Erese Alto - Tío Pedro Martín - Guarazoca - Vista Roques de Salmor - Mirador de La Peña - ermita de La Peña -Garoé-Erese Alto-

Casa Tío Pedro Martín, comienzo de la ruta

Punto de partida y de llegada a esta ruta circular

Gallinas

En la ruta nos podemos encontrar con diferentes animales domésticos, en este caso gallinas

Ciruelas

A lo largo del camino, nos encontramos también diferentes arboles frutales, aqui vemos unas apetecibles ciruelas

Cruces delante de la casa

Era costumbre de tiempos pasados, pero no tan lejanos, poner una cruz a la entrada de cada casa, en recuerdo de cada familiar fallecido. Una forma de honrar y recordar a las personas que convivieron con los habitantes de las casas. Algunos visitantes se extrañan de esta tradición, pensando que allí, donde están las cruces, están enterrados los familiares fallecidos, nada más lejos de la realidad .

Camino antiguo.

Después de abandonar la pista asfaltada, nos adentramos por una vereda, o camino antiguo.

Túnel de Frontera

En el camino, hacia nuestra primera parada, pasamos sobre el túnel de los Roquillos, en la carretera que une Valverde con Frontera.

Roques de Salmor

Primera parada en la ruta, vista de Los Roques de Salmor, desde una perspectiva diferente a las habituales, desde el acantilado.

Roques de Salmor

Otra visión de los Roques de Salmor, antiguo hábitat de los lagartos homónimos.

Roques de Salmor

La belleza de la panorámica, obliga a repetir las instantáneas. Que las disfruten tanto como yo. Impresiona desde la altura oír sólo el viento y las olas del mar. Algunas embarcaciones se acercan hasta los Roques, permaneciendo poco tiempo paradas, las corrientes les obliga a moverse.

Frontera

Frontera, el Golfo, con una estela de una embarcación.

Aljibe

Antiguo aljibe utilizado para recoger el agua de las lluvias, esto permitía tener agua para el ganado que pastaba en las fincas.

Camino

En la subida hacia el mirador de la Peña, se puede ver lo sinuoso y pendiente que es el camino de subida.

Vista de Los Roques de Salmor llegando a El Mirador de La Peña

Otra vista de Los Roques de Salmor, llegando a El Mirador de La Peña

Mirador de La Peña

El Mirador de La Peña, diseñado por el artista Lanzaroteño César Manrique, ofrece servicio de restauración y es un buen lugar para hacer una pausa y reponer fuerzas.

Ermita de La Peña

En el comienzo del antiguo camino que llevaba a Frontera por el risco de Tibataje, e encuentra la ermita de La Peña. El camino era utilizado por las antiguas "mudadas" por los vecinos de Erese y Guarazoca que dos veces al año se cambiaban de domicilio a Las Puntas y a los Mocanes principalmente. Al iniciar o al finalizar el camino era parada obligatoria para pedir o agradecer que se haya podido realizar el camino sin problemas.

Poste informativo

Vacas

Durante el recorrido podemos encontrarnos con ganado pastando en los cercados delimitados con paredes de piedra seca, en inviernos es más frecuente y ofrece una vista más colorida.

Caballo

Garoé al fondo

Las montañas donde se encuentra el árbol garoé, siguiente parada en la ruta.

Poste Informativo

Ovejas Pelibuey

La pelibuey es una raza de oveja que por lo general no cría lana (deslanada); esta adaptación la hace especialmente útil en regiones intertropicales donde las ovejas con lana no sobreviven. Los machos carecen de cuernos, al contrario que las ovejas de lana. Se trata de una raza criada especialmente en climas calurosos para el consumo de su carne y la obtención de estiércol de primera calidad.

Desvío al Garoé

Tomamos una desviación a la izquierda, y empezamos a subir por un camino dejando la pista de tierra. En esta ocasión no estaba el cartel indicativo del desvío. Este camino era utilizado por los antiguos habitantes de Guarazoca, Erese, Las Montañetas y Las casas del Monte, para ir a buscar agua en las albercas que rodeaban al Garoé, cada familia tenía asignada su alberca. K

Subiendo a El Garoé

Desde El Garoé

Una vez llegado al El Garoé, punto más alto de la ruta se puede ver esta impresionante vista, con la meseta de Nisdafe al fondo.

Centro Visitante Garoé

Cuentan las crónicas de la Conquista que en la Isla del Hierro hubo un árbol al que los naturales llamaban Garoé. No conocían los españoles de otro árbol similar en todo el archipiélago o tierra conocida. El caso es que las grandes hojas del Garoé eran capaces de captar y destilar el agua de las nieblas que a él llegaban, agua que se recogía en grandes oquedades hechas en torno al árbol por los bimbaches, siendo la principal fuente de agua de este pueblo. No había más agua en el Hierro que la que dimanaba del Garoé. Por ello, el pueblo bimbache ―entonces una escasa población― tenía al Garoé por una divinidad digna de toda adoración.

Ventejis

Este espacio protegido posee una extraordinaria calidad de elementos naturales y humanos, lo cual configura un paisaje de gran valor. En él se dan cita aprovechamientos agrícolas y ganaderos al estilo tradicional herreño. Estas actividades han ido transformando las características naturales del medio para constituir un paisaje cargado de connotaciones culturales de gran interés.

Poste informativo

Este camino se bifurca en diferentes rutas que conduce a los pueblos cercanos. Una ruta aconsejable es la que nos lleva hasta Valverde, caminos utilizados para ir a buscar agua en las albercas que rodean al Garoé.

Descendiendo de Garoé 1

Descendemos por otro camino utilizado antiguamente por la gente del norte, hoy poco transitado y mal señalizado. Me trae recuerdos de la infancia, por ser el utilizado cuando visité por primera vez el Garoé, guiado por mi abuelo Pedro, que me comentaba los nombre de cada tramo del camino. En determinados momentos el camino transcurre debajo de los boles que le dan una belleza singular.

Descendiendo de Garoé 2

Como hemos comentado es un camino poco utilizado, muestra signos de abandono, pero la belleza del paisaje y la vegetación llama la atención. El camino termina en la carretera que lleva a Betenama a la altura de Las Montañetas.

Guachinche Aguadara

Otra parada parada en el camino para reponer fuerzas, Guachinche Aguadara ofrece un menú variado, carnes, vegetariano, vegano, etc. Dispone de jardines, zona para niños con juegos, terraza lugar agradable.

Casas del Monte

Casas del Monte antiguo caserío, hoy prácticamente deshabitado.

Animales en el camino

Llegando al final de la ruta, nos encontramos con una finca donde podemos encontrarnos con diversos animales, desde el camino se pueden ver patos, gallinas, cabras, ovejas, hasta un burro. Merece la pena detenerse a observarlos.

Animales en el camino

Llegando al final de la ruta, nos encontramos con una finca donde podemos encontrarnos con diversos animales, desde el camino se pueden ver patos, gallinas, cabras, ovejas, hasta un burro. Merece la pena detenerse a observarlos.

Animales en el camino

Llegando al final de la ruta, nos encontramos con una finca donde podemos encontrarnos con diversos animales, desde el camino se pueden ver patos, gallinas, cabras, ovejas, hasta un burro. Merece la pena detenerse a observarlos.

Casa Tío Pedro Martín.

Fin de la ruta.