Elorrio-Besaide-Arrazola

Esta travesía la he realizado en el día de hoy junto con un compañero de trabajo, aunque el tema es que en realidad empezamos en Arrazola y no en Elorrio porque nos equivocamos con el horario a la hora de coger el bus en Durango, y por no esperar al que iba a Elorrio, fuimos directos a Arrazola.

He de reconocer que hay ciertas diferencias entre empezar desde un pueblo u otro, mas ahora que hay un montón de barro por muchos senderos, pero en condiciones normales no le daría mayor importancia el lugar de partida, en ambos casos la ruta es muy sencilla de hacer y seguir.

La única complicación está en el inicio del ascenso hacia Besaide desde Arrazola (la parte final de la bajada en este caso). Aquí si ha llovido recientemente se acumula mucha cantidad de agua y sobre todo de barro, y es relativamente fácil hundir el calzado en el fango. Además en el propio sendero baja un pequeño arroyo, y lo cierto es que os aconsejo que apoyéis los pies justo encima de donde circula el agua, porque va a ser el único lugar donde podréis pisar terreno firme.

Todo esto en caso de que haya barro, cosa segura desde finales de otoño hasta principios de primavera, ya que en esta zona apenas da el sol y los senderos tardan mucho en secarse del todo. En estos casos, si dudáis de por donde empezar, yo siempre recomiendo hacer los mas duro o difícil al principio, y a ser posible subiendo. Vamos, que es mas práctico hacerlo a la inversa que de la manera que lo presento aquí, pero bueno, realmente la etapa de mi Vuelta a Bizkaia va de Elorrio a Arrazola, y así lo pienso dejar.

Dicho esto, el resto de la travesía es coser y cantar, llueva, nieva o truene. El ascenso desde Elorrio hasta Besaide se realiza a través de un ancho sendero de tierra/piedras en la que la presencia de barro es casi nula, y las pendientes son constantes y muy llevaderas. Además por el camino encontrareis un par de fuentes con agua fresca y muy buena (aunque a día de hoy la fuente Nº 2 gotea pero no sale agua con fluidez).

Poco después llegamos a Besaide. Lo primero que vemos es el primero de los 2 monumentos allí presentes; cuatro pilares verticales unidos, obra del Japonés Yoshin Ogata y de frente el segundo, una torre con una cruz, que hace homenaje a los montañeros fallecidos. Al lado de la torre hay un geodésico con las 3 provincias vascas escritas que indica la muga, y un buzón que indica la cima de Besaide (550m).
Desde aquí podemos contemplar también la sierra de Anboto al completo, y hacia el otro lado, el imponente monte Udalatx, el Murugain o el Kurutzeberri entre otros.

Tras un rato de parón para disfrutar del lugar y de las vistas, continuamos la marcha rumbo hacia nuestro destino, el pequeño barrio de Arrazola.
Giramos a la derecha y encaramos el descenso, yendo siempre por sendero natural a través de un pinar. Aquí las rampas son bastante mas inclinadas que el tramo de ascenso, aunque en la primera parte de la bajada esto todavía no supone un problema.

No así a partir de la mitad del descenso en adelante, donde el sendero pierde calidad y el terreno se vuelve mas quebradizo y sucio. La presencia de barro es altísima, y lo único que nos salva es la presencia de un fino arroyo que desciende por un lateral, y que nos abre una pequeña vía para huir, a trompicones, del mar de fango. Aseguraos de llegar un buen par de botas, primero para que no se os cuele agua o mierda por dentro del calzado, y segundo para que no patinéis, pues el firme está bastante resbaladizo. En Verano o en los periodos en los que no ha llovido durante muchos días, cuando toda la zona está seca, es una gozada andar por aquí, pero esto es Euskadi señores, aquí puede llover en cualquier momento, y el barro siempre nos va a acompañar, allá donde vayamos.

Al llegar a la parte baja del monte, abandonamos el arroyo y el barrizal para seguir ya en llano por un sendero algo mas ancho pero que en varios tramos esta repleto de charcos de todos los tamaños. Por fortuna, todos ellos se pueden esquivar yendo por los laterales.

Finalmente, dejamos atrás el sendero natural para ir ya por una pista de tierra/piedras muy fina y lisa, que no es otro que el de la popular Vía Verde de Arrazola, que concluye en el barrio de Apatamonasterio. Avanzamos en él durante un rato hasta que nos desviamos a la izquierda para ir por una carretera directo al barrio de Arrazola, perteneciente al municipio de Atxondo (al igual que los también barrios de Axpe y Apatamonasterio).

Podríamos haber terminado aquí y coger el bus en la parada que hay cercana a la iglesia, pero decido ir un poco mas abajo, a la parada que hay carretera bajo y concluir allí esta sencilla y bonita ruta.
El tiempo total dedicado a la ruta ha sido de 3h y 52min. Hemos ido de principio a fin a ritmo de tortuga, tampoco había necesidad de correr, aunque por poder fácilmente se podría completar el recorrido en unas 2h y media o 3h.