Etapa 2 - Camino Natural de la Ruta del Cantábrico (Playa de las Catedrales - Foz)

El Camino Natural de la Ruta del Cantábrico, en las provincias gallegas de Lugo y A Coruña, recorre la franja costera a lo largo de más 150 kilómetros distribuidos en 7 etapas y 3 ramales. Recorrerlo permitirá visitar bellas localidades como Ribadeo, Foz, Burela, San Cibrao, Viveiro, O Vicedo, O Barqueiro, Porto de Espasante y Ladrido, y disfrutar de innumerables playas de bella factura, destacando entre ellas la playa de Las Catedrales declarada Monumento Natural.
El itinerario se puede realizar a pie y en bicicleta, siendo ciclable en la mayor parte del trazado, existiendo varios tramos compartidos con el tráfico motorizado, en los que habrá que extremar las precauciones.
El trazado está perfectamente señalizado y la única dificultad reside en el largo kilometraje de sus etapas.

Etapa 2:
Iniciamos la ruta en el Monumento Natural de la Playa de las Catedrales que, dada la temprana hora a la que hemos llegado, podemos visitar con la tranquilidad que no tuvimos al finalizar la primera etapa. Son las ventajas de madrugar,
La ruta continúa por una pasarela de madera, en paralelo a la carretera LU-610, que permite ver la playa desde las alturas. Esta pasarela continua hasta el inicio de la playa Arealonga.
Continuamos en paralelo a esta larguísima playa, disfrutando de sus vistas y seguiremos avanzando por el paseo, visitando la Punta do Castro, la playa de As Pasadas, la Punta Corveira, la playa Fontela, la playa Coto, la playa del Acantilado de Remior y la playa de San Bartolo.
Superada la Punta de Prados, tenemos ya a la vista la población de Foz y aunque parece que está al alcance de la mano, no hemos llegado todavía ni a la mitad de la ruta.
Comenzaremos en breve a rodear la Ría de Foz-Masma y es una tarea que nos llevará unos cuantos kilómetros.
Tras bordear una zona residencial, nos adentramos en el bosque de eucaliptos de Os Pasos y lo iremos atravesando alternando pistas con tramos asfaltados.
El sendero del bosque y sus aromas, nos acerca a la Laguna de los Patos, precioso lugar donde se respira tranquilidad.
El camino desciende hasta la carretera N-642 y a partir de aquí comienza el tramo más feo de la ruta, ya que caminamos en paralelo a esta ruidosa vía, por lo que la calma del bosque y el paseo marítimo se terminan.
Todavía nos quedan las bonitas vistas desde el puente que cruza la desembocadura del río Masma, que forma a partir de aquí la Ría de Foz.
Giramos a la derecha e iniciamos una subida por una estrecha carretera asfaltada, donde compartimos nuestros pasos con una explotación ganadera y algunos coches, por lo que hay que extremar las precauciones.
Tras cruzar otra zona residencial, entramos en una nueva pista de tierra que nos lleva a cruzar otro pequeño bosque de eucaliptos que va sorteando las curvas que conforman la ría.
Tras una pequeña rampa de tierra sobre el kilómetro 20 de la ruta, llegamos a la altura del campo de fútbol de Foz.
La ruta gira a la derecha pero en nuestro caso, giramos a la izquierda para dirigirnos a nuestro alojamiento en el pueblo de Foz, donde daremos por finalizada la etapa.