Embalse de Tous. Fuente y ferrata del Chorrillo. Barranco del Castellet. Cueva y Barranco del Candil. Camino del Pollet.

Bonita, dura y exigente ruta, en un día veraniego aunque con buena parte de cielos nubosos, en el entorno del embalse de Tous, que no habíamos visitado nunca y es bellísimo y sorprendente, incluyendo el paso a la vuelta junto a una amplia manada de caballos, mulos y burros de aspecto asilvestrado.
Para la preparación inicial de la ruta tuvimos en cuenta la propuesta de Alegría ("https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/tous-vereda-del-pollet-fuente-del-chorrico-cueva-del-candil-15415447), aunque luego hemos hecho importantes modificaciones.
Antes de iniciar la ruta a pie hemos querido visitar la presa del embalse de Tous, a la que no es posible acceder directamente, pero hay un aparcamiento cercano que nos permite una excelente vista de la presa y la parte vecina del embalse. Lllegamos ahí en coche y, terminada la visita, seguimos en coche hasta el punto donde realmente comenzamos a caminar, en un pequeño aparcamiento situado en la confluencia de la CV-5412 con el camino del Pollet, en el que dejamos el coche.
La carretera citada (probablemente hacia el antiguo pueblo de Tous), está asfaltada aunque nadie parece circular por ella, con excepción de unos pocos ciclistas, y hace unas cuantas curvas, pero es cómoda para caminar y tiene excelentes vistas al embalse y zona vecina de la Ribera Alta, mientras desciende hacia el embalse tras cruzar el Barranco del Pollet. La alternativa de descenso hacia el embalse, probablemente preferible para senderistas deportivos, es el sendero que baja por el propio Barranco del Pollet (que es el mostrado por Alegría, visible también en los mapas OSM), aunque es muy probable que esa alternativa aumente la exigencia de la ruta.
Tras cruzar el Barranco del Pollet seguimos descendiendo hasta el nivel del agua por la ribera norte del barranco. En la boca del Barranco hay un construcción, parece una muralla o presa, y a unos cientos de metros, en una peninsula de tierra que parece continuar hacia el Cerro Terrabona, están los restos del Castillo de Tous; el agua cubre por completo los restos del antiguo pueblo, no siendo visible en la actualidad ni la punrta de la torre de la iglesia.
En la parte final del Barranco se avisa de que estamos en terrenos inundables, aunque seguimos todavía durante unas centenas de metros por la carretera, que prosgresivamente va siendo engullida por las aguas, sin que veamos continuación. No hay problemas mayores por ello. Volvemos atrás unas decenas de metros y subimos por la ladera del monte hasta llegar a un sendero, bastante visible y con marcas algo borrosas de sendero local, por el que seguimos avanzando. Pronto encontramos restos de una conducción de agua antigua, no funcional y muy rota, que nos guía en el avance hacia la espectacular bahía que se forma, a los pies del Cerro Terrabona, por la confluencia de los Barrancos Fornales, Castellet y del Chorrico.
Hasta aquí todo ha sido fácil, incluso demasiado, pero a partir de ahora las cosas cambian y el nivel de exigencia (hasta ahora muy bajo) aumenta notablemente. Seguimos avanzando por la ladera este de la bahía, para luego girar hacia nuestra derecha al alcanzar el barranco por donde desciende el arroyo que viene desde la Fuente del Chorrico. El paso hacia delante está tapado por la vegetación y debemos cruzar el arroyo, pasando a la otra ladera, donde hay una señal informativa (arrancada del suelo, pero colocada en posición correcta) que nos indica el camino a seguir, en abrupta subida hacia la Ferrata del Chorrito. Llegamos al inicio de la Ferrata y ahí vemos un cable que cruza en horizontal hacia nuestra derecha; llegamos a el y seguimos su dirección para alcanzar pocos metros más allá la zona de Ferrata menor por donde subiremos (diseñada como zona de bajada para los que realizan la Ferrata mayor, aunque a nosotros nos gustaría poco hacerla en sentido descendente). Primero hay un paso relativamente sencillo, con una docena de grapas y salida lateral por la derecha. Luego un corto desplazamiento lateral nos lleva a una canal muy erosionada con unas cuantas grapas, que se sube con bastante comodidad aprovechando la falla en la pared. Salimos a un nuevo falso llano y algo más adelante encontramos una nueva zona con grapas, por la que trepamos para salir a la parte alta del barranco. Unas docenas de metros mas adelante encontraremos el sendero que viene desde la Ferrata mayor, pero nosotros nos vamos a la derecha en busca del Barranco del Castellet. Ni que decir tiene, además de una dosis suficiente de adrenalina para los no acostumbrados a las ferratas, esta parte del trayecto que acabamos de pasar es exigente y requiere analizar con cuidado la estrategia de paso. Si lleva bastones no deje de cerrarlos y guardarlos en lugar seguro, y si lleva guantes de escalada este es un buen lugar para usarlos; asegure el anclaje y no haga tonterìas o tome riesgos adicionales, puede pagarlo muy caro. A cambio del estress la ruta le ofrece impresionantes paisajes y un recuerdo ambiavalente (con Gustavo se pasaba mejor por estos sitios).
Ya hemos pasado la parte más complicada y seguimos, en prolongada subida por el lecho del Barranco de Castellets, de suelo bastante irregular, que nos obliga a buscar en varias ocasiones lugares alternativos de paso para saltar algunas pozas y cortados en el cauce. En total el tramo de Barranco no supera los 2 km de longitud, pero la marcha es muy lenta y el esfuerzo sostenido, sin zonas de descanso.
Al final llegamos a un sendero que asciende por nuestra derecha hacia una vecina loma, en la Sierra del Caballón. Las fuerzas de alguno están bastante al límite, pero el camino sigue ascendiendo, por un exigente sendero, hacia la Cueva del Candil y la Loma de Cotillas. Cuando llegamos a la Cueva hacemos una foto de la boca y nada más; la caida es bastante vertical y la entrada muy complicada, así que mejor dejarla para los espeleólogos. Seguimos subiendo y pasamos por un sendero que sube aceleradamente por la izquierda hacia la Loma de Cotillas; por ahí se va Manuel, aunque los demás seguimos, como estaba previsto hacia el Barranco del Candil, para luego subir hacia el Camino del Pollet.
Para entonces la subida ha hecho mella y las fuerzas están al límite. Uno de nosotros se adelanta y, tras unirse a Manuel, que espera más adelante, hace aceleradamente los 3 km de regreso por el camino hasta el lugar donde hemos dejado el coche, que recuperamos. Durante esta parte del recorrido nos encontramos con una gran manada de caballos y burros, en aparente libertad aunque no mostraron ninguna inquietud a nuestro paso. Volvemos con el coche hasta las cercanías del Barranco del Candil. Reunificamos el grupo y tras acabar un par de botellas grandes de agua volvemos hacia Tous, donde completaremos la primera fase de rehidratación, tras la cual ya todo parece menos malo.
Y llega el tiempo de la evaluación. Hemos hecho un recorrido a pie de muy poco más de 11 km, con un desnivel total acumulado de unos 350 metros (la parte registrada entre la presa del embalse y el inicio de la ruta a pie tiene unos 2 km de longitud y 40-50 metros de desnivel), descontado el trozo hecho en coche al inicio. Hemos parado poco y hemos estado caminando cerca de 5 horas. No ha habido problemas médicos, pero sí una indudabe pájara, que atribuímos al calor, escasa comida e insuficiente rehidratación durante la marcha. Estaba previsto que esta fuera la última salida de la temporada (siempre paramos en los meses de más calor, al menos en esta zona), pero esta ruta ha sido un buen recuerdo de que las cosas a veces no son tan fáciles y que es preciso llevar una cantidad suficiente de comida y bebida no sólo para la previsión de la ruta, sino también para los imprevistos que puedan aparecer.
El camino en el Barranco y la ferrata está marcado con hitos de piedra, siendo escasas y bastante borrosas las ocasionales manchas de pintura. Esta ruta es de dificultad moderada para gente con experiencia y bien entrenada. A nuestra edad, y aunque nos consideramos muy entrenados, nos parece difícil. Para personas con peor condición física esta ruta debe ser considerada muy difícil y, sin una amplia experiencia montañera, la consideraría peligrosa, por lo que aconsejaría evitarla. Pero si la puede realizar la ruta es preciosa, con excelentes vistas y muy divertida para senderistas deportivos.
Una última consideración, una parte de la ruta es muy sensible al nivel de las aguas en el embalse. Valore si va a poder pasar sin problemas.