Epílogo circular Camino de Santiago. Etapa 6: Muxía ~ Olveiroa
near Mugia, Galicia (España)
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Con esta sexta y última etapa completamos nuestro epílogo circular. Partimos desde Muxía y pasamos por Hospital, donde se encuentran los dos mojones que señalan la bifurcación (Muxía o Fisterra), que ya conocimos en la etapa 3 y que sería el punto exacto donde remataría esta circular. Pero, como de ida nos gustó mucho el pueblo de Olveiroa, decidimos seguir hasta allí para tomar las cervecitas ;)
Como recorrimos Muxía en anteriores ocasiones, iniciamos esta etapa en la salida del pueblo, junto a la Praia da Cruz pegada a la N-440. En ese punto comenzamos nuestra etapa siguiendo unas pasarelas de madera que van a dar a otra praia, la de Espigueirido.
Luego seguimos por un camino de bosque donde predominan los eucaliptos y vamos en suave subida hasta alcanzar el lugar de Chorente, pronto alcanzamos la Capela de San Roque de Moraime, rodeada por un amplio campo donde se celebra la romería.
Un tramo de carretera nos lleva hasta el monasterio de San Xián (o Xulián) de Moraime. Del antiguo cenobio benedictino sólo queda la iglesia de San Xián, románica del siglo XII y de planta basilical. Destacan su bello pórtico románico (puede verse bajando los escalones del porche) y los frescos góticos de su interior, pintados hacia el año 1500 y que representan los siete pecados capitales. Frente a la iglesia hay un hostel, en un edificio recientemente rehabilitado, y un bar.
Dejamos atrás Moraime y seguimos por carretera hasta alcanzar Os Muiños, una típica aldea da Costa da Morte, pero muy cuidada y bonita.
Continuamos y durante un pequeño tramo vamos disfrutando de las vistas, donde a lo lejos podemos divisar el océano, con la ría de Camariñas y la ensenada de Merexo frente a nosotros.
Al alcanzar las primeras casas de Merexo giramos a la derecha y continuamos el camino, pasamos la aldea de Vilar de Sobremonte y alcanzamos San Martiño de Ozón. Aquí destaca la Iglesia de San Martiño, que formó parte de un antiguo monasterio, con un cruceiro y su cementerio anexo. Del monasterio solo quedan restos de la iglesia, construida como templo monacal en el siglo XII, aunque algún resto nos habla de un pasado prerrománico o suevo. Más adelante podemos ver un larguísimo hórreo de piedra del siglo XVI, catalogado entre los de mayor tamaño de Galicia (aproximadamente 27 metros).
Siguiendo un camino de tierra llegamos a Quintáns, atravesamos el pueblo y pasamos junto a la Capela de Santo Isidro. Un poco más adelante encontraremos una pista de tierra que avanza por el bosque hasta el lugar de A Grixa donde podemos ver a un lado de la rúa la Igrexa de San Cibrán y al otro su espadaña, aislada sobre un muro y poco más adelante un cruceiro.
Continuamos por asfalto y llegamos al pueblo de Senande, que cruzamos por un extremo del mismo para seguir nuevamente la carretera. Poco más adelante cruzamos el puente sobre el río Castro para continuar hasta Trasufre, parroquia de San Pedro de Coucieiro y que alberga la capilla de Nuestra Señora del Espino, donde cada tercer fin de semana de septiembre van los romeros a sanar sus verrugas en la fuente próxima.
Un camino bastante agradable nos lleva ahora hasta la AC-552 (A Coruña-Fisterra) que debemos cruzar con mucha precaución pues es un punto negro donde ya hubo varios accidentes.
Por carretera salvamos el río Fragoso y llegamos a Dumbría, que cuenta con todos los servicios. Pasamos junto al Centro de Salud, el Concello y la Igrexa de Santa Baia de los siglos XVII y XVIII con portada de estilo románico.
Tras cruzar el Rego do Cheo hacemos un giro a la izquierda y enseguida llegamos al albergue público de peregrinos O Conco, que llama la atención por su diseño moderno y multicolor.
Continuamos hasta alcanzar el lugar de As Carizas, cruzamos los regos de Valcabana y Vao Salgueiro y llegamos a la carretera. Desde aquí debemos avanzar con precaución por el arcén durante algo más de 1 km, hasta alcanzar la gran rotonda donde se encuentra la bifurcación, señalizada con dos mojones, de los caminos a Fisterra y a Muxía.
Volvemos a cruzar la carretera con precaución. Ahora nos toca repetir el tramo que nos llevará hasta Olveiroa, pero a la inversa. Pronto alcanzamos el lugar de Hospital, donde a principios del siglo XIII había un hospital de peregrinos, probablemente el más antiguo del camino de Fisterra y sustituido hoy por un moderno centro de información.
Por pista de tierra bajamos hacia O Logoso, que cuenta con albergue privado, bar y una pensión-restaurante. Seguimos en bajada y pronto cruzamos el rego do Hospital por el puente de Vao de Ripas y avanzamos por la ladera de la montaña con unas vistas increíbles hacia el río Xallas, que fluye encajonado por una tupida vegetación, también podemos divisar a lo lejos el embalse de Castrelo.
Nos vamos acercando a Olveiroa, tras cruzar el rego do Cadro pasamos junto al lavadoiro que está junto a otro rego, el de Santa Lucía. Ya en el pueblo nos acercamos a la Igrexa de Santiago de Olveiroa, construida en el siglo XII pero con reformas posteriores en el siglo XVIII y XIX que mezclaron diversos estilos arquitectónicos. El retablo de la capilla mayor pertenece al estilo neoclásico y en él destaca la imagen de Santiago peregrino.
Aquí ponemos fin a este epílogo que después de los kilómetros recorridos nos terminó gustando mucho por todos los lugares que conocimos y también porque tuvo mucho menos asfalto del que esperábamos.
Esta etapa la señalamos como moderada sólo por la cantidad de kms, pero bien podría señalarse como fácil ya que no presenta dificultades y los desniveles son bastante suaves. Por último señalar que en el sentido en que la realizamos se encuentra bien señalizada.
BUEN CAMINO!
Como recorrimos Muxía en anteriores ocasiones, iniciamos esta etapa en la salida del pueblo, junto a la Praia da Cruz pegada a la N-440. En ese punto comenzamos nuestra etapa siguiendo unas pasarelas de madera que van a dar a otra praia, la de Espigueirido.
Luego seguimos por un camino de bosque donde predominan los eucaliptos y vamos en suave subida hasta alcanzar el lugar de Chorente, pronto alcanzamos la Capela de San Roque de Moraime, rodeada por un amplio campo donde se celebra la romería.
Un tramo de carretera nos lleva hasta el monasterio de San Xián (o Xulián) de Moraime. Del antiguo cenobio benedictino sólo queda la iglesia de San Xián, románica del siglo XII y de planta basilical. Destacan su bello pórtico románico (puede verse bajando los escalones del porche) y los frescos góticos de su interior, pintados hacia el año 1500 y que representan los siete pecados capitales. Frente a la iglesia hay un hostel, en un edificio recientemente rehabilitado, y un bar.
Dejamos atrás Moraime y seguimos por carretera hasta alcanzar Os Muiños, una típica aldea da Costa da Morte, pero muy cuidada y bonita.
Continuamos y durante un pequeño tramo vamos disfrutando de las vistas, donde a lo lejos podemos divisar el océano, con la ría de Camariñas y la ensenada de Merexo frente a nosotros.
Al alcanzar las primeras casas de Merexo giramos a la derecha y continuamos el camino, pasamos la aldea de Vilar de Sobremonte y alcanzamos San Martiño de Ozón. Aquí destaca la Iglesia de San Martiño, que formó parte de un antiguo monasterio, con un cruceiro y su cementerio anexo. Del monasterio solo quedan restos de la iglesia, construida como templo monacal en el siglo XII, aunque algún resto nos habla de un pasado prerrománico o suevo. Más adelante podemos ver un larguísimo hórreo de piedra del siglo XVI, catalogado entre los de mayor tamaño de Galicia (aproximadamente 27 metros).
Siguiendo un camino de tierra llegamos a Quintáns, atravesamos el pueblo y pasamos junto a la Capela de Santo Isidro. Un poco más adelante encontraremos una pista de tierra que avanza por el bosque hasta el lugar de A Grixa donde podemos ver a un lado de la rúa la Igrexa de San Cibrán y al otro su espadaña, aislada sobre un muro y poco más adelante un cruceiro.
Continuamos por asfalto y llegamos al pueblo de Senande, que cruzamos por un extremo del mismo para seguir nuevamente la carretera. Poco más adelante cruzamos el puente sobre el río Castro para continuar hasta Trasufre, parroquia de San Pedro de Coucieiro y que alberga la capilla de Nuestra Señora del Espino, donde cada tercer fin de semana de septiembre van los romeros a sanar sus verrugas en la fuente próxima.
Un camino bastante agradable nos lleva ahora hasta la AC-552 (A Coruña-Fisterra) que debemos cruzar con mucha precaución pues es un punto negro donde ya hubo varios accidentes.
Por carretera salvamos el río Fragoso y llegamos a Dumbría, que cuenta con todos los servicios. Pasamos junto al Centro de Salud, el Concello y la Igrexa de Santa Baia de los siglos XVII y XVIII con portada de estilo románico.
Tras cruzar el Rego do Cheo hacemos un giro a la izquierda y enseguida llegamos al albergue público de peregrinos O Conco, que llama la atención por su diseño moderno y multicolor.
Continuamos hasta alcanzar el lugar de As Carizas, cruzamos los regos de Valcabana y Vao Salgueiro y llegamos a la carretera. Desde aquí debemos avanzar con precaución por el arcén durante algo más de 1 km, hasta alcanzar la gran rotonda donde se encuentra la bifurcación, señalizada con dos mojones, de los caminos a Fisterra y a Muxía.
Volvemos a cruzar la carretera con precaución. Ahora nos toca repetir el tramo que nos llevará hasta Olveiroa, pero a la inversa. Pronto alcanzamos el lugar de Hospital, donde a principios del siglo XIII había un hospital de peregrinos, probablemente el más antiguo del camino de Fisterra y sustituido hoy por un moderno centro de información.
Por pista de tierra bajamos hacia O Logoso, que cuenta con albergue privado, bar y una pensión-restaurante. Seguimos en bajada y pronto cruzamos el rego do Hospital por el puente de Vao de Ripas y avanzamos por la ladera de la montaña con unas vistas increíbles hacia el río Xallas, que fluye encajonado por una tupida vegetación, también podemos divisar a lo lejos el embalse de Castrelo.
Nos vamos acercando a Olveiroa, tras cruzar el rego do Cadro pasamos junto al lavadoiro que está junto a otro rego, el de Santa Lucía. Ya en el pueblo nos acercamos a la Igrexa de Santiago de Olveiroa, construida en el siglo XII pero con reformas posteriores en el siglo XVIII y XIX que mezclaron diversos estilos arquitectónicos. El retablo de la capilla mayor pertenece al estilo neoclásico y en él destaca la imagen de Santiago peregrino.
Aquí ponemos fin a este epílogo que después de los kilómetros recorridos nos terminó gustando mucho por todos los lugares que conocimos y también porque tuvo mucho menos asfalto del que esperábamos.
Esta etapa la señalamos como moderada sólo por la cantidad de kms, pero bien podría señalarse como fácil ya que no presenta dificultades y los desniveles son bastante suaves. Por último señalar que en el sentido en que la realizamos se encuentra bien señalizada.
BUEN CAMINO!
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Comments (2)
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Un epílogo del camino que resulta gratificante para los sentidos, no se puede dejar sin hacer, salvo la precaución que hay que tener para cruzar en varias carreteras es un trazado sin mayor dificultad que recomiendo hacer con buen tiempo para disfrutar mejor del paisaje de la zona.
Asi es manolorive, realmente mereció la pena! Gracias por tu valoración!! 😊