El Hoyo de Pinares: por su Dehesa Boyal

El objetivo de esta marcha no es tanto ofrecer un recorrido interesante (que los hay mucho mejores, como luego propondremos) cuanto ensalzar —reivindicar, se dice hoy— los encantos de La Dehesa Boyal de El Hoyo de Pinares.

El diligente Ayuntamiento de El Hoyo de Pinares ha señalizado profusamente nada menos que 12 rutas de senderismo con nombres muy atractivos (las tienes en www.elhoyodepinares.es/?q=ruta1 pero sin tracks). Dos de ellas (las de la Mina Ceferina y Los Molinos) la bordean pero ninguna se interna en ella. La que nosotros proponemos aquí (que no es exactamente la que hemos hecho) se construiría de la siguiente manera:

1) Cargaríamos en nuestro GPS las rutas de Cesargonzalez con id=16684535 y esta nuestra (para evitar nuestros errores).

2) Partiendo del área recreativa El Fresno, enlazaríamos con la ruta de Cesargonzalez bajo la presa, sustrayéndole así 2,2 km de ida y 1,5 km de vuelta. Seguiríamos su ruta fielmente (sin hacer el desvío de ida y vuelta al refugio del río La Mujer, nuestro hito 5) siguiendo las marcas rojas. (Nuestro trayecto 3-11 no vale la pena.)

3) Sí haríamos, como Cesargonzalez, el trayecto de ida y vuelta al pico de Matavieja, que ofrece vistas atractivas (nuestro waypoint 12).

4) De regreso a la ruta principal, donde Cesargonzalez pone el hito “Pino Seta” nos internaríamos —nos sumergiríamos, más bien— en la Dehesa Boyal y erraríamos por ella más rato que el que muestra nuestro ruta entre los hitos 13A y 14. Es un bosque tenue, animado por espíritus benéficos. (Prescindimos de la mina Ceferina, que es un feo agujero afeando una ladera sin gracia.)

5) Dependiendo del ejercicio que quisiéramos hacer, desde el hito 14 subiríamos al vértice geodésico de La Llanada (hito 15) o iríamos directamente a salir por la portilla del hito 16. La subida a La Llanada es suave, agradable y ofrece vistas atractivas por el camino, pero no en el propio vértice, rodeado de pinos. La bajada es más empinada pero también, fácil.

6) Desde el hito 16 se puede regresar por el camino de señales verdes (como Cesargonzález y nosotros) o por el de rojas. El primero es más largo pero ofrece encantadores rincones del río Becedas.

Las fotos adjuntas y sus comentarios podrán darte idea del contenido de la marcha.