Etretat

Comenzamos la ruta desde un aparcamiento que hay situado en la entrado del pueblo. Hay uno para caravanas y otro para coches. Aparcar allí cuesta 3€ el día, pero merece la pena porque hay aviso de robos. Para comenzar la ruta tenemos dos opciones; desde el sendero o desde el pueblo. Nos decantantamos por en el sendero. Vamos avanzando por el y podemos ver gran cantidad de extensos campos de cultivo de los que gran cantidad son el modo de ganarse la vida de los normandos de esos pequeños pueblitos. También hay abundante ganado y aunque no hay unas vistas muy bonitas, hacen el camino más entretenido. Pasamos por un frondoso bosque y al salir de el, ya podemos divisar a lo lejos el mar. Continuamos y hacia mitad de recorrido nos encontramos con el faro Etretat. No es de gran belleza visual y decidimos continuar y no subir hacia el. A pocos minutos encontramos lo que parece una pequeña cala. Para acceder a ella debemos descender una empinada y larga escalera, pero el espectáculo con el cual nos encontramos hace que merezca la pena sabiendo que luego hay que subir esas escaleras. Es una cala muy poco frecuentada, donde se respira tranquilidad . El suelo es de piedritas blancas y el mar es clara y azul. Se empiezan a divisar los primeros acantilados que más adelante serán la maravilla de esta ruta. Después de retomar fuerzas decidimos continuar y subir los 87m de desnivel que habíamos descendido. A partir de ahí comienza la segunda parte del recorrido , la más espectacular. Una serie de impresionantes acantilados de roca blanca que contrastan con el azul marino del mar. Algunos de los acantilados dan la opcion de acercarse hasta la mismísima punta de ellos y poder sentir esa sensación de vértigo de tener el mar a tus pies. Terminando el recorrido aparece ante nuestros ojos el pequeño y mágico pueblo de Etretat. Un pueblo típico normando con sus sobrios tejados de pizarra y una playa tranquila como pie de sus impresionantes acantilados. Hacemos un pequeño recorrido adentrandonos en el pueblo para descubrir sus encantos y terminamos la ruta subiendo hacia el aparcamientos.