EL PINO (661)-FOCES DEL PINO-PICO LOS PANDOS (1.573)-PEÑA MELERA (1.544) (Aller)

EL PINO (661)-FOCES DEL PINO-PICO LOS PANDOS (1.573)-PEÑA MELERA (1.544) (Aller)

DATOS TÉCNICOS:

RECORRIDO: 14,6 k.
ALTURA MÁXIMA: 1.573 m.
ALTURA MÍNIMA: 661 m.
ASCENSO TOTAL: 880 m.
TIEMPO EN MOVIMIENTO: 4,37 h.
FECHA DE REALIZACIÓN: Julio de 2010.

EL PINO (661) es una localidad allerana, próxima a Felechosa (651), situada en el kilómetro 28 de la AS-253 con final en el Puerto de San Isidro (1.525). A su vez, las FOCES DEL PINO es un desfiladero muy al sur del pueblo antes mencionado, labrado por las aguas del río homónimo, 500 metros de travesía, y declarado Monumento Natural en 2001.

Por su parte, el pico LOS PANDOS (1.573) y PEÑA MELERA (1.544) –también conocida como PANDO ORIENTAL- son dos peñones de roca caliza, distantes entre sí medio kilómetro, en cuya base sur encontraremos camperas y alguna cabaña, y abruptos paredones en su vertiente septentrional con vistas al VALLE DEL RÍO SAN ISIDRO, donde se asientan las principales poblaciones del Concejo de Aller. Se trata de un escarpado cordal, de unos dos kilómetros de longitud, que se extiende de oeste a este partiendo desde la parte más alta de las Foces. En la cara oriental de Peña Melera se ubica la cueva del mismo nombre, topónimo sugerido por los abundantes panales de miel que colgaban de sus muros.

Se atraviesa el pueblo, cruzamos por puente el RÍO SAN ISIDRO, y se toma la pista marcada como PR AS-31, que seguiremos durante gran parte del recorrido. También es conocida como RUTA DE LAS FOCES DEL PINO Y RÍO ALLER, población esta última donde termina. A los pocos metros de iniciada encontramos el MOLIN DE PEÓN (660), décadas atrás pequeña central eléctrica, hoy Centro de Alevinaje de truchas, con muestras representativas de ejemplares criados en el mismo. Aquí se bifurca el camino. Seguimos el de la izquierda, más directo, que confluirá con el de la derecha al comienzo de las foces, donde termina la pista a poco más de tres kilómetros al mediodía.

Durante un par de kilómetros vamos subiendo paulatinamente, por un itinerario muy cómodo a la sombra del bosque. Pasaremos junto a majadas dispersas, a uno y otro lado, con sus cabañas, destacando las praderías de COBESI (808), fuente LAS GAVILANCERAS (820) y caño de piedra a la vera del camino, más LOS PRAONES (826) con cabaña derruida y un hermoso ejemplar de tejo, sobreviviendo entre la maleza. Desde estos parajes divisamos, al poniente, el P. CUETO (1.555), último bastión de la Serranía de las Fuentes de Invierno por el oeste, y PEÑA MEA (1.580) seguida de PEÑAS NEGRAS (1.535, al norte.

Por terreno llano desembocaremos poco después en las Foces (933), donde termina la pista. Un primer puente nos introduce en el desfiladero. Los torrentes de aguas bravas con rápidos, saltos y cascadas, y las rocas que los envuelven, esculpidas caprichosamente por la erosión, hablan por sí solos. En medio, los sauces blancos resistiendo el ímpetu de la corriente. Sólo hace falta mirar y contemplar. Tras cruzar un segundo puente llegamos al final de las foces en EL POSAERO (985), donde una señal nos marca el camino al CDO. CANIECHA (1.537), que habremos de seguir durante algunos metros. Otro indicador apunta a PEÑA REDONDA (1.837), que ya empieza a ser divisada desde estos parajes, vía de acceso directo a la misma a través del Valle el Fondil y Canal de los Agriles.

Hermosas panorámicas se divisan desde el entorno, con las rocas calcáreas emergiendo del desfiladero, enmarcado entre las mismas, y al fondo peñas y picos ya mencionados. Continuamos por el sendero del PR AS-31, a la izquierda de El Posaero, que abandonaremos poco después de pasar junto a una cuadra, para enfilar, rumbo este, el ascenso por el VALLE PEDROSO. Una vereda poco precisa, que se pierde por tramos, nos guiará en la subida, entre praderías alternándose con matorral.

En este deambular con pendiente echamos la vista atrás. Es el momento y lugar adecuados para apreciar la verdadera dimensión de las Foces, escenario que tenemos enfrente: PEÑA REDONDA (1.837) amputada de PEÑA PANDA (1.790) por la Canal de los Agriles, más la prolongación de esta última deslizándose hasta el abismo del desfiladero a través de su estribaciones, y PEÑA PANDOS (1.400), del otro lado, con su cresta cortante, precipitándose en ese abismo. Ambas convergen formando un tajo cuña, que se fue tallando a lo largo de milenios, inmensa labor de desgaste realizada por el río.

En el centro del valle cruzamos la MAJADA PEDROSO (1.335), con los componentes clásicos de una braña: núcleo de cuadras y cabañas, fuente abrevadero, fresnos, cercados con muros de piedra y ganado pastando. Este cuadro se complementa con pequeñas colonias de frondosos acebos y brezo en la zona alta. En seguida coronamos la COLLÁ CAVERA (1.461), que da paso a una extensa pradería, con cabaña asentada al socaire de la roca, vaguada con fuente en medio, y PEÑA MELERA (1.544), más el COLLADO PANDOS (1.472) al fondo. A nuestra izquierda, el P. LOS PANDOS (1.573).

Iniciamos la subida a este último con tendencia a sortear su cara oeste, para acometer finalmente el repecho final, empinado pero corto, ayudándonos con las manos en varios tramos. Es un balcón estratégico para admirar el larguísimo valle por donde discurre la AS-253, densamente poblado en la vertical del pico, tras el cual se alza una cadena montañosa de oeste a este, con relevantes cotas, divisoria entre los Concejos de Aller y Laviana-Caso: PEÑA MEA (1.580), PEÑAS NEGRAS (1.535), CUCHU (1.646), LES ABERRUGUES (1.613) LA FORÁ (1.641), RETRIÑÓN (1.864) y TORRES (2.105).

Regresamos a la COLLÁ CAVERA (1.461) y, cruzando la pradería en vaguada, rumbo este, alcanzamos el COLLADO PANDOS (1.472), a los pies de PEÑA MELERA (1.544), cara sur. Sorprendente y bella la perspectiva del P. Los Pandos, desde este enclave, silueta afilada y elegante por su vertiente nororiental, que contrasta con la masa abigarrada de la cara sur. Acometemos la subida a la peña repitiendo los mismos parámetros del ascenso anterior, incluida la trepada final, que da opción a vías alternativas. Una cruz con placa corona la cima. El hermoso panorama desde la misma, similar al del pico vecino.

Ruta no muy larga, con desnivel importante, que se va superando paulatinamente. Únicamente los metros finales de ambas cimas requieren un esfuerzo supletorio, teniendo que trepar, pero sin especiales complicaciones. ¿Qué decir de los escenarios transitados o divisados a lo largo de la ruta? Fastuoso monumento las Foces y Atalayas sin par las dos cumbres. Las imágenes darán fe de ello. ¡Gozo salvaje y visión relajante a la par!