente parte otro sendero que cogemos y que tras unos metros llega al camino que viene desde el depósito cilíndrico de aguas de Arangoiti, y que tras dar un rodeo llega hasta Berriz. Este tramo ya es un viejo conocido por nosotros, y solamente tenemos que seguirlo un poco a la derecha hasta llegar a un cruce por el que nos desviamos a la izquierda para llegar hasta Berriz por pista cementada. Nos llama la atención que en este cruce han alambrado un terreno a la derecha para pasto de un grupo de ovejas, no más de diez o doce, pero con unos singulares guardianes, tres enormes mastines. Como para robar una ovejita.

Llegamos a Berriz a la altura del hotel Artetxe y frente al Txakolí–Asador Berriz. Giramos a la derecha por el nuevo andadero, hasta que en un par de cientos de metros cruzamos la carretera de Santa Marina por el paso de cebra, para desviarnos a la izquierda por camino Bagatza, carreterita por la que hemos bajado en múltiples ocasiones. Aquí abandonamos Bilbao para entrar en el municipio de Sondika. La carretera apenas tiene tráfico y por ella bajamos durante un rato, tras pasar sobre la autovía N–637 o corredor del Txorierri y llegar al barrio de Sangroniz. Lo curioso es que al lado mismo de la carreterita, bajo unos árboles, hemos encontrado unas cuantas setas: "Macrolepiota Procera", también llamadas Galampernas. Estos últimos días de sol y altas temperaturas, tras bastantes días de lluvias y frío, han hecho explotar la naturaleza, viéndose ya una primavera adelantada.

Llegamos a una placita redonda con una fuente y rodeada de plátanos, siguiendo desde ella a la izquierda por Enekone bidea. Al poco volvemos a pasar por otro puente sobre la autovía del corredor del Txorierri, para enseguida llegar a un cruce clave de la ruta de hoy.

En efecto, la carretera sigue en el cruce a la derecha, por la que podemos llegar con absoluta tranquilidad hasta la ermita de San Bernabé y seguir la ruta desde allí. Y lo decimos claramente: si alguien desea seguir este track por donde nosotros hemos ido le recomendamos encarecidamente que desista y siga tranquilamente por la carretera, porque por donde hemos ido nosotros no se puede recomendar que vaya nadie. Así de claro. Para ello solamente tenemos que seguir en el cruce por la derecha, hasta llegar en unos cientos de metros a otro cruce en el que esta vez vamos a la izquierda. Una vez en Fano bidea, seguimos por ella hasta unas casas, donde giramos a la izquierda, y tras una pequeña subida, llegamos a la ermita de San Bernabé que quedará a nuestra izquierda. Una vez llegados a la altura de la ermita seguimos un poco hacia delante y la rodeamos hasta llegar a un camino que sale hacia la izquierda y que tenemos que seguir. El camino pronto se convierte en un sendero visible que tras dejar a la izquierda la verja de entrada de unos pastos y sin desvío alguno, va rodeando el monte San Bernabé, confluyendo más tarde con la senda que hemos seguido nosotros hoy y que andando siempre hacia la derecha acaba por llegar a la carretera de Santa Marina.

Pero volvamos al cruce de Enekone. Recordábamos que había un sendero que desde la ermita bajaba hasta este cruce. Hoy Edu y yo hemos querido rememorar la ruta de hace unos años y seguir por el citado sendero, pero al revés. Sin embargo nuestro objetivo se ha visto imposibilitado, porque recorridos unos metros del camino desde el cruce siguiendo de frente hemos encontrado dos grandes puertas metálicas que lo cierran con un cartel bien visible: "finca particular, prohibido el paso". Ambas puertas bien cerradas con cadenas y candados.

Nuestro gozo en un pozo, ya que en el mapa de wikiloc se ve perfectamente la senda por la que hace dos o tres años años bajamos, es decir, que la senda existe, pero el ganadero la ha cortado (ver "Ruta 41 Bilbao. Ruta por el Txoriherri desde la ermita San Bernabé hasta el hotel Artxanda, bajando por el parque Etxebarria"). Sin embargo, vemos que al lado de las puertas sigue un sendero que parece dar un rodeo y que quizá enlace (eso pensamos) con la senda que nosotros conocíamos. Y sí que enlazaremos, pero tras liarnos un poco. Tras un rato de internamiento por el bosque seguimos una sendita que se ve poco pero se puede seguir, y que mas tarde solo se intuye entre el seco helechal, parece más bien trazada por el paso de jabalíes. Tras darnos cuenta que no seguíamos senda lógica alguna hemos intentado cortar por lo sano y hemos seguido a derecho en la dirección por donde pensamos debiera estar el sendero original, yendo por zonas tremendamente sucias llenas de helechos secos, zarzas y matojos. Los pinchazos han sido numerosos.

Por fin, llegamos a dar con un sendero y, efectivamente, era el sendero que conocíamos. Ya solo hemos tenido que seguirlo hacia la izquierda para dar con el que procede de la ermita de San Bernabé. Al cabo de un rato de senda clara y herbosa accedemos a la carretera de Santa Marina. Una vez en ella seguimos unas decenas de metros hacia la izquierda para cruzarla y meternos hacia la derecha al lado de una señal de tráfico, abandonando la carretera para subir por la ladera norte al monte Banderas por un bonito sendero, casi tapado por las yerbas laterales pero que se ve bien.

Tras subir por la ladera, el sendero llega hasta una encina y accediendo a la cresta del Banderas, desde la que se ve una amplia panorámica con el barrio de San Ignacio a nuestros pies. No hay mas que seguir el sendero y dar la vuelta al muro y la alambrada que separan las visibles antenas del monte Banderas para acceder a la pista de servicio de sus instalaciones y girar a la derecha en dirección a Berriz, la zona de restaurantes por donde antes hemos pasado. Pasamos ante una fuente situada justo donde llega la pasarela de madera recientemente instalada que sube desde Enekuri. Pasamos también al lado del polígono de tiro olímpico, soportando los ruidos de los tiros, y llegamos a Berriz.

Unos decenas de metros antes de llegar a la carretera de Santa Marina nos desviamos a la derecha con la intención de bajar al barrio de Arangoiti por las escaleras y el mirador, por las que tantas veces hemos subido. Paramos en una mesa a beber algo y comer un poco de fruta, para seguir de inmediato hacia Arangoiti. Tras pasar por el mirador y seguir escaleras abajo llegamos al gran depósito de agua de Arangoiti y un poco mas abajo a la entrada del Centro de Salud. Pasamos al lado de otro depósito del Consorcio de Aguas aún más grande, donde giramos a la izquierda por la calle Araneko, y a unas decenas de metros giramos de nuevo a la derecha para bajar por el camino zigzagueante hacia Deusto y que inauguraron hace unos pocos años.

Una vez abajo, giramos a la izquierda para a pocos metros desviarnos por un tramo de escaleras que dan a la trasera de la iglesia de San Pedro, por la que hemos pasado esta mañana. Ya solo tenemos que llegar a la plaza homónima y tras cruzar la calle Lehendakari Agirre, seguir hasta la calle Luis Power, desde la que hemos salido hace un rato.

Se trata de una agradable excursión si exceptuamos el tramo de helechos secos y zarzas, por lo que repetimos que si el personal sigue este track, en el cruce de Enekone bidea siga por la carretera hasta la ermita San Bernabé y después siga por la visible senda que rodea por detrás el monte homónimo, hasta llegar a la carretera de Santa Marina. El resto ya lo sabemos.