Erlo (1.030m) desde el parking de Aittola

La ruta que realizaremos hoy discurrirá por uno de los paisajes más bonitos y variados de la geografía gipuzkoana y vasca, pudiendo contemplarse en la mayor parte del camino tanto la costa por un lado como la Gipuzkoa verde y rural por el otro. A medida que vamos ganando también altura podemos empezar a contemplar las cimas más significativas así como al fondo el inicio del Pirineo.

Dejamos el coche en el parking bien preparado del barrio Aittola, perteneciente a las cotas más altas de Azkoitia. Para poder acceder a él, casi a la altura del túnel de Azkarate habrá que tomar el desvió que nos lleva hacia el barrio Madariaga y a partir de aquí continuar carretera arriba también con las indicaciones de la zona de recreo que nos ofrece este Parking.

Una vez empezamos a caminar cruzamos el Parking y entramos en el camino. Veremos varias señales indicativas, tanto a Erlo como al refugio de Xoxote como a las cimas que los rodean, por lo que el camino no tiene lugar a perdida. Siguiendo las marcas rojas.

Nos adentramos todo el camino por un bosque en donde este acabará en un mirador llamado “Begiratokia” en donde podemos empezar a contemplar de buena manera el lugar espectacular en el que nos encontramos.

Tras reanudar la marcha podemos tomar cualquiera de los dos caminos que salen del bosque, puesto que ambos darán al mismo lado, un claro el cual coronaremos llegando al collado de Izarraitz en donde ya se empezaran a distinguir los tres picos característicos de esta zona: Xoxote, Kakute y Erlo.

Aquí se abrirá un camino de pista de grava muy fácil de seguir y que hace varios zigzags, pensado para subir materiales y para poder llevar a cabo el mantenimiento de la estación que se encuentra muy próxima a la cima que realizaremos. Por lo tanto, continuaremos esta pista, la cual dejaremos en alguna ocasión con motivo de atajar subiendo recto por los caminos que acortan el camino.

Ya nos situamos justo debajo de la cima, siempre en la pista de grava, por lo que podemos dejarla atrás y subir los 5 minutos que nos quedan a la cima por uno de los muchos caminos pisados que llevan hasta la tan ansiada cruz.

Una vez en la cima contemplamos las vistas, dejando a nuestros pies Azpeitia y Errezil, y al otro lado la costa gipuzkoana. También podemos distinguir las cimas de Anboto, Txindoki y Aizkorri así como se empiezan a contemplar los primeros Pirineos nevados debido a la fecha en la que nos encontramos.

La vuelta la realizaremos por el mismo camino apartándonos en algunos lugares a sacar fotografías y contemplar el paisaje.