Espiguete cara sur

El pico Espigüete, emplazado en la montaña palentina, es la segunda cumbre más alta tras su vecino el pico Curavacas. Su ascensión puede realizarse desde varias vertientes y en todos los casos es dura por las fuertes pendientes a superar. La ruta que se describe para la ascensión se realiza por su ladera sur, llamada la Pedrera, la más frecuentada. Partimos desde el pueblo palentino de Cardaño de Abajo.
Una vez en Cardaño de Abajo, a 1315 metros de altitud, dejamos el coche y salimos por una pista marcada siguiendo la llamada Dehesa de Cardaño. El recorrido es agradable y avanzamos algunos kilómetros por bosques caducifolios. La ladera sur del Espigüete es visible en todo momento y según avanzamos se nos va haciendo más grande.Tras recorrer algo más de cuatro kilómetros, nos situamos directamente sobre la base de al montaña. Hay una señal que indica que aquí debemos comenzar la ascensión.
El tramo inicial se presenta como una empinada ladera rocosa por la que avanzamos en zigzag sin un camino claro. El tamaño de las piedras es relativamente grande por lo que la progresión es cómoda.
Según vamos ganando altitud, las vistas sobre el alto valle del río Carrión abajo se nos van aumentando. En primer término el embalse de Compuerto y la Sierra de Canales.
Llegamos al final de la ladera pedregosa limitada por una pared rocosa que bordeamos desviándonos hacia la izquierda superando un pequeño portillo, situándonos ya directamente en la base de la ladera que nos dejará en la cima. La ladera se nos presenta desde el comienzo compuesta de piedra fina y gravilla. Al ser la pendiente fuerte, nos obliga a caminar con mucha atención para evitar cualquier resbalón. Por los laterales, el tamaño de la piedra es mayor y es más fácil ascender sin miedo a resbalar.
Terminamos la pedrera con cierto alivio y nos colocamos directamente sobre el pequeño cordal que forma la cima. Divisamos ya el lado norte. La cima ocupa el extremo más occidental del cordal rocoso, que recorremos con cierta precaución ya que el espolón está flanqueado por profundos caídas.