Ermita de Santa Marina, Kukutxa o Elorritxugana y Larragorri o Jesuri desde ermita Santiago -Katadio (Zubiaur/Orozco)

Bajando el pto Altube desde Vitoria y después de pasar el cruce de Amurrio, llegamos al pueblo vizcaino de Orozko/Zubiaur. Pocos metros antes de llegar a las primeras casas hay una señal indicando Katadio a la izquierda. En un par de km se llega pero aparcamos unos metros antes en la ermita de Santiago que tiene mesas para el descanso y barbacoa. Salimos por la dcha cogiendo una pista acementada y en unos metros girar a la izda y seguir las marcas de PR, blancas y amarillas. En un tramo decidimos acortar entre el bosque por una senda no muy transitada que se ha ido tapando con los helechos hasta llegar de nuevo a la pista donde hay un mojón de piedras enorme. En el mismo cruce cogemos la senda que sube recto hasta la ermita de Santa Marina donde se suele celebrar romeria. Bonitas vistas de Llodio y entorno.
Seguimos hacia el oeste bajando un poco y por la pista pasamos por la fuente Jesuripotzueta. Ahora ya subiendo y girando a la derecha en el cruce de caminos. Pasamos por el alto del Senagorta sin buzón y un poco más adelante llegamos al alto del Kukutza o Elorritxugana que es el puntuable en el dia de hoy. Regresamos de nuevo hasta el cruce anterior y seguimos recto unos metros para girar a la dcha siguiendo un camino hasta un pequeño alto donde se gira de nuevo esta vez a la izda dir E. para subir por pradera hasta el alto del Jesuri, puntuable en su dia y un poco más alto que el anterior.
Seguimos la dirección para ir descendiendo hasta el collado de la bajada de la ermita. Giramos a la derecha por una pista casi senda que tras varias revueltas nos lleva a los caserios de Izartza. Intentamos seguir una senda antigüa marcada en el plano pero los aldeanos han cerrado con vallas todo apropiándose del terreno donde se debería transitar sin dificultad. Las diputaciones deberían poner un poco más de interés para que no ocurrieran estas cosas. Total que tenemos que regresar para coger la pista que sube un poco y llegamos de nuevo al mojón de piedras. Aquí decidimos seguir recto esta vez por el hayedo muy bonito y tras varias revueltas ya bajando, llegamos de nuevo a la ermita donde habíamos dejado el coche. Bonito recorrido y con poco dificultad.