Fuente Fornos y Chorro Fornos desde Badaín. Sobrarbe (Huesca).

Sencilla excursión a la surgencia de Fuente Fornos y la cascada o chorro de Fornos desde Badaín, en la comarca del Sobrarbe.

La ruta parte del pueblo de Badaín, muy cerca de Lafortunada. Debemos dejar el coche antes de entrar al pueblo, junto a la carretera, pues el espacio para aparcar en el pueblo es muy escaso.

Comenzamos a caminar y subimos a Badaín para ver su iglesia, muy bonita y fotogénica. Tras la visita obligada salimos del pueblo por el GR-15 pero muy pronto lo abandonaremos para seguir a mano derecha por el sendero que conduce al Chorro de Fornos, bien conocido y muy bien hollado.

El sendero no tiene dificultad alguna. Cruza un frondoso bosque y está muy bien marcado, además es llevadero pues el desnivel es escaso, se sube poco a poco y hay muchos tramos de sombra.

Tras cruzar un puente de madera un poco abandonado, seguiremos avanzando río arriba hasta dar con un segundo puente, este de metal, muy cerca de la confluencia del río Irués y del barranco de la Garona. Lo cruzaremos y seguiremos al otro lado un ratito hasta ver a mano izquierda un desvío sin señalizar pero bastante evidente con marcas de pintura blanca y naranja (red de senderos de Laspuña). Seguiremos por este camino hasta las surgencias de Fornos.

El camino asciende levemente y discurre por el cañón o gorga del río Irués. Primero alcanzaremos la surgencia conocida como Fuente Fornos. Hay un desvío a mano izquierda sin señalizar que es clave para llegar a la cascada que conforma este nacedero. Es recomendable tomarlo pues, desde el camino principal, veremos la surgencia de manera muy parcial.

Tras echar unas fotos, vuelvo al camino principal y continuaremos río arriba. Veremos un sencillo paso equipado con cuerda que puede pasarse fácilmente sin usarla y después un paso un tanto expuesto debido a un desprendimiento.

Superados estos puntos, alcanzaremos el entorno del Chorro Fornos. A la derecha hay una surgencia bonita parecida a la vista en la Fuente Fornos. Si seguimos de frente, cruzaremos el arroyo por un paso equipado a modo de escalera de metal para después llegar a su base. Esta surgencia es algo decepcionante porque baja con poco caudal. Para cogerla con agua tendremos que venir después de fuertes precipitaciones o en mayo con el deshielo. En esta ocasión, salía poca agua de la surgencia a pesar de las lluvias de marzo y de lo crecido que baja el río Irués.

Tras echar las fotos de rigor, volvemos por el mismo camino y con bastante calma hasta Badaín. Lo peor de la ruta fue ver el Chorro Fornos sin apenas agua a pesar del buen caudal que bajaba el río, por el resto de cosas merece la pena.