El encanto de los bosques de Manzanera

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Dejaremos el coche y buscamos el río Manzanera para prepararnos a cruzarlo por un tablón de madera.

Tablón de madera.

Cruzamos el río.

Río Manzanera.

Las transparentes y cristalinas aguas de río Manzanera, que dejaremos un poco más adelante para adentrarnos en el barranco Cocioles.

Paisaje.

El lugar en sí es fantástico.

Caminar por encima de las piedras te abre los sentidos.

Foto

A partir de aquí la vegetación se va haciéndose más frondosa.

Panel informativo.

Waypoint

Balsa antigua de riego.

Zona de relax.

Aquí termina el final de la ruta y enlazaremos con la circular que nos llevará al inicio.

Entramos al estrecho barranco Cocioles.

Pasamanos en la roca.

Con la ayuda de un pasamanos de cuerda, salvaremos los primeros borbotones de agua del Barranco Cocioles.

Paso equipado.

A partir de aquí el camino se hace más llevadero, se puede salvar el paso estrecho sin dificultad.

Panorámica.

Vamos progresando por el interior del barranco sin ninguna dificultad, el camino es excelente y bien marcado.

Paisaje.

Detalle del camino a seguir y la preciosidad del entorno.

Bosque.

Estamos a punto de entrar en un frondoso bosque de pinar, donde tenemos que guardar silencio y prestar atención a todo lo que el bosque nos enseña.

Gran pinar.

En este punto, a nuestra derecha, nos sale un camino ancho que de seguirlo nos dejaría en el que luego por los altos nos llevaría al coche. Aconsejo tomar el de la izquierda, para conocer un poco más el estrecho barranco Cocioles, fácil y más aventurero.

Bosque

Espectacular rincón para retomar fuerzas y si guardamos silencio escucharemos el canto de las oropéndolas y jilgueros.

Bosque.

Ahora el camino continua en ascenso para salvar el estrecho barranco. Nada complicado pero merece la pena.

Panorámica.

El camino continua en ascenso y nos muestra la gran mole petrea que en vuelve al Cocioles.

Cruce de caminos.

Aquí tenemos que prestar atención para no pasar de largo. La foto está hecha desde el punto en que detrás de la cámara se encuentra un hito de piedras señalando el camino a seguir. Si tomáramos el de enfrente nos llevaría siempre en ascenso a la cabecera del Barranco Cocioles, para su descenso en cuerdas.

Hito de piedras. Via de escape.

Abandonamos la salida del barranco por un camino bien marcado.

Camino ancho.

Nuestro camino enlaza con éste más ancho. Ahora sólo es seguir recto y en bajada, sin tomar ningún desvío. La pista desemboca en otra más ancha que nos sale a la izquierda y en descenso dejándonos en el punto de inicio.

Waypoint