El Talló - Puig Ou (100 Cims FEEC Essencial)

Ruta maravillosa la que hemos hecho en este día de primavera.
Caminando entre las comarcas de La Garrotxa y el Ripollés, vamos saltando de una a la otra por bosques maravillosos de hayas y robles, senderos sacados de los más bonitos cuentos, vistas asombrosas, árboles monumentales, en definitiva una ruta de las que quedan en la memoria para siempre.
Hoy seguiremos en gran parte la ruta Nº 6 del Consorci Alta Garrotxa, por lo tanto, hasta la cima del Talló seguiremos las marcas Verdes y Naranjas, está muy bien indicado y es muy fácil de seguir.
Aparcamos el coche en unos cientos de metros después del Coll de Bucs, en la carretera que va de Oix a Beget, en un pequeño aparcamiento con cabida para dos o tres coches y comenzamos a caminar ya en cuesta arriba, en el primer cruce (punto de ida y vuelta de la ruta) giramos a la izquierda y pronto llegamos a la Collada del Cortal, donde un panel indicador nos indica que para llegar al Cim del Talló nos quedan 1h y 55 min, seguimos las indicaciones y comenzamos una maravillosa subida por bosque, senderos llenos de sombra, musgo en las piedras y árboles, un color verde apabullante, hojas caídas como en otoño pero estamos en primavera, solamente se oye la naturaleza.
La subida se pone seria cuando subimos por el Pujant del Matxo y seguidamente el Pujant del Burro, dos subidas pronunciadas que se hacen muy bien llevados por la gran belleza del lugar, de vez en cuando la vegetación nos deja ver al Comanegra, enfrente nuestro, imponente como siempre.
Esta preciosa subida acaba en pista, que hacia la derecha, y ya en terreno más plano seguimos por el Pla del Talló, con el camino enfangado de las lluvias de los días anteriores.
Llegamos de esta manera a la Collada del Faig, donde giramos a la izquierda y subimos de nuevo para encontrarnos de frente con un Faig (Haya) monumental, uno de los más grandes de Catalunya, según la información que he podido recopilar, su tronco tiene 1,7 metros de diámetro, y más de 5 metros de perímetro, te sientes pequeño a su lado, sientes que él manda, su ramas llegan al cielo y al suelo al mismo tiempo, casi no deja pasar la luz, es simplemente abrumador, una maravilla de ser vivo.
poco después hay otro Faig enorme, si no estuviera el anterior ya sería la bomba, también es algo digno de ver y de respetar, un espacio que sin duda hay que preservar tal y como está, así se ha de quedar, no somos nadie para alterar esta maravilla creada por la naturaleza.
Poco después se abre la vegetación y por sendero muy fresado con grandes vistas estamos casi en el Cim del Talló, al cual llegamos después de una antecima que creíamos que era la misma cima, ya que tiene como un hito de piedras, pero no, justo al lado, detrás de unos matorrales está el verdadero Cim del Talló, es como una habitación, como una cima privada, sin vistas, con un pequeño pesebre, con un pequeño hito de piedras, un rincón pequeño para una montaña grande, la cima solo para nosotros, es fácil no ver este rincón y creer que la antecima es la verdadera cima, pero a mí me parecía extraño que hubiese más altura detrás de los matorrales que en la cima, e investigando, resulta que veo un pequeño paso entre la vegetación que te da acceso a la cima privada del Talló, es como la zona VIP de la montaña todo un lujo, de verdad.
Después de comer y reponer fuerzas en la cima, seguimos adelante y por sendero salimos de la cima y enseguida llegamos a una esplanada ma-ra-vi-llo-sa, con el verde primavera único de esta zona, con unas vistas increíbles, enfrente tenemos el Puig Ou, caminando por el tapete natural, bajando como flotando, por la ladera de ensueño, algo casi irreal.
Encontramos las marcas naranjas y verdes que nos acompañan de momento en toda la ruta, haga que en un giro a la derecha nos metemos de nuevo en bosque sombrío, así, se repente, sin casi darnos cuenta, y en bajada llegamos a les Colladiques, el punto de ida y vuelta al Puig Ou, con sus caballos pastando, una postal de esas que se ven en las tiendas.
Aquí dejamos (de momento) las marcas del circuito 6 del Talló y encaramos la subida al Puig Ou, el gran objetivo del día de hoy, primero por pista, hasta el Portell de.les Roques, un cruce de caminos con una valla que cruzamos y enseguida dejamos la pista por un sendero a la izquierda que sube decididamente entre otra maravilla de Fageda, por senderos estrechos, seguimos unos puntos amarillos por rocas escarpadas, con terreno encantado, otra subida preciosa y que nos hace emplearemos a fondo, y de repente.....se abre el cielo y tenemos delante el Cim del Puig Ou, puede ser más bonito? No lo creo, o si, pero a mí en ese momento me parece que es el mejor lugar donde puedo estar en ese instante, allí encima el vértice, rodeado de verde infinito, con vistas de 360° hay algo de nubes que nos impiden ver las grandes montañas, pero de verdad que no importa, divisó la ermita de Sant Antoni, por lo tanto debajo está Camprodón que lógicamente no se ve, nos movemos hasta un mirados algo más adelante, con una cruz de recuerdo, y el Talló allí delante, reconocemos perfectamente el recorrido que hemos hecho desde la cima hasta aquí, disfrutamos de cada momento en la cima, sabemos que es un momento especial, nuestro Cim 206 de la FEEC, el que hace n° 100 Esencial, El Puig Ou, en el límite de la Garrotxa y el Ripollés, espectacular.
Deshacemos nuevo pasos, bajando con cuidado ya que el fango hace muy resbaladizo el terreno y llegamos de nuevo a les Colladiques y retomamos las señales verdes y naranjas, pasamos por el Pla dels Resclusanys, los caballos pastando, nos desviamos para ver las ruinas dels Resclusanys, una de las casas a más altura de la Garrotxa, pero estaba ocupada por los caballos, los cuales nos miraban y entendimos a la primera que era si casa y que hoy no nos iban a dejar visitar, es lógico, ellos viven allí, los extraños somos nosotros, retomamos la pista de nuevo y giramos a la derecha en un cruce de caminos pasando por una valla verde, con las omnipresentes señales pintadas, y tras unos cientos de metros por pista, las señales nos llevan hacia la izquierda por una bajada vertiginosa entre hojas secas y por intuición y viendo las señales bajamos muchos metros en poca distancia, una bajada parecida muy decidida que nos lleva a otra pista que ya nos hace ver que se va terminando nuestro paso por esta tierra en el día de hoy, vemos un momento el gran Comanegra que va desapareciendo a medido que bajamos por la pista, aparecemos en el cruce donde unas horas antes habíamos estado y ya solamente nos quedan unos minutos para llegar al final de la ruta de hoy.
Puedo visualizar cada momento vivido, ha calado hondo en nosotros, ojalá disfrutéis tanto como nosotros en esta salida para conquistar dos cimas y mil sensaciones.