Ermita San Salvador de Castillonroy, Sierra de Montpedró 728 m. circular

La ruta realizada es una circular al pico Montpedró, visitando la ermita de Castillonroy que está en su cima y realizando distintas variantes en el recorrido respecto a otras ocasiones en que he visitado este excelente mirador.

La Ermita románico – gótica de San Salvador está situada en lo alto del pico de Montpedró, de 728 m. de altitud, se trata de un cerro pre-pirenaico de roca caliza situado en la comarca oscense de La Litera, a escasa distancia de la provincia de Lérida.

El acceso lo hicimos partiendo desde la fuente de Santa Ana, un área recreativa que hay junto a la carretera que conduce al poblado de Confederación, en las proximidades de la presa de Santa Ana. A este lugar se accede desde la localidad de Alfarrás (Lérida) dirección al valle de Arán por la carretera N-230.

Desde la citada área de picnic / recreativa, un bonito sendero rodea primero hacia el sur y más adelante virando al oeste la falda del pico Montpedró, pasando primero junto a un joven pinar de repoblación y al salir de ellos como si fuésemos a Castillonroy, una amplia y despejada zona que en primavera se cubre de flores silvestres.

A medida que avanzamos, podremos observar la adaptación de multitud de plantas a un terreno soleado, seco y expuesto a las inclemencias climatológicas, en este terreno semi árido en el que de la senda para abajo no existe arbolado, per al menos sí hay pinares hacia la montaña.

En un momento determinado, caminando en paralelo a un camino que está unos metros más abajo a nuestra izquierda, observaremos que la senda por la que andamos comienza a ganar altura apartándose del camino. Sin darnos cuenta, estaremos metidos en una bonita ascensión al Montpedró por su cara suroeste, sin pesados caminos, todo por la senda SL-23.

A partir de aquí la ascensión es mas directa y gana pendiente, pero la configuración de la traza hace que sea muy llevadera y breve. En un rato habremos superado la muralla de caliza y nos encontraremos en la cima de esta montaña tan curiosa y a la vez desconocida para quienes no son de la comarca o proximidades. El tiempo es bueno y las vistas magníficas.

La ermita de San Salvador situada en la cima fue restaurada en los años 2001 y 2002, por lo visto se tuvo que utilizar un helicóptero para hacer acopio de material.

Cada año se hace una romería desde Castillonroy, como curiosidad constructiva diré que tiene una especie de porche abierto al sur que es como si se tratara de un mirador (no he visto otra ermita igual) por lo que no me extraña que no pare de subir gente de las comarcas vecinas ya que pocos lugares se encuentran cerca del llano con unas panorámicas tan excepcionales.

Hacemos las fotos de rigor e iniciamos el descenso por un camino distinto, para ello tendremos que seguir el cordal superior dirección norte, unos 200 m. de terreno rocoso con algún que otro agujero en la caliza, sorteando las abundantes plantas aromáticas, plantas crasas y también las llamadas flores de papel. Luego descenderemos por unas escaleras talladas en la pared de piedra hasta una esplanada donde finaliza el camino que es utilizado en las romerías de Castillonroy.

Desde esta esplanada descendemos el camino solo unos metros para desviar por la derecha hacia un caminito estrecho (SL-23) que desciende bruscamente de nuevo.

No tomaremos una visible senda que baja directa a Santa Ana por nuestra derecha sino que continuaremos por el camino de frente. Algo más abajo sí realizaremos un atajo por una trocha menos marcada y así evitamos un largo rodeo por el camino (WP07).

Cuando recuperamos el camino que seguimos hacia la derecha, nos enfrentamos a un dilema: seguir por el camino de frente descendiendo directos a Santa Ana (pista del colector creo que la llaman, vereda de Baldellou), o bien continuar explorando, pues bien, decidimos esta segunda opción así que 150 m. más adelante encontramos un sendero por la izquierda que sube a la sierra de Bardella, lo que viene a ser la divisoria entre la solana de Santa Ana y la ubaga de Baldellou.

El sendero es un poco bestia pero valió la pena porque ya enla parte alta encontramos un buen camino ya hacia el este, luego sendero por un magnífico bosque, y a continuacion un fuerte descenso por un sendero que no conocíamos desde le cual se obtienen excelentes vistas sobre las aguas del pantano de Santa Ana.

Una vez llegamos al poblado (de nuevo encontramos la vereda de Baldellou) nos dirigimos por carretera hasta el coche, sin mas novedades relevantes.