Elorrio-Valle de Atxondo (Apatamonasterio-Axpe)-Alluitz-Astxiki-Sagastakoba-Abadiño (Mendiola-Muntsaratz-Zelaieta)-Durango
near Elorrio, País Vasco (España)
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Trail photos
Itinerary description
Vuelta al País Vasco desde Ermua. Etapa 4:
Al igual que ayer, he tenido que crear el track a mano por un error a la hora de encontrar un sendero, aunque esta vez no ha sido cagada mía por exceso de confianza, mas bien porque resultaba complejo de verlo. Además, la línea de la trazada ha hecho varios rectos que pueden ser problemáticos a la hora de seguir el track, así que he preferido volverlo a subir, estando ya a priori todo corregido.
Tremenda ruta la de hoy, muy larga y muy dura, tanto en lo físico como en lo técnico, aunque lo que mas me ha hecho sufrir es el apartado físico. Tenía que aprovechar que los senderos aún están secos para hacer 2 cumbres del macizo de Anboto (Alluitz y Astxiki), antes de que vuelvan las lluvias y el avance sea mucho mas problemático y complejo.
Comienzo en la parada de bus de la localidad vizcaína de Elorrio. En realidad he iniciado la grabación en el ayuntamiento, ya que quería empezar fotografiando algún que otro punto de interés del pueblo, ya que desde la parada de bus en adelante, no hay prácticamente nada.
Luego, paso por el crucero de Kurutzebarri y poco después, por el barrio de San Agustín. Este barrio es y será el único lugar de toda mi Vuelta a Euskadi donde pasaré 2 veces por el mismo sitio, que se une con la etapa 184, que va de Arrazola a Berriz. Es lo que tiene ir añadiendo etapas e improvisar sobre la marcha. No di con la forma de poder evitar cruzar por el mismo lugar si quería continuar yendo a otro pueblo diferente.
A continuación, tras andar a la par de una carretera, la abandono por la izquierda para ir por una pista de piedras que me lleva directo al pueblo de Apatamonasterio, perteneciente al municipio del Valle de Atxondo. Seguiré en tierras de dicho municipio durante unos kilómetros mas, pasando en segundo lugar por el diminuto barrio de Marzano, y después, por el pequeño pero bonito pueblo de Axpe, casi a los pies de la Sierra de Anboto.
Desde aquí puedo observar mis 2 próximos objetivos, las cumbres de los montes Alluitz y Astxiki. Para llegar allí, lo primero es subir por una pista asfaltada, y después zigzaguear por un sendero natural.
Luego, en un cruce, giro a la izquierda y después a la derecha. Avanzo unos minutos por un pinar, y al salir de el, inicio de forma oficial el ascenso a dichos montes. El camino está señalizado con numerosas marcas PR amarilla y blanca. Estas marcas, aunque no tan abundantes y visibles, seguirán apareciendo en el ascenso de ambos montes.
Al cabo de unos minutos, llego al collado de Artola, punto intermedio y clave de la ruta. Aquí puedo escoger entre ir a la derecha y ascender al Astxiki o ir a la izquierda y ascender al grandullón Alluitz. Por pura estrategia, creo que conviene hacer lo mas duro y difícil en primer lugar, y ya luego si hay fuerzas y ganas, encarar la opción mas asequible. Así pues, giro a la izquierda rumbo al Alluitz.
Los primeros metros son muy sencillos, yendo por un mas que visible sendero de tierra y piedra. Pero luego, la cosa cambia radicalmente. La roca y piedra es la absoluta protagonista, y la pendiente es muy elevada. Tengo que subir por una pequeña pero intensa pedrera que, junto a la abundante presencia de arenilla, y que la suela de mis zapatillas estaban bastante comidas, me hacía resbalar frecuentemente. Lo ideal sería ir con zapas en buen estado o con botas, pero en una ruta de mas de 24km, siendo la inmensa mayoría en terreno duro y llano, no estaba dispuesto a darme la paliza y joderme los pies con las botas.
Luego, la situación mejora un poco, dejando atrás la pedrera, aunque la segunda mitad de ascenso impone y mucho. La pendiente no afloja ni un instante, y el terreno es un caos de rocas, piedras, tierra y hierba. No obstante, se aprecia perfectamente la presencia de un fino sendero que serpentea sobre la ladera. A ratos hay que agarrarse a las rocas con las manos para avanzar con seguridad, pero en general el ascenso es sencillo.
En la parte alta de la ladera, se encuentra un haya solitaria. Esta es una buena referencia, ya que poco después, tras rodearla por la derecha, se sitúa la cresta cimera. Solo queda andar sobre ella unos metros en fácil y cómodo ascenso, hasta llegar al buzón y vértice geodésico del monte Alluitz (1040m), Tremendas las vistas que hay en lo alto, aunque lo primero que incita a ver es el cercano Paso del Diablo, un paso en forma de V con caída a ambos lados, en el cual un error puede ser fatal.
Por atrás, tampoco desmerece el rey de este macizo, el Anboto. Y el resto de macizos y montes, pues están el Urkiolamendi, Saibigain, Gorbea, Sierra Salvada, Eskuagatx, Leungane, Mugarra, Untxillatz, Sollube, Oiz, Urko, Erlo, Hernio, Aralar, San Donato/Beriain, Udalatx, Aizkorri, Aratz, Toloño, San Lorenzo...
Y por la parte baja, se encuentran todas las localidades de la comarca del Duranguesado (Durango, Abadiño, Valle de Atxondo, Elorrio...). Impresionantes vistas!!
Tras una parada para comer y beber algo, y sacar numerosas fotos, inicio el descenso y el regreso al collado de Artola. Durante el ascenso fui a pelo, pero en la bajada decidí sacar los bastones y aprovechar que 4 patas avanzan mejor que 2, para sortear con mucha mayor facilidad los resbaladizos obstáculos del camino. No guardaría los bastones hasta llegar a terreno civilizado.
Una vez en el collado de Artola, sigo recto y encaro un sencillo aunque también empinado ascenso por terreno de piedra, arenilla y piedra. Al igual que en el Alluitz, el problema no iba a ser tanto subir, sino bajar, pero ahora si iba bien equipado.
En pocos minutos alcanzo la doble cima del monte Astxiki (791m). Primero paso por la mas pequeña, la antecima, situada a la derecha de la principal. La ventaja que tiene, es que se observa con mayor nitidez y grandeza el vecino monte Untxillatx. Por contra, la cima principal, ofrece la gran ventaja de disfrutar de un primer plano de la enorme mole piramidal del Alluitz. IMPRESIONANTE.
Vistas similares al Alluitz, aunque con menor panorámica, ya que éste le tapa la vista hacia el Anboto.
Una vez finalizada la parte mas dura físicamente hablando, tocaba iniciar el descenso hacia los pueblos del Duranguesado. Una vez en el collado de Artola, tenéis 3 opciones: Girar a la derecha y buscar el camino que lleva a las Canteras de Atxarte, o, girando a la izquierda, ir por uno de los 2 caminos que hay hacia el barrio de Mendiola. Para los no habituales al Alluitz y Astxiki, os puede sorprender que diga que haya "2" caminos a Mendiola, ya que a simple vista solo se aprecia uno, el que usé para subir. Pero indagando en el mapa, me topé con otro, que bordea el Astxiki por su cara Norte, hasta llegar a la carretera que conecta con Mendiola. Lo que no sabía era que me iba a encontrar, si el camino sería de fácil o difícil acceso. Decidí probar suerte.
La primera "ostia" me la di nada mas empezar. Tomé como referencia 2 postes eléctricos. El primero hay que pasarlo, y el segundo creía que también, pero no. Antes de llegar a él, hay que girar a la izquierda, subir un pequeño repecho por hierba, y enseguida llegaréis a ver un minúsculo sendero natural. Hay que seguirlo a rajatabla, aunque a veces el rastro se pierde. Aun así, si miráis con frecuencia el track, no os perderéis.
Hay que pasar por un árbol solitario, y después, seguir bajando por su derecha, en fuerte pendiente y por senda natural rodeada de hierba, pero repleto de arenilla que patina un montón. En frente, veo una gran mole de roca por la parte de arriba. y justo debajo de él... sorpresa!! hay una cueva. Se trata de Sagastakoba, una gran cavidad que ofrece unas ventanas naturales con forma de ojos, de un estilo similar a los "Ojos del Diablo" del monte Peña Candina, en Cantabria, pero en vez de observar el mar desde arriba, aquí se observa Oiz y el Duranguesado. Dicha cueva se haya equipada con material de escalada y, al parecer, se han encontrado evidencias de asentamientos prehistóricos.
A continuación, miro a fondo en el suelo para buscar el rastro del sendero. Desciendo entre helechos, que a veces me hacen patinar por el lado derecho, aunque por fortuna no hay caída. No tardo demasiado en alcanzar un bosque, que resulta ser un denso y precioso hayedo. Aquí conecto con otro sendero que a saber de donde viene, y sigo bajando por un sendero natural en muy mal estado. Se encuentra muy roto, con muchísimos resaltes. Tiene toda la pinta que este camino en caso de estar mojado, será un barrizal del copón.
Pero lo peor en cuanto a calidad del sendero vendría mas abajo. Enseguida me topo con un depósito de agua, y en los alrededores todo el ancho del camino estaba embarrado... o casi, hoy me salvé por los pelos. Porque apenas ha llovido aquí estos días, sino me iba a poner fino de mierda, a escasos 100-200m del final del sendero.
Por último, cruzo una alambrada protegida con una cadena de hierro, y al fin, llego a la civilización, concretamente a la carretera que conecta con el barrio de Mendiola y Abadiño.
Los últimos 9km de ruta son un paseo dominguero, yendo siempre en llano, bien por carretera, por bidegorris o por las calles de cada pueblo.
En última instancia, tras haber visitado los barrios de Muntsaratz y Zelaieta (Abadiño) y San Fausto y Landako (Durango), llego a la parada de bus de Durango, y finalizo así esta larga, dura pero preciosa ruta, muy recomendable.
PD: El tiempo total dedicado a la ruta ha sido de 9h y 7min, habiendo ido a un ritmo alto en las zonas llanas, y lento en la parte montañera. También he estado mucho rato parado en ambas cimas, además del tiempo que le dedico a sacar fotos, que suele ser bastante.
No me atrevería a decir cuanto tiempo se podría rebajar si se fuera a un ritmo medio y constante de principio a fin, sin entretenerse, pero fácilmente se puede bajar mi registro.
En caso de que haya llovido bastante recientemente, o que estéis en Invierno, bien por el riesgo de nieve o heladas, o porque los días son mas cortos y el terreno tarda mucho en secarse, os recomendaría que no descendierais por el tramo de la cueva de Sagastakoba. El riesgo de resbalar y daros una buena ostia sería muy alto, además de que os comeríais un lodazal descomunal en la parte baja del camino. Lo mas conveniente sería que subáis y bajéis por la vía normal de Axpe, o ir por el otro lado desde las Canteras de Atxarte. Ambos itinerarios son sencillos de hacer, en cualquier condición climática.
Ni que decir tiene que vayáis con cuidado tanto al Alluitz como al Astxiki si las condiciones no son favorables, en ese caso, os recomendaría llevar bastones y usar botas.
Al igual que ayer, he tenido que crear el track a mano por un error a la hora de encontrar un sendero, aunque esta vez no ha sido cagada mía por exceso de confianza, mas bien porque resultaba complejo de verlo. Además, la línea de la trazada ha hecho varios rectos que pueden ser problemáticos a la hora de seguir el track, así que he preferido volverlo a subir, estando ya a priori todo corregido.
Tremenda ruta la de hoy, muy larga y muy dura, tanto en lo físico como en lo técnico, aunque lo que mas me ha hecho sufrir es el apartado físico. Tenía que aprovechar que los senderos aún están secos para hacer 2 cumbres del macizo de Anboto (Alluitz y Astxiki), antes de que vuelvan las lluvias y el avance sea mucho mas problemático y complejo.
Comienzo en la parada de bus de la localidad vizcaína de Elorrio. En realidad he iniciado la grabación en el ayuntamiento, ya que quería empezar fotografiando algún que otro punto de interés del pueblo, ya que desde la parada de bus en adelante, no hay prácticamente nada.
Luego, paso por el crucero de Kurutzebarri y poco después, por el barrio de San Agustín. Este barrio es y será el único lugar de toda mi Vuelta a Euskadi donde pasaré 2 veces por el mismo sitio, que se une con la etapa 184, que va de Arrazola a Berriz. Es lo que tiene ir añadiendo etapas e improvisar sobre la marcha. No di con la forma de poder evitar cruzar por el mismo lugar si quería continuar yendo a otro pueblo diferente.
A continuación, tras andar a la par de una carretera, la abandono por la izquierda para ir por una pista de piedras que me lleva directo al pueblo de Apatamonasterio, perteneciente al municipio del Valle de Atxondo. Seguiré en tierras de dicho municipio durante unos kilómetros mas, pasando en segundo lugar por el diminuto barrio de Marzano, y después, por el pequeño pero bonito pueblo de Axpe, casi a los pies de la Sierra de Anboto.
Desde aquí puedo observar mis 2 próximos objetivos, las cumbres de los montes Alluitz y Astxiki. Para llegar allí, lo primero es subir por una pista asfaltada, y después zigzaguear por un sendero natural.
Luego, en un cruce, giro a la izquierda y después a la derecha. Avanzo unos minutos por un pinar, y al salir de el, inicio de forma oficial el ascenso a dichos montes. El camino está señalizado con numerosas marcas PR amarilla y blanca. Estas marcas, aunque no tan abundantes y visibles, seguirán apareciendo en el ascenso de ambos montes.
Al cabo de unos minutos, llego al collado de Artola, punto intermedio y clave de la ruta. Aquí puedo escoger entre ir a la derecha y ascender al Astxiki o ir a la izquierda y ascender al grandullón Alluitz. Por pura estrategia, creo que conviene hacer lo mas duro y difícil en primer lugar, y ya luego si hay fuerzas y ganas, encarar la opción mas asequible. Así pues, giro a la izquierda rumbo al Alluitz.
Los primeros metros son muy sencillos, yendo por un mas que visible sendero de tierra y piedra. Pero luego, la cosa cambia radicalmente. La roca y piedra es la absoluta protagonista, y la pendiente es muy elevada. Tengo que subir por una pequeña pero intensa pedrera que, junto a la abundante presencia de arenilla, y que la suela de mis zapatillas estaban bastante comidas, me hacía resbalar frecuentemente. Lo ideal sería ir con zapas en buen estado o con botas, pero en una ruta de mas de 24km, siendo la inmensa mayoría en terreno duro y llano, no estaba dispuesto a darme la paliza y joderme los pies con las botas.
Luego, la situación mejora un poco, dejando atrás la pedrera, aunque la segunda mitad de ascenso impone y mucho. La pendiente no afloja ni un instante, y el terreno es un caos de rocas, piedras, tierra y hierba. No obstante, se aprecia perfectamente la presencia de un fino sendero que serpentea sobre la ladera. A ratos hay que agarrarse a las rocas con las manos para avanzar con seguridad, pero en general el ascenso es sencillo.
En la parte alta de la ladera, se encuentra un haya solitaria. Esta es una buena referencia, ya que poco después, tras rodearla por la derecha, se sitúa la cresta cimera. Solo queda andar sobre ella unos metros en fácil y cómodo ascenso, hasta llegar al buzón y vértice geodésico del monte Alluitz (1040m), Tremendas las vistas que hay en lo alto, aunque lo primero que incita a ver es el cercano Paso del Diablo, un paso en forma de V con caída a ambos lados, en el cual un error puede ser fatal.
Por atrás, tampoco desmerece el rey de este macizo, el Anboto. Y el resto de macizos y montes, pues están el Urkiolamendi, Saibigain, Gorbea, Sierra Salvada, Eskuagatx, Leungane, Mugarra, Untxillatz, Sollube, Oiz, Urko, Erlo, Hernio, Aralar, San Donato/Beriain, Udalatx, Aizkorri, Aratz, Toloño, San Lorenzo...
Y por la parte baja, se encuentran todas las localidades de la comarca del Duranguesado (Durango, Abadiño, Valle de Atxondo, Elorrio...). Impresionantes vistas!!
Tras una parada para comer y beber algo, y sacar numerosas fotos, inicio el descenso y el regreso al collado de Artola. Durante el ascenso fui a pelo, pero en la bajada decidí sacar los bastones y aprovechar que 4 patas avanzan mejor que 2, para sortear con mucha mayor facilidad los resbaladizos obstáculos del camino. No guardaría los bastones hasta llegar a terreno civilizado.
Una vez en el collado de Artola, sigo recto y encaro un sencillo aunque también empinado ascenso por terreno de piedra, arenilla y piedra. Al igual que en el Alluitz, el problema no iba a ser tanto subir, sino bajar, pero ahora si iba bien equipado.
En pocos minutos alcanzo la doble cima del monte Astxiki (791m). Primero paso por la mas pequeña, la antecima, situada a la derecha de la principal. La ventaja que tiene, es que se observa con mayor nitidez y grandeza el vecino monte Untxillatx. Por contra, la cima principal, ofrece la gran ventaja de disfrutar de un primer plano de la enorme mole piramidal del Alluitz. IMPRESIONANTE.
Vistas similares al Alluitz, aunque con menor panorámica, ya que éste le tapa la vista hacia el Anboto.
Una vez finalizada la parte mas dura físicamente hablando, tocaba iniciar el descenso hacia los pueblos del Duranguesado. Una vez en el collado de Artola, tenéis 3 opciones: Girar a la derecha y buscar el camino que lleva a las Canteras de Atxarte, o, girando a la izquierda, ir por uno de los 2 caminos que hay hacia el barrio de Mendiola. Para los no habituales al Alluitz y Astxiki, os puede sorprender que diga que haya "2" caminos a Mendiola, ya que a simple vista solo se aprecia uno, el que usé para subir. Pero indagando en el mapa, me topé con otro, que bordea el Astxiki por su cara Norte, hasta llegar a la carretera que conecta con Mendiola. Lo que no sabía era que me iba a encontrar, si el camino sería de fácil o difícil acceso. Decidí probar suerte.
La primera "ostia" me la di nada mas empezar. Tomé como referencia 2 postes eléctricos. El primero hay que pasarlo, y el segundo creía que también, pero no. Antes de llegar a él, hay que girar a la izquierda, subir un pequeño repecho por hierba, y enseguida llegaréis a ver un minúsculo sendero natural. Hay que seguirlo a rajatabla, aunque a veces el rastro se pierde. Aun así, si miráis con frecuencia el track, no os perderéis.
Hay que pasar por un árbol solitario, y después, seguir bajando por su derecha, en fuerte pendiente y por senda natural rodeada de hierba, pero repleto de arenilla que patina un montón. En frente, veo una gran mole de roca por la parte de arriba. y justo debajo de él... sorpresa!! hay una cueva. Se trata de Sagastakoba, una gran cavidad que ofrece unas ventanas naturales con forma de ojos, de un estilo similar a los "Ojos del Diablo" del monte Peña Candina, en Cantabria, pero en vez de observar el mar desde arriba, aquí se observa Oiz y el Duranguesado. Dicha cueva se haya equipada con material de escalada y, al parecer, se han encontrado evidencias de asentamientos prehistóricos.
A continuación, miro a fondo en el suelo para buscar el rastro del sendero. Desciendo entre helechos, que a veces me hacen patinar por el lado derecho, aunque por fortuna no hay caída. No tardo demasiado en alcanzar un bosque, que resulta ser un denso y precioso hayedo. Aquí conecto con otro sendero que a saber de donde viene, y sigo bajando por un sendero natural en muy mal estado. Se encuentra muy roto, con muchísimos resaltes. Tiene toda la pinta que este camino en caso de estar mojado, será un barrizal del copón.
Pero lo peor en cuanto a calidad del sendero vendría mas abajo. Enseguida me topo con un depósito de agua, y en los alrededores todo el ancho del camino estaba embarrado... o casi, hoy me salvé por los pelos. Porque apenas ha llovido aquí estos días, sino me iba a poner fino de mierda, a escasos 100-200m del final del sendero.
Por último, cruzo una alambrada protegida con una cadena de hierro, y al fin, llego a la civilización, concretamente a la carretera que conecta con el barrio de Mendiola y Abadiño.
Los últimos 9km de ruta son un paseo dominguero, yendo siempre en llano, bien por carretera, por bidegorris o por las calles de cada pueblo.
En última instancia, tras haber visitado los barrios de Muntsaratz y Zelaieta (Abadiño) y San Fausto y Landako (Durango), llego a la parada de bus de Durango, y finalizo así esta larga, dura pero preciosa ruta, muy recomendable.
PD: El tiempo total dedicado a la ruta ha sido de 9h y 7min, habiendo ido a un ritmo alto en las zonas llanas, y lento en la parte montañera. También he estado mucho rato parado en ambas cimas, además del tiempo que le dedico a sacar fotos, que suele ser bastante.
No me atrevería a decir cuanto tiempo se podría rebajar si se fuera a un ritmo medio y constante de principio a fin, sin entretenerse, pero fácilmente se puede bajar mi registro.
En caso de que haya llovido bastante recientemente, o que estéis en Invierno, bien por el riesgo de nieve o heladas, o porque los días son mas cortos y el terreno tarda mucho en secarse, os recomendaría que no descendierais por el tramo de la cueva de Sagastakoba. El riesgo de resbalar y daros una buena ostia sería muy alto, además de que os comeríais un lodazal descomunal en la parte baja del camino. Lo mas conveniente sería que subáis y bajéis por la vía normal de Axpe, o ir por el otro lado desde las Canteras de Atxarte. Ambos itinerarios son sencillos de hacer, en cualquier condición climática.
Ni que decir tiene que vayáis con cuidado tanto al Alluitz como al Astxiki si las condiciones no son favorables, en ese caso, os recomendaría llevar bastones y usar botas.
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Comments (3)
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K pena, yo quería una circular
Puedes hacer, por eso te decía de no seguir el track al pie de la letra. Con este mismo, dejas el coche en Axpe, y subes y bajas por el mismo sitio. Ruta lineal. O en el otro track, lo mismo pero desde Atxarte.
Los tramos que no te interesen, como Elorrio, Durango, etc, quitarlos. Es jugar con el contenido del mismo, coger solo los tramos que t interesen y, o bien hacer una unión de varios y crear una circular a la carta, o simplemente elegir un tramo en concreto, como el que he mencionado antes, y acortar la ruta original.
Muy bien, y gracias por todo.