Esparreguera-Turó de Can Dolcet 100 Cims

Caminantes avezados, como somos, nos vemos obligados hoy a convertirnos en paseantes. Citas médicas del alocado diseñador de rutas y lesiones del adusto castellano, nos empujan a elegir objetivo asequible y cercano. Aunque incluido en los 100 cims, conquistar el Turó de Can Dolcet, apenas nos sirve de coartada, dada la nimia dificultad de la ruta, y la escasez de incentivos que la puedan adornar. Discurriendo en parte paralela a la autovía, solo la belleza y majestuosidad del macizo de Montserrat, compensa o hace perdonar el incesante y atronador rumor de fondo que genera aquella. Casi ajenos a paseantes de perros y algunos senderistas con quienes nos cruzamos, avanzamos enfrascados en disquisiciones sobre salidas de tono en la actual campaña política, robo o compra de votos por correo, seguido de derrotas en la Champions, y pronósticos sobre la fecha de retirada de Nadal; este año en Roland Garros, o el siguiente en la Olimpiada, son las opciones que pretenden ser el certero oráculo. Admiramos La Vinya Vella, agradecidos como somos ante todo los que se nos pueda ofrecer, apenas unos instantes, para sin apenas encontrar nada destacable y en un tiempo digno de figurar en nuestro cuadro de honor, coronamos la "cima". Aunque la cumbre no es muy elevada, humilde y empequeñecida por la cercana Montserrat, nos regala vistas sobre un verde valle y lejanas montañas. Adivinamos las alturas de la gran urbe , poniendoles nombre con acierto, a pesar de estar sumergidas en la eterna neblina que la rodea. Olivos y almendros flanquean el camino, dando pie a nuestro erudito compañero a hablarnos sobre nuevas técnicas de cultivo, para tomando impulso, añadir infinitos datos sobre incontables temas, algunos ya muy manidos, por repetidos, otros menos, por algo novedosos. En apenas un pestañeo, llegamos de nuevo al puente de la autovía, precedidos por un nutrido grupo de bastoneros, a los que adelantamos con encono, para dejar constancia de nuestra suficiencia. Citamos al castellano en el barrio del diseñador, para facilitar desplazamientos, y así cerrar los temas, durante la nutrición, de la expedición a Salamanca y Portugal, donde rutas y visitas nos ocuparán los próximos días.