El Lucero, desde Játar

Recorrido realizado el 08/12/16


La Sierra de la Almijara, es una joya y el gran diamante de Granada, a la vez que desconocida por muchos, o muchísimos de su gran belleza.

Sus profundos barrancos, cortados y crestas afiladas se asemejan a los Picos de Europa, sin obviar la gran vegetación que ahoga sus valles.

De sus Cimas más características, resalta el Raspón de Los MOriscos o Pico Lucero, siendo este el más emblemático de toda esta cuerda. Son miles de montañeros los que ascienden a su Cima, desde la cual, las panorámicas que contemplamos desde la cúspide de esta Atalaya piramidal, son ¡¡¡¡¡INENARRABLES!!!!!.

Desde el Polígono de Los Enebrales de Jatar, damos inicio a una jornada memorable, de las que no se olvidan.

A primera hora, por el Sendero Micologico, Jatar Puerto de Competa comenzamos a caminar en ascenso en dirección a la antigua Venta de López. Las Panorámicas tanto al norte como al sur, son encantadoras.

Al llegar a la Venta de López, te imaginas lo que fue...una venta de obligado paso con una actividad constante de arrieros, y acémilas tanto de los pueblos de la axarquía malagueña a Granada, como de Granada a la Costa malagueña. Contrabandistas, extraperlistas, pastores se entrecruzaban día tras día.

Abandonamos Venta de López siguiendo por el sendero en descenso hacia el Arroyo, previo al encuentro del Río Añales.

Tras cruzar este, el sendero se interna por el espeso bosque de pinar que cubre toda la Loma de Las Vacas. Este tramo discurre por la cara norte, siendo la parte más umbría del recorrido, donde la humedad es patente y notoria dando al lugar un encanto mágico.

Al coronar Loma de Las Vacas, observamos al frente el Cerro de Los Frailes y en su falda la Cantera del Macho. Dicha Cantera lleva muchos años sin actividad, pero aún quedan los grandes bloques de Mármol en su estado original. Desde la cuerda de la Loma bajamos al carril inferior que accede a la Cantera y coronar en el Puerto de Competa. Desde aquí, observaremos un parte de la Axarquía Malagueña.

Desandamos el camino para dirigirnos al inicio del Sendero Raspón de Los MOriscos, el cual de forma suave nos conduce al Collado de La Perdiz, previo paso por el Collado Tropezones en primer lugar y Collado Lucerillo, desde el cual ante nosotros se presenta la Cumbre más Alpina y agreste de estas montañas: Raspón de Los MOriscos, o Lucero. En primer lugar a nuestra derecha tenemos el Cerro de la Venta de Panaderos, por cuya base el Sendero se aproxima a su parte más escarpada y agreste.

El tramo final, es un constante ascenso en zigzag que va de Norte a Sur, siendo los Vértices Sur los más aereos y expuestos, desde los cuales las panorámicas que vamos disfrutando conforme ascendemos son ¡¡¡¡ESPECTACULARES, ASOMBROSAS, IMPACTANTES!!!! de los más asombroso de ver. La Costa Malagueña, los profundos e inaccesibles Barrancos del Río Higuerón cubiertos de una vastísima vegetación son imagenes difícil de olvidar.

Conforme subimos el sendero prácticamente tallado en la roca hasta la Cumbre dejamos el Collado de la Perdiz, Collado de los Civiles y el Colaero de Los Mosquitos, siendo este un balcón al vacío. Si padecemos vértigo, mejor no mirar.

La Cima del Lucero apenas es una pequeña plataforma en la cual se asentaba un destacamento de la Guardia Civil, del cual solo se mantiene una la pared de la cara norte. La finalidad de este destacamento era la lucha contra las partidas del maquis y la guerrilla antifascista en primer lugar, y controlar el trasiego del contrabando de los estraperlistas.

Si las imágenes impactantes que hemos disfrutado conforme hemos ascendido, desde la Cima, ya son ¡¡¡¡INENERRABLES!!!!...contemplar toda Sierra Nevada con su inmaculado manto blanco y todas las Cimas de la Almijara es algo que no se describe escribiendo...hay que verlo y sentirlo...

Tras un refrigerio en la altura, toca descender por el mismo camino hasta el Collado de la Perdiz. Desde aquí abandonamos el Sendero a nuestra derecha hacia la Cuesta Parda y el Collado Cacines.

Desde el Collado bajaremos por la antigua pista a Rambla Mota y por el carril de la Resinera continuar hasta el Barranco del Hierro, donde abandonamos el carril principal para internarse por el en bajada hacia el Río Añales....

Al llegar al Río, me encuentro en la imposibilidad de cruzarlo. Gran cantidad de Juncales espesisimos de dos metros de altura me impiden el franqueo. Lo intento un poco más abajo...nada,..un poco más arriba...nada...

Termino abandonando (no encuentro la forma de pasar). Remonto nuevamente el lo que bajado del Barranco del Hierro hasta el carril principal de la Resinera, para continuar por él y abandonar este por la pista de Canene la cual seguiré hasta el Cortijo de Castro. Menos mal que hoy los perros están atados unos y otros dentro de la alambrada del Cortijo.

Paso el Río Añales, y superado este seguir el carril a nuestra izquierda, por la nave de pollos hasta confluir en la carretera hasta el polígono de los Enebrales, donde se termina lo que comencé por la mañana. Hoy mi "compañía" ha sufrido por el derroche físico que ha supuesto dar la gran vuelta por no poder hacer el vadeo del Añales ha supuesto diez kilómetros de más al recorrido... unas veces, todo sale a pedir de boca, en otras....pero la contemplación de ver el mar, y los barcos navegando por el mar Mediterráneo, es algo ¡¡¡sublime!!!.