DOLMEN DEL GIGANTE Y SUBIDA A LOS PICOS DEL LAGARÍN Y LAS GRAJAS - EL GASTOR

Preciosa y exigente ruta que se adentra en la Sierra del Gastor y que por momentos se interna en la provincia de Sevilla y que nos conducirá desde los Algarrobales, a las dos moles calizas que podemos divisar nada más abandonar la carretera Algodonales-Ronda, en la segunda entrada hacia el Gastor: Los tajos del Lagarín/Algarín y el de las Grajas ( 1066 y 1046 metros de altura respectivamente).
Visitaremos unos restos arqueológicos de la Edad de Bronce, casi al principio, el Dolmen del Gigante/de la Giganta/de la Encina/ del Charcón/o del Gastor: singular dolmen en galería de unos 12 metros de profundidad por no más de un metro de alto muy parecido a los encontrados en el yacimiento bretón de Carnac, en Francia, que no deja de ser un monumento funerario de los antiguos pobladores de la zona.
A los pies del Dolmen, junto a una inmensa encina, comienza una fuerte subida por una senda muy marcada, que va siendo cruzada en perpendicular por hasta 4 senderos más, que parten de diferentes puntos y diferentes alturas de la misma Sierra del Gastor y que pienso, son fruto de un plan del Ayuntamiento para atraer senderistas a la zona y en definitiva para activar el turismo.
Siempre con la vista de las dos cimas gemelas a la vista, decidimos acometer primero el Tajo de las Grajas y tomamos un desvío hacia la izquierda. Dejamos el primer saltadero a nuestra derecha y continuamos la senda que poco a poco va ganando altura y nos lleva hasta unas impresionantes vistas del Pantano de Zahara y de las vecinas sierras del Pinar (con el Reloj, el Simancón y el San Miguel entre otros, claramente diferenciables y de Margarita; además de lugares y pueblos colindantes como las Alcubrías altas, el arroyo del Baño, la Donaira, la sierra Malabar, el Valle del Guadalporcún o el Peñón de Zaframagón y muy a lo lejos podemos intuir perfectamente el Peñón de los Enamorados y el Torrecilla en la Sierra de las Nieves. También Algodonales, Olvera, Montecorto, El Gastor, Zahara, Arcos y Bornos.
Desandamos el camino hasta el waipoint llamado "antecima del Lagarín" y por un marcadísimo sendero nos dirigimos ahora hacia la mayor de las dos montañas. Desde su cima, esta sí, citada con un vértice geodésico, tenemos una similar vista que en la anterior (quizás algo menos impresionante).
Volveremos a desandar nuestro camino unos cientos de metros desde la cima del Lagarín y justo antes de cruzar de nuevo la angarilla que da entrada al último tramo de la subida PERO SIN LLEGAR A CRUZARLA, comenzaremos una fuerte bajada en pendiente, que se irá haciendo paulatinamente más cómoda y que nos conducirá, sin pérdida y entre un denso bosque de encinas, pinos y algunos quejigos hasta el lugar en el comenzamos el camino.
POR CIERTO: en el último tramo de subida al Lagarín, encontré una gafas graduadas junto a una correa de un perro. Si nadie, sin permiso, las ha cambiado de sitio, deben estar sobre el vértice geodésico del mimo tajo.