EL PADRÚN (385) (Mieres)-ALTO DE MAGARRÓN (660) (Sierra de Lagos)-SARDÍN (230) (Ribera de Arriba) (Circuito)

EL PADRÚN (385) (Mieres)-ALTO DE MAGARRÓN (660) (Sierra de Lagos)-SARDÍN (230) (Ribera de Arriba) (Circuito)

DATOS TÉCNICOS:

RECORRIDO: 9,48 k.
ALTURA MÁXIMA: 660 m.
ALTURA MÍNIMA: 230 m.
ASCENSO TOTAL: 533 m.
TIEMPO EN MOVIMIENTO: 4 h.
FECHA DE REALIZACIÓN: Febrero de 2016.

El PADRÚN (385) es un lugar del concejo mierense, alto ubicado en los límites con el municipio ovetense, K. 12,5 de la AS-242, antigua carretera que comunicaba Oviedo y Mieres del Camino, célebre en su día por la pendiente y trazado sinuoso, especialmente subiendo por su vertiente septentrional desde Olloniego. Se halla en la línea divisoria entre las cuencas del Caudal al sur y Nalón al norte, a la vez que separa en trayectoria de oeste a este las SIERRAS DE LAGO y FAYÉU. Es asimismo importante hito de la ruta jacobea –desvío del Camino Francés- para aquellos peregrinos que, afrontando las dificultades orográficas de la Cordillera Cantábrica, deseaban pasar por Oviedo y venerar el Arca Santa.

SARDÍN (230) es a su vez un pueblo del concejo de Ribera de Arriba, situado a 230 metros de altitud, a los pies de la ladera norte de la SIERRA DE LAGOS, sobre el valle del río Nalón. Conserva buenos ejemplos de arquitectura tradicional, hórreos, paneras y antiguas casas de piedra, entre las que destaca en su plaza la casona de Hevia-Ponte, del siglo XVIII. A la entrada de la población, viniendo de Soto de Ribera, se encuentra la capilla de San Antonio, al amparo de un hermoso ejemplar de tejo, que perteneció a la misma casa de Hevia Ponte.

El ALTO DE MAGARRÓN (660), techo de Ribera de Arriba, es la cota más alta de la SIERRA DE LAGOS, que se prolonga al poniente por los picos FAYA LA SINCA (608), BUSTIELLU (566) y LLAMPAYA (540). Es un cordal que marca los límites entre las citadas cuencas del Nalón y Caudal, donde contrastan las manchas arbóreas y denso matorral de tojos en su vertiente norte con los abruptos farallones que se desploman hacia el desfiladero de Peñamiel en su cara suroccidental.

Desde el Padrún tomamos rumbo oeste la carretera secundaria hacia VALMURIÁN (410) en ligero ascenso pasando junto a depósito de agua. En seguida damos vista a una espléndida panorámica por el norte, destacando el P. CASTIELLO (449), situado junto al antiguo Castillo de Tudela, entorno en el que se han encontrado asentamientos prehistóricos como el castro homónimo, y a cuyos pies se ubica Olloniego (178). A nuestra espalda se perfila la SIERRA DE FAYÉU con el PICAYU (714), techo de Oviedo, como cota más prominente.

Al cabo de un kilómetro, encrucijada de caminos. Obviamos la dirección a Sardín (230), por donde regresaremos, y continuamos rumbo a la aldea de VALMURIÁN (410) virando ligeramente al suroeste. Frente a nosotros aparece un cuadro de cordales y cumbres que se repetirá desde distintos ángulos a lo largo del recorrido: las caras norte del P. LLOSORIO (998) y RASÓN (939) (Cordal de Cuba), de PEÑA MANTECA (782) (Sierra de Gobia), del GARCILLERO (839) y del MONTE FRECHURA (733), más la SIERRA DEL ARAMO (1.791) de fondo a la sazón nevada.

Cruzamos LA TELLERA (420), núcleo de casas a los pies de las estribaciones orientales de SIERRA DE LAGOS, para poco después recalar en VALMURIÁN DE ARRIBA (410). Aquí nos desviamos rumbo oeste, en suave ascenso por senda de tierra y calzada encajonada entre muros de piedra hasta alcanzar las cabañas de ESCALABÁ (530). La calleja que delimita las parcelas muradas sube hasta traspasar una portilla, que desemboca en la extensa planicie de CAMPA LES MONXES (560), donde continúan los cercados de feraces praderías con la sierra caliza al norte marcando los límites de la cuenca.

Divisamos ya al poniente el ALTO DE MAGARRÓN (660) precedido de otra cota (651) y en medio EL COLLAÍN (616) separando ambas cumbres. Por el suroeste se amplia la bella panorámica de sierras y cordales. A los ya citados se añade el MONSACRO (1.062) incrustado en medio y LA MOSTAYAL (1.312) cerrando el Aramo por el norte. La senda herbosa continúa llaneando durante varios metros, entre tojos y zarzas en dirección al Alto (660), para desaparecer abruptamente ante una maraña de matorral infranqueable.

Giraremos a la izquierda justo donde termina el cercado buscando la vereda perceptible que nos sube hasta la CAMPA (570), loma de pradería, a los pies de las estribaciones surorientales del Magarrón. Entre los murallones del Alto (660) y la Campa (560) se interpone un muro de piedra y alambrada en cuyo recinto se alternan claros y tupida rebolla. Rodeamos el muro descendiendo unos metros para poco después virar al norte siguiendo su trazado y encontrar el sendero semiescondido por la maleza. A la altura del COLLAÍN (616) afrontamos la dura pendiente por terreno más despejado y en pocos minutos habremos remontado hasta el mismo. Una fácil y corta trepada hacia poniente nos sitúa en la cima marcada con cruz, buzón y belenes de cumbre.

A las deslumbrantes panorámicas del mediodía y oeste ya descritas, algunos de cuyos montes ahora casi a tiro de piedra, hay que añadir los escarpados farallones de la sierra hacia el desfiladero de Peñamiel, más el cuadro variopinto en planos sucesivos de la vertiente norte con Sardín en el valle, más Oviedo y el Naranco al fondo. Por el este asoman cumbres nevadas de la Cordillera Cantábrica destacando la silueta cónica del Torres (2.106) con su escudero el Pico Valverde (1.971) por el flanco sur.

Regresamos al Collaín (616) para iniciar el descenso por la cara norte en dirección a SARDÍN (230). Estamos viendo allá abajo la pista, en la base de CANTU BUSTIELLO (565) y VALLINA MEDIO (534), que nos llevará hasta aquella aldea. Pero un inmenso bosque de tojos, zarzas y arbustos de diversa índole se interpone entre la ansiada senda y nosotros. Siguiendo una vereda, que a veces se bifurca y donde constantemente se interpone la maleza, tanteando por ensayo y error logramos bajar en línea recta enlazando finalmente con aquella pista. Itinerario cómodo durante un par de kilómetros descendiendo hasta el pueblo de Sardín, con hermosas imágenes del PICO GATO (544) y de los caseríos asentados a sus pies en el suroccidente.

Tras visitar la Capilla de San Antonio con su tejo y la coqueta plaza rodeada de antiguas casas bien conservadas, alguna solariega, continuamos el circuito de regreso hacia el Padrún (385), siguiendo en ligero ascenso, rumbo este, la pista asfaltada, con tramos de cemento. Cruzamos LLANDELLENA DE ABAJO (330), desde la cual divisamos su homónima de arriba sobre una ladera salpicada de frutales y tejos. Nos resta un último y suave repecho para conectar con el camino de ida, tras dejar a nuestra derecha la CANTERA DE VALMURIÁN (400) hoy abandonada.

No es una ruta larga, no hay gran desnivel, ni presenta dificultades técnicas en su itinerario. La hemos calificado de “dificultad moderada” por la incomodidad del terreno en el acercamiento y descenso del Alto de Magarrón (660), debido a la maraña de tojos y zarzas que hacen penoso el caminar. Nos tememos que con el tiempo termine convirtiéndose en selva cerrada. Es una cima modesta pero estratégicamente situada. El relato de picos y cordales comentados, al alcance de la vista, dan fe de ello. Nunca habíamos tenido una visión tan completa y detallada del MONSACRO (1.062) como la contemplada desde el MAGARRÓN (660), con imágenes precisas del MAYÁU LES CAPILLES (850) y la ermita de LA MAGDALENA (850) asomada a los derrumbes de la vertiente norte. ¡Sin duda, nunca mejor dicho, merece las penas!