Elortza-Arburu

Una vez más vuelvo a las cercanías del parque natural de Izki para realizar una ruta en forma de 8 por lo que alguno denomina las “cimas musicales”: Peñas de Obi/La Campana, Zabalegi, Peña Las Cinco y Arburu. El nombre viene de que encontraremos unas esculturas con forma de campanas y xilófonos cerca de las cimas. 11Km y 500 metros de desnivel serán suficientes para completar esta agradable mañanera.

Si vamos en dirección Vitoria-Maeztu, justo antes de entrar en Maeztu, encontraremos el desvío que lleva a la aldea de Elortza/Leorza; junto a la carretera encontraremos una pequeña zona de aparcamiento. Los primeros pasos de esta fría mañana, nos llevarán por el puente que cruza sobre el río Musitu, y así seguir avanzando en dirección Sur entre los últimos chalets de Elortza.

Al llegar a una primera bifurcación, tomamos la senda de la izquierda que asciende entre el robledal y que tras cerca de medio kilómetro, nos lleva a otro cruce de caminos. A nuestra izquierda cruzamos una barrera verde (N) con marcas de pequeño recorrido, se trata del PR-A-59. Así seguiremos ganando altura, y aunque llegaremos a otro cruce en el que veremos un hito a nuestra derecha, nosotros seguiremos de frente tras las marcas blancas y amarillas.

Cuando el sendero gira hacia el Este, llegamos al cruce en el que enlazamos con la subida normal de Sabando (PR-A-58), así que nosotros continuamos a la derecha hacia las Peñas de Obi. En este tramo toparemos con dos cuevas (Cuevas de Obi); la primera se encuentra a la izquierda del sendero en el fondo de una dolina, y la segunda a mano derecha y con un acceso más sencillo. Desde la segunda cueva llegamos en un abrir y cerrar de ojos a la primera cima del día: Peña de Obi/La Campana (854m.); donde encontramos un buzón con una llanta a modo de campana, de ahí el sobrenombre de la cima.

El PR avanza hacia el sureste entre antiguos robles y desciende al portillo de Gesal, por donde volveremos a pasar más tarde para regresar a Elortza. Desde el portillo, siguiendo la cresta, encontramos otra escultura con forma de xilófono; después en nuestro caso decidimos volver unos metros atrás (NE) para tomar un sendero más marcado que nos ayudará a seguir (S-SE) en dirección a Peña Las Cinco. Cuando estamos casi a la altura de Zabalegi, abandonamos el sendero y seguimos a nuestra derecha por lo alto del cordal; en busca de la cima, donde no hay absolutamente nada más que árboles (865m.). De esta forma nos seguimos abriendo paso (S) hasta alcanzar la siguiente cumbre del día: Peña Las Cinco (907m.); la cual tiene una de las mejores vistas de la jornada hacia los farallones del Arburu, y un curioso buzón con dos llantas a modo de campanas junto a una escalera.

Ahora abandonamos los cortados para seguir hacia el interior (NE); nos guiamos por unas rodadas que nos llevan a un poste, el cual dice que debemos seguir a la derecha (E) si queremos ir al Arburu. Llaneamos durante un rato y después se comienza a ganar altura progresivamente, seguiremos de frente al toparnos con las primeras bifurcaciones. En la cota 930m., quedará a nuestra izquierda la senda que utilizaremos para el descenso, pero nosotros ahora continuamos ascendiendo (SE) hasta llegar a un cruce que se encuentra poco después de dejar a nuestra derecha unas curiosas formaciones kársticas. En esta bifurcación tomamos la senda de la derecha, la cual nos llevará hasta un árbol donde un antiguo cartel nos indica la dirección a seguir hacia la cima. Tras atravesar cuidadosamente el complicado karst del Arburu, coronamos la cima (1.048m.). La panorámica es inmensa y podemos apreciar con facilidad la sierra de Kodes y justo frente a nosotros, el San Cristobal.

Realizamos la vuelta por el camino que vinimos hasta llegar a la cota 930m., entonces tomamos la senda de la derecha (NW), descendiendo con las canteras de La Minoría frente a nosotros. Poco después de dejar unos paneles solares atrás, abandonamos la pista para seguir por un sendero que a nuestra izquierda se dirije al portillo de Gesal. Siguiendo el camino que desciende por el portillo (SW), pronto pasamos por una estrechura entre rocas y el sendero va pegado a la pared; hasta que nos separaremos de élla siguiendo otro estrecho sendero que se divide a la izquierda. No tardaremos mucho en alcanzar una cueva artificial y más adelante llegaremos a una bifurcación, en la que en nuestro caso continuamos por la izquierda para cruzar una langa y llegar a una pista. Esta pista, la seguimos a la derecha paralelos a un tendido eléctrico, y termina enlazando con la barrera verde que nos encontramos al inicio de la ruta. Ya solo nos queda un paseito hasta Elortza, donde pegamos un buen trago de agua en la fuente del pueblo.